7 de setiembre de 1954
Regionales
El plan se logró aprobar en la comisión de comercio, precios y excedentes de la Conferencia Regional de la Organización de Alimentación y Agricultura de las Naciones Unidas (FAO). Esta propuesta hará que el organismo pida al resto de los países latinoamericanos “que eviten las tendencias hacia una política de autosuficiencia”, en su producción de alimentos, como parte de una propuesta para evitar que los excedentes agrícolas obliguen a reducir los precios en los mercados mundiales.
Argentina y Uruguay habían expresado su preocupación por la posibilidad de que los grandes excedentes en otros países, especialmente trigo y lana, tendieran a reducir los precios y evitar que el mercado sea llenado con precios bajos, con perjuicios de sus propios mercados. Durante la tercera conferencia, los delegados de estos dos países presentaron una proposición a un comité de trabajo sobre precios, comercio y excedentes, que recomendó lo siguiente. “Qué en prudente revisión de las necesidades nacionales, los países latinoamericanos eviten la tendencia últimamente evidenciada hacia políticas de autosuficiencia y cooperen entre si adoptando criterios de selectividad de la producción agrícola como así también dando preferencia con la intensificación del comercio intra-regional latinoamericano a los productos tradicionales y ecológica y económicamente aptos a cada país, a fin de evitar expansiones indiscriminadas y antieconómicas que agudizaran finalmente el problema de los excedentes”.
Con el final de la Guerra de Corea y la reactivación económica de las naciones europeas, exhaustas por la Segunda Guerra Mundial, nuestras exportaciones de materias primas han perdido parte del mercado que ostentaban debido al proteccionismo europeo y la baja de los precios, generando preocupación en los gobiernos del Río de la Plata y también siendo esto otro motivo imperante para seguir fomentando la cooperación económica entre los países latinoamericanos.
Actualmente en nuestro continente la industria local utiliza materias primas hechas en el país y se busca abrir los mercados internacionales, por ejemplo, el estadounidense, el cual pone trabas e impuestos a lana uruguaya. En esa línea, desde el gobierno del presidente Luis Batlle Berres se sabe que es necesario exportar trabajo uruguayo y que es mucho mejor usando materiales venido del campo, por eso se mantiene el trabajo en conjunto a la Cámara de Industrias y la Asociación Rural. La tarea lograda hoy en la FAO por una ardua y eficaz comitiva argentina-uruguaya demuestra el potencial que tienen los países cuando renuncian al egoísmo e individualismo y buscan el bien común de los pueblos hermanos. Como se afirman en la obra de José Hernández, Martin Fierro: “Los hermanos sean unidos porque esa es la ley primera, tengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea, porque si entre ellos pelean los devoran los de afuera”.
Gran aumento de las exportaciones uruguayas
3 de setiembre de 1919
En los primeros meses del año en curso, según la estadística oficial que acaba de dar a conocer la Oficina de Estadística Comercial, el país exportó 22.000 toneladas de lana, con un valor de $20.205.652, carnes conservadas y congeladas por un valor de $19.595.099, cueros por valor de $6.899.446. Representando el 90% de las exportaciones. Respecto al trigo, maíz, lino, avena, alpiste y granza se exportó por un valor de $382.609 y harina y fideos $352.758. El destino de la mayoría de estas exportaciones es Europa, siendo Reino Unido y Francia los mayores compradores dentro del viejo continente.
Modificaciones cambiarias para exportar lana
4 de setiembre de 1953
Los asesores técnicos del gobierno han determinado los lineamientos del régimen cambiario para la próxima exportación de la zafra de la lana. Se llevará a cabo la unificación cambiaria, tipo de cambio único para el dólar y el libre cambio absoluto para la lana. La única retención que habrá será en pesos, aplicada por kilo de fibra. la Federación Rural insiste en que la retención no puede ser mayor del 30% y que el destino de los productos no debe ser el Presupuesto General de Gastos, sino el apoyo a la intensificación y el mejoramiento de las producciones agrarias.
El actual gobierno brasileño mantiene la política comercial de Getulio Vargas
1 de setiembre de 1954
El nuevo gobierno brasileño ha resuelto mantener la política comercial del régimen del fallecido Getulio Vargas. Su gobierno había puesto en marcha un nuevo plan sobre exportaciones, el cual autoriza a los exportadores de café a cambiar en el mercado el 20 por ciento de las divisas que obtengan. Antes del mandato de Vargas, Brasil era un país agro-exportador. Su lineamiento con los Estados Unidos, entre 1915-1930, reflejó una situación de complementariedad económica, en el cual Brasil dependía cerca del 60 a 70 por ciento de las exportaciones de café y estaba marcado por los precios de dicho bien, sufriendo graves problemas económicos durante la crisis de 1929, cuando los mercados dejan de comprar.