El desempleo es uno de los problemas más grandes y difíciles de abordar que tienen las economías. No son temas nuevos, pero día a día van cambiando en su manifestación, consecuencia y abordaje. La realidad de la crisis global sanitaría, económica y social por el covid-19 ha replanteado tópicos sobre el mercado de trabajo debiéndose crear nuevas políticas. Más que nunca se vuelve una certeza que el mercado de trabajo es incompleto y que necesita intervenciones y medidas específicas de acuerdo con cada realidad espacial y social.
En diversas instancias hemos tratado la experiencia francesa en temas que hacen a medidas de política económica postpandemia. Francia ha sido una de las grandes economías que siempre ha lidiado con el desempleo como problema estructural llegando a tasas relativamente bajas en los últimos tiempos, pero habitualmente en contextos de importantes movilizaciones sociales de protesta. Dentro de la gama de políticas que se han implementado, se destaca “Territorios cero desempleados de larga duración” (TZCLD).
A su vez, el covid-19 ha creado una crisis no solo de salud, pero también económica y social. Desde los primeros días del primer confinamiento, los territorios voluntarios se han movilizado y mostrado solidaridad. En este contexto, TZCLD ha sido positivo a los efectos de atender la problemática agravada por la crisis, y su propia estructura y dinámica ha sido vista por los propios actores como una oportunidad para mejorar lo existente y seguir avanzando. Por ejemplo, siendo un plan que tiene instalado un comité local, hace que cuando surjan las problemáticas el compromiso sea alto y se busquen generar alternativas. El 2020 fue un año de experimentación y revisión donde se establece una nueva etapa del programa.
Qué es el programa Desempleo Cero para personas privadas de empleo por larga data
Se trata de un programa en el que participan distintas instituciones y empresas, que surge en 2016 para atender situaciones de desempleo de larga duración y que atiende cumplir con el derecho a tener un empleo que existe en la Constitución Francesa desde 1946. El derecho al empleo es un derecho social que, si bien existe como tal, no siempre se cumple y las sociedades conviven con ello, no como con otro tipo de derechos humanos como son la vida, la libertad. Pero es una realidad que el desempleo causa una enormidad de costos a nivel individual y general tanto en lo social como en lo económico.
Se trata de generar instituciones a nivel del territorio para dar soluciones a todas las personas que no se integran al mercado de trabajo, basándose en tres consideraciones: (i) no deben existir personas excluidas del empleo ya que existen formas de adaptar el empleo a las capacidades y comportamientos de las personas; (ii) el trabajo no falta porque existe necesidad de crear y ocupar determinados empleos; (iii) el desempleo no producto de la falta de recursos, sino un problema de asignación ya que la situación de privación de empleo termina siendo más costosa.
Surge como un modelo que busca atender la necesidad de empleo en base a principios sobre los cuales se generarán un conjunto de instituciones y acciones en un proceso en etapas. Estos: exclusividad en el territorio en el sentido que se trabaja en unidades de intervención a nivel territorial; empleo contratado por un periodo de tiempo; aumento de las competencias; y creación de empleo adicional.
Se argumenta que el programa se financia solo ya que el mismo surge de redistribuir gastos de los programas subsidio al desempleo o coberturas de esta naturaleza. Inicialmente la implementación estaba pensada en tres etapas, 10 espacios pilotos, 50 espacios pilotos y finalmente instalación a nivel general.
Se ejecuta en cuatro componentes que son: (i) crear un comité a nivel territorial como un espacio de trabajo y articulación de actores relevantes a los efectos de definir estrategias, acciones y definir necesidades; (ii) identificar el grupo de personas privadas de empleo y poder caracterizar a los mismos; (iii) realizar un relevamiento de los trabajos que pueden ser útiles y necesarios; (iv) generar los empleos y asignarlos a los trabajadores.
Por qué pensar a nivel territorial
En programa enfocado a nivel territorial permite un contacto con las necesidades reales, con los más vulnerables, si están desempleados permanentemente, o son personas mayores y con los problemas de la gente; son todos temas para atender y dar prioridad desde lo local. Por eso el modelo propuesto se basa en la creación de una institucionalidad local integrada con actores público privados ya existentes y con la creación de Empresas en objetivo de empleo (EBE) capaces de innovar y crear nuevas actividades que responden a las nuevas necesidades manifiestas y locales: fabricación de máscaras, nuevos servicios locales. Con los resultados se ha visto que los territorios que están empoderados o son voluntarios han demostrado así su capacidad de resiliencia: ver la crisis como una oportunidad para mejorar, es esta dinámica la que va a permitir para continuar la construcción del proyecto TZCLD a nivel nacional.
Nueva etapa reafirmación de la propuesta
La nueva etapa aprobada como nueva ley en 2020 muestra que hay una satisfacción con el programa y su lógica de trabajo, y que sus ajustes implican un nuevo compromiso del gobierno de reafirmar su continuidad y que los ajustes tienen que ver con las necesidades que la crisis covid-19 ha impuesto. Para 2021 se puso como objetivo más que un piloto, ya que se estableció como meta trabajar en al menos 50 territorios. Hoy se lanza una nueva fase para extender la experimentación a nuevos territorios.
El dispositivo en pocas palabras
Se trata de un sistema voluntario. Las personas apoyadas son contratadas con un contrato indefinido por empresas de economía social y solidaria conocidas como empresas orientadas al empleo (EBE), para actividades no cubiertas por el sector privado. Es una herramienta adicional en manos de los territorios para dar una respuesta concreta a las personas más alejadas del empleo.
Aspectos para destacar del programa Desempleo Cero
Los números, las inversiones y los resultados son los principales aspectos para destacar cuando estamos describiendo o haciendo referencia a una política. A nivel general los propios programas desarrollan dispositivos de monitoreo y evaluación que permiten hacer análisis y seguimiento de estos.
Alcance, eficiencia, impactos y satisfacción de los beneficiarios son elementos claves a la hora de analizar programas. Pero un aspecto de suma relevancia para tener en cuenta es la institucionalidad creada a los efectos del programa, elementos fundamentales en términos de la gobernabilidad, los resultados, la continuidad y el abordaje del problema a enfrentar.
Algunos aspectos que debemos destacar de la definición e implementación son los que tienen que ver con su diseño e instrumentación. En primer lugar, son leyes que aprueban el programa y las instituciones que los gobiernan lo que lleva a la necesidad de un acuerdo político que tiene mayorías. Vinculado a lo anterior, existe una institucionalidad creada a los efectos del programa pero que la misma cumple con las características de ser público privada y con participación de los propios involucrados. Tiene estructura descentralizada, con niveles de gobernanza en las diferentes escalas de implementación lo que garantiza un compromiso a nivel de cada territorio.
- Según los datos oficiales, la tasa de desempleo en Francia es casi del 8%, había sido de 8% en el 2020 y las últimas publicaciones para el 2021 la ubican en 7,8%.
- Si tenemos en cuenta las personas que han tenido una actividad parcial, el número total de desempleados es 6.013.000 de personas.
- En detalle, el desempleo se redujo levemente entre las personas de 25 a 49 años. Por otro lado, aumentó entre los más jóvenes y se mantuvo estable entre los mayores de 50 años. El tema de desempleo en los jóvenes ha sido uno de los mayores problemas a nivel social en el país.
- Es una realidad en el que existe una importante segmentación a nivel del mercado de trabajo y los tipos de perfiles de población desempleada.
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