En entrevista con La Mañana, el empresario y expresidente de la Cámara de Industrias del Uruguay, Washington Corallo, manifestó que ve con “buenos ojos” ciertas medidas como la de bajar el precio de los combustibles o impuestos diferenciales en las zonas de frontera.
En las últimas semanas se ha planteado la discusión sobre los efectos de la alta concentración a través de las grandes superficies, especialmente en el interior del país y sus repercusiones para el sostenimiento del comercio local.
Consultado por La Mañana, el empresario y expresidente de la Cámara de Industrias del Uruguay, Washington Corallo, consideró que “es un problema a nivel mundial” porque “cada vez se integran más las cadenas de producción”. “Nosotros entendemos que independientemente de que sean empresas extranjeras o locales, o de que exista una concentración de productos, el buen comerciante trata que sus proveedores también les vaya bien”, puntualizó.
“La Cámara de Industria y la comisión interna que yo ya no integro, siempre se ha preocupado de tener entre sus cometidos el buen relacionamiento con los agentes locales y del exterior para facilitar el comercio”, agregó.
“Hace unos meses vino a la Cámara de Industria un proyecto presentado por un grupo político que buscaba tener una cierta regulación entre las grandes superficies y los productores. Esta ley se ha aplicado en países como Argentina, pero nosotros no hemos presentado nada, aunque concretamos reuniones para analizar este punto”, dijo Corallo.
El empresario también se refirió a las condiciones del comercio en nuestro país. “La idea de esto no es solamente lo referente a la concentración de superficie, sino un buen relacionamiento entre toda la industria y los gremiales”, opinó. “Desde hace muchos años somos conscientes que no existen condiciones favorables para un actor uruguayo de compra y lo que se busca es limar asperezas para que se trabaje conjuntamente con los productores uruguayos para generar recursos y abaratar los costos del país, además de ser más competitivos”, añadió.
Corallo hizo referencia a la particular situación de Uruguay en la región. “Somos un país caro y de alguna manera hay que solucionarlo. En estos tiempos diversos partidos han escuchado nuestros comentarios y hasta se han hecho algunas correcciones al proyecto presentado por legisladores de otro partido. La idea de la Cámara más adelante y de acuerdo a lo manifestado en algunas reuniones es presentar otro proyecto de ley que sea más contemplativo con la real situación del Uruguay, y que lógicamente contemplen las partes que venden y que se contemple las partes que compran”.
Necesidad de que todos salgan bien parados
“Es cierto que existe una concentración de productos, pero esto no significa que la situación empeorará”, aclaró. “A pesar de los problemas pospandémicos, vamos saliendo y creo que los futuros integrantes de la comisión van a elaborar un nuevo proyecto que contemple el buen relacionamiento de las partes”.
“Acá si uno gana y el otro pierde no es un buen negocio. Entendemos que el mundo está cambiando, que hay otro dinamismo y el hecho de tener unos buenos proveedores es parte de la gestión íntegra de la cámara de proveedores y que son algunos de los objetivos que nuestro presidente está llevando adelante”, opinó Corallo. “Esto es lograr que en nuestra producción nacional independiente quien compre y quien venda tenga una buena presencia en nuestros mercados, en nuestras góndolas y en nuestras tiendas y que sean escuchados”.
“Creo que está habiendo un cambio a pesar de la concentración de grandes superficies y creo que los niveles técnicos y gerenciales son muy buenos. Un país que camina bien hace que se gaste más, que se consuma más y por supuesto el efecto derrame en la economía se ve. No creo que haya ningún problema y creo que la nueva comisión lo va a manejar bien y si tiene que generarse una nueva ley, la cámara tiene un abogado (Dr. Florín) que podrá trabajar en común acuerdo para generar un sistema de entendimiento que sea un ganar-ganar”.
“No somos un país competitivo”
Al ser consultado sobre la apertura de fronteras y la posibilidad de que el ciudadano uruguayo aproveche las diferencias cambiarias y compre afuera, Corallo expresó: “Realmente nos preocupa y ahí volvemos al tema de la competitividad, porque somos un país caro, no somos un país competitivo y tenemos muchas trabas burocráticas”.
“Hay que empezar por desburocratizar el Uruguay y para eso tenemos que tener políticas más proactivas”, señaló. “Si nuestros vecinos, sea por el tema cambiario o sea por temas políticos, son más competitivos y más baratos que nosotros, independientemente de cualquier otro problema, hasta por economía de escala, ellos tienen un volumen de compra que pueden complicar a la industria uruguaya. Veo con buenos ojos ciertas medidas como la de bajar los combustibles en las zonas de frontera, podemos tener otro tipo de IVA o impuestos diferenciales para la zona de frontera. Creo que a la larga debería ser para todo el país”.
Gobierno anunció como será la apertura de fronteras el 1 de noviembre
Uruguay abre sus fronteras al turismo de todo el mundo a partir del 1 de noviembre. Podrán ingresar desde esa fecha personas vacunadas contra el COVID-19 que tengan el ciclo completo más los 14 días, con un PCR de un máximo de 72 horas previo al viaje, el cual deberá repetirse al séptimo día que se hizo el primero. Además se deberá firmar una declaración jurada online para poder ingresar.
“Todas las vacunas son aceptadas”, dijo el subsecretario de Turismo, Remo Monzeglio, quien puntualizó que “no está prevista cuarentenas”. Por otra parte, sigue estudiándose por parte del Ministerio de Salud Pública la posibilidad de vacunar a menores de entre 12 y 18 años, tal como anunció el gobierno tiempo atrás. (fuente: Presidencia web)
TE PUEDE INTERESAR