Nicolas Schmit, comisario de Empleo y Derechos Sociales, dijo que todos los años “cientos de miles de trabajadores de temporada ayudan a mantener sectores vitales de la economía de la UE, como el agroalimentario”
La pandemia por el COVID-19 ha hecho ver a la Comisión Europea la importancia que tienen los trabajadores zafrales que cada temporada llegan de a miles al viejo continente a realizar los trabajos que ellos no quieren hacer a pesar de que se trata de oficios nobles y vitales para mantener y asegurar los eslabones claves de la economía y la seguridad alimentaria de todos los ciudadanos.
En la UE hay más de 17,6 millones de ciudadanos europeos que viven o trabajan en un Estado miembro distinto del de su nacionalidad, y hay sectores de la economía europea, especialmente los agroalimentario y del turismo, dependen del apoyo de los trabajadores zafrales de países de dentro y fuera de la UE durante ciertos períodos del año. La CE estima que la media anual de trabajadores de temporada en activo en la UE es de entre cientos de miles y un millón.
Ante esa realidad, la Comisión Europea (CE) presentó ayer directrices destinadas a garantizar la protección de los trabajadores zafrales dentro de la Unión Europea (UE), y dictó pautas para que las autoridades nacionales, los inspectores de trabajo y los interlocutores sociales puedan poner en práctica y garantizar los derechos, la salud y la seguridad de los trabajadores de temporada y hacer que estos sean conscientes de sus derechos, publicó el sitio web de la Comisión.
Nicolas Schmit, comisario de Empleo y Derechos Sociales, dijo que todos los años “cientos de miles de trabajadores de temporada ayudan a mantener sectores vitales de la economía de la UE, como el agroalimentario” y advirtió que el coronavirus “puso de manifiesto las condiciones de vida y de trabajo adversas a las que se enfrentan”. Es un problema que “hay que solucionar” y las directrices de la CE “son una llamada de atención a los Estados miembros y a las empresas para que se aseguren de que están cumpliendo con su obligación de proteger a estos trabajadores indispensables a la par que vulnerables”.
Las directrices lanzadas por la CE señala que los trabajadores zafrales que llegan con el fin de trabajar pueden hacerlo “en cualquier Estado miembro de la UE, independientemente de si son ciudadanos de la UE o vienen de países no pertenecientes a esta”. Afirma que se deben cuidar “las condiciones de vida y de trabajo adecuadas” y respecto al COVID-19 se debe poner “especial atención” en el “distanciamiento físico y a las medidas de higiene apropiadas”.
Además se debe informar a los trabajadores sobre “sus derechos” e insta a cuidar “los aspectos relativos a la seguridad social” de los mismos.
Garantizar unas condiciones de trabajo y de vida dignas para los trabajadores zafrales
Para la implementación de los países miembros de la UE, las directrices de la CE hacen hincapié en que se “renueven los esfuerzos para cumplir la función de garantizar la aplicación y el cumplimiento correctos de las normas. Incluyen recomendaciones y sugerencias concretas sobre las actividades que deben llevarse a cabo a nivel nacional o de la UE”.
En ese sentido se pide a los Estados miembros “que tomen todas las medidas necesarias para garantizar unas condiciones de trabajo y de vida dignas para los trabajadores de temporada”.
Asimismo llama a los Estados miembros a que desarrollen “campañas de concienciación sobre los requisitos de seguridad y salud en el trabajo que afecten a los trabajadores zafrales, ayuden a los empleadores a aplicar los requisitos legales pertinentes y proporcionen información clara a los trabajadores en una lengua que entiendan”.
También recomienda a los Estados miembros que “refuercen las inspecciones” en los lugares de trabajo para que se “garantice” a los zafrales el cumplimiento “de las normas de seguridad y salud en el trabajo”.
Por otra parte la CE prevé una serie de medidas para “impulsar la protección de los derechos de los trabajadores zafrales como estudiar las condiciones de contrataciones”, los trabajos “de alto riesgo”, un estudio de “análisis comparativo realizado en varios Estados miembros por la red de expertos jurídicos en libre circulación y coordinación de la seguridad social”, etc.
“Es fundamental que los trabajadores de temporada y sus empleadores dispongan de toda la información que necesiten sobre la protección de la que gozan, así como sobre las obligaciones que deben cumplir”, añade.