Rando dialogó con La Mañana sobre las medidas que se están adoptando en la frontera con Brasil y aseguró que la situación en el país vecino es “muy compleja” por lo que puede considerarse “una amenaza permanente para la estabilidad sanitaria del Uruguay”.
La Dirección Nacional de Coordinación (Digecoor) promueve el diseño y desarrollo de estrategias del Sistema Integrado de Salud de acuerdo a las necesidades asistenciales del país. A raíz de la llegada del coronavirus (covid-19), las implicancias del organismo se vieron intensificadas. Estas últimas semanas se encuentran trabajando fuertemente en implementar medidas en la frontera de Uruguay con Brasil, específicamente en el área de Rivera con Santana do Livramento.
Para la coordinación en ambos lados de la frontera, la Subcomisión de Cooperación en materia de Salud Santana Do Livramento-Rivera creó la Unidad Epidemiológica Sanitaria Común. Esta acordó la utilización universal de test PCR en ambos lados de la frontera con un mismo criterio epistemológico.
¿Cuál es el rol de la Dirección Nacional de Coordinación?
La Digecoor es una de las direcciones generales del Ministerio de Salud Pública (MSP) y representa al ministerio en todo el territorio nacional. Su objetivo general es acercar la atención de salud a toda la población del país. Ello se logra mediante la implementación en los 19 departamentos de políticas de salud determinadas por la Dirección Nacional de Salud.
También son cometidos importantes recoger las principales necesidades de las distintas localidades del país, transmitirlas al MSP y fomentar la complementación de los servicios públicos y privados para asegurar la asistencia integral a todos los ciudadanos del país. Esas funciones las cumple a través de 19 Direcciones Departamentales de Salud (DDS) que están integradas por funcionarios médicos técnicos y administrativos del MSP.
¿Cómo se encuentra la situación actual de Rivera en la frontera con Brasil?
La situación es muy compleja y realmente podemos considerarla una amenaza permanente para la estabilidad sanitaria del Uruguay. La vida de la frontera se produce en un territorio común en el que se comparten las áreas de viviendas, los lugares de trabajo y los comercios entre la población de Uruguay y Brasil.
Como sabemos, la pandemia en Brasil está en una fase de expansión y fuera del control de las autoridades sanitarias. Si los uruguayos que viven o llegan a las fronteras no toman todas las medidas dispuestas por el gobierno, ponen en peligro la salud de todo el país. Si bien hoy los casos activos son pocos, eso no es indicador de bajo riesgo y puede cambiar de dos a 20 o 200 de un día para otro.
¿En qué consiste la Unidad Epidemiológica Sanitaria Única?
Consiste en compartir la información de los contactos epidemiológicos de los pacientes con covid-19 positivo entre ambas naciones y realizar los diagnósticos con los mismos criterios, independientemente de la nacionalidad de los habitantes.
¿Qué implica el protocolo que se implementará? ¿En qué cambia para el lado brasileño?
El acuerdo implica tomar medidas similares de prevención y de diagnóstico en ambos lados de la frontera. Esto es que las medidas de uso de tapabocas, distanciamiento, controles de aforo en los comercios deben ser similares y estar regulados y controlados en toda la ciudad (Rivera-Livramento). Por otro lado, los criterios de uso de test diagnósticos de PCR deben ser los mismos para Uruguay y Brasil. Principalmente implica ampliar el uso de tests diagnósticos en el lado brasileño de la frontera.
¿Cómo se proveerán los tests? ¿Cómo se manejaría el tema de costos? ¿Dónde se analizarían los estudios?
Esto no está acordado de forma definitiva y nuestro deseo es que se termine de acordar en el correr de una semana. La propuesta de Uruguay es proveer a Brasil de lo que necesiten: kits, procesamiento o, incluso, toma de muestreo si es necesario. La cobertura del costo se podrá realizar mediante fondos de cooperación internacional o por acuerdos interministeriales de precios. No compete a la unidad negociadora regional sino a los gobiernos centrales.
“El brote de Treinta y Tres determinó el intenso trabajo de más de 30 funcionarios por 12 horas durante los tres días para identificar el tipo de contacto y la necesidad de aislamiento y de testeo”
Hace unos días atrás Brasil aún estaba estudiando el memorándum, ¿actualmente en qué está la aprobación por las dos partes?
Se espera aún la respuesta de Brasil, quien propuso una nueva reunión a distancia antes de la decisión definitiva.
¿Ya están dadas las condiciones logísticas y técnicas como para empezar a aplicar el protocolo a la brevedad?
Si, de acordarse el protocolo Uruguay estaría pronta para comenzar de inmediato a apoyar a Brasil en lo que necesite para la realización de los test de PCR.
¿Es importante que se tomen las mismas medidas de aislamiento en ambos lados de la frontera a pesar de que en el resto del territorio nacional esas medidas están comenzando a flexibilizarse?
Sí, Brasil seguramente solicitará que en la frontera no se flexibilicen las medidas de prevención, lo que implica que el resto del país comience la apertura mientras que Rivera aún no lo haga.
Se confirmó el primer caso en Tacuarembó y hubo un brote en Treinta y Tres, ¿cómo se está actuando en los departamentos?
El brote de Treinta y Tres determinó el intenso trabajo de más de 30 funcionarios por 12 horas durante los primeros tres días (viernes, sábado y domingo) y más de 400 llamadas telefónicas para identificar el tipo de contacto y la necesidad de aislamiento y de testeo de los mismos.
Imagínense que una sola persona que concurra a la frontera y no tome las precauciones requiere de ese movimiento de recursos para contener un solo brote. Si eso nos pasa en cuatro o cinco localidades a la vez corremos el serio riesgo de perder los hilos epidemiológicos y que se nos vaya de las manos el control de la enfermedad.
Eso quiere decir que si, por ejemplo, cinco personas que van a la frontera vuelven contagiadas a diferentes lugares del país, se pierda el control de la epidemia y pueden generar un pico de contagios que en 15 días sature el sistema de salud y colapse el país como sucede en Chile.
En Tacuarembó es un caso que está aislado y los contactos identificados. Se actúa de la misma forma en todos lados del país a través de las DDS y sus referentes epidemiológicos. Cuando un departamento tiene un brote, como Treinta y Tres, se solicita a funcionarios de las DDS cercanas, en este caso Lavalleja, a dar apoyo al departamento afectado. También se brinda apoyo enviando referentes de epidemiología de Montevideo.
¿Qué balance realiza sobre las medidas y modos en que, como país, se están amortiguando los contagios, tomando en cuenta que somos vecinos del segundo país con más muertes a causa de la pandemia?
Las medidas recomendadas son correctas y si cada ciudadano las cumpliera, estaríamos a resguardo de un brote incontrolable. Ahora, yo quisiera que cada ciudadano que lee este artículo piense si él mismo cumple el distanciamiento social, la higiene de manos y el uso de tapabocas de forma correcta.
¿Cómo se debe continuar? ¿Cuán grande es el riesgo en Uruguay? Entendiendo el comienzo del invierno.
Hay que incrementar las medidas de cuidado personal con el proceso de apertura. Al contrario de lo que la gente piensa, cuanto mayor apertura, más riesgo de contagio y mayores medidas de prevención personal hay que tener.
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