ACTUALIDAD
13 de julio de 1930
“Primer campeonato mundial de football”, titulaba La Mañana relativo al comienzo de la primera edición del Campeonato Mundial de Fútbol, organizado por la FIFA. El mismo tuvo lugar entre el 13 y el 30 de julio del mencionado año.
Desde la fundación de la “más alta autoridad internacional del football” (FIFA), en 1904, se mencionaba la posibilidad de la realización de un torneo a nivel mundial, aunque el organismo aún no contaba con los medios suficientes para llevarlo a cabo. Luego de discrepancias con el Comité Olímpico, en 1928, se votó la materialización de un torneo futbolístico mundial.
Del campeonato participaron trece selecciones sin clasificatoria previa, y las sedes fueron tres estadios en Montevideo, el Estadio Centenario, construido para la cita, el Parque Central, y el Estadio Pocitos.
El mismo día del comienzo del campeonato, La Mañana lamentaba algunos fallos en la organización: “Es de lamentar, que por causas -para nosotros previstas hace ya mucho tiempo- el magno torneo no cuente con un marco de la importancia que impone tan trascendental contienda, pero, por una parte la imprevisión, por otra el pésimo estado del tiempo en lo que va del año, demasiado lluvioso, para permitir la normal construcción del formidable estadio impiden a nuestras autoridades presentar hoy una cancha digna de las brillantes jornadas que promete el Campeonato del Mundo”.
Para el torneo, la organización había dispuesto que todos los partidos se disputaran en una única sede, y para tal motivo se construyó el flamante Estadio Centenario (en referencia a la conmemoración de los 100 años de la Jura de la Constitución), con capacidad para más de 70.000 personas, definido por el mismo Mr. Jules Rimet como “templo del fútbol”.
Quienes habría de celebrar los primeros partidos del Mundial serían por un lado Francia y México, en Pocitos, y Bélgica y Estados Unidos, en el Parque Central. Ambos encuentros debían comenzar a las 2:45 p.m., como anunciaba La Mañana, aunque el tiempo haya generado una disputa entre fanáticos de Nacional y Peñarol por los minutos exactos de comienzo de cada “match”.
Luego de la práctica del equipo uruguayo, se realizó un pormenorizado análisis del team uruguayo, apuntando que “no tenemos punteros. Los forwards (delanteros) no shotean al arco”. El equipo uruguayo estaba conformado por nombres tales como Héctor Scarone, José Nasazzi, Juan Anselmo, Pedro Cea, Santos Iriarte, dirigidos por Alberto Supicci.
Participaron, además de Uruguay, otras 12 selecciones invitadas, Argentina, Bélgica, Bolivia, Brasil, Chile, Estados Unidos, Francia, México, Paraguay, Perú, Rumania, y Yugoslavia.
Finalmente, y luego de triunfar en los 4 partidos disputados, Uruguay se impuso como campeón del primer Mundial de Fútbol de la historia, organizado en nuestra tierra, hazaña que repetiría en el 1950 en Río de Janeiro en el mítico “maracanazo”.
La despedida a Luis Batlle Berres
NACIONALES
16 de julio de 1964
“La muerte de Luis Batlle deja vacío un puesto de lucha”, se leía en la tapa de La Mañana el día después del fallecimiento del político colorado y periodista uruguayo, diputado y posteriormente Presidente de Uruguay entre 1947 y 1951. Sobrino de José Batlle y Ordóñez, fue electo vicepresidente de Tomás Berreta, al cual sucedió luego de su muerte pocos meses después de asumir.
“La muerte de Luis Batlle Berres nos ha dejado profundamente dolidos. Ante todo, sentimos la pérdida de un gran ciudadano, diríamos de un prototipo de ciudadano en una democracia.
Es un ejemplo enaltecedor del hombre público, que subordina todo otro interés y toda personal conveniencia, al servicio de lo que estima el bien de su país.
No son dictadas estas palabras por causa del frágil sentimentalismo que la muerte provoca, es nuestra opinión sincera sobre Luis Batlle. Le estimábamos profundamente como hombre, como colorado y como ciudadano; y por eso lloramos su muerte”, concluía.
Proclamación de la Independencia del Pueblo Argentino
REGIONALES
9 de julio de 1966
“La Declaración de la Independencia de las Provincias Unidas proclamada por el Congreso reunido en la benemérita ciudad de San Miguel de Tucumán, clausura, en el aspecto formal, el proceso de emancipación política del pueblo argentino, iniciado el 25 de mayo de 1810”, comenzaba La Mañana a destacar los acontecimientos acaecidos 150 años atrás en la Casa de Tucumán.
De esa manera se efectuaba un acto simbólico de clamor por soberanía del pueblo frente a la corona española, pero en la perspectiva histórica se insinúa “cómo el arrebato heróico de un pueblo por el derecho a su soberanía”.
“El pueblo argentino celebra su sesquicentenario del acontecimiento más trascendente de su historia y donde el pueblo fluye con el diseño preciso de su preponderancia histórica, en medio de dificultades e incertidumbres, alterado su ordenamiento institucional y sustituido el poder civil y político por el poder militar. Al adherir a la celebración del Congreso de Tucumán, lo hacemos renovando nuestra fe en el destino de libertad y democracia del pueblo hermano”, concluía La Mañana saludando al país vecino en su fiesta patria.
TE PUEDE INTERESAR