Así lo hicieron saber los productores y profesionales consultados por La Mañana. Con distintas miradas, reflejo propio de las zonas del país en la cual desarrollan su actividad, todos coincidieron en que las precipitaciones fueron muy importantes para dar calma a un sector castigado por los avatares climáticos y a la vez tranquilidad para mirar hacia adelante.
“Dios aprieta pero no asfixia”, titulaba La Mañana al cierre de su edición del miércoles pasado en referencia a las sorpresivas precipitaciones registradas en todo el territorio que han alejado el daño que parecía inminente para la economía de nuestro país.
Las lluvias se hicieron esperar bastante, pero llegaron en un momento en que muchos productores veían perder gran parte de sus cultivos. Tras varios días de afectaciones importantes, las lluvias revigorizaron los cultivos, en muchos casos a punto de perderse. Si bien las situaciones eran dispares, las temperaturas extremas, asestaron un duro golpe sobre la mayoría de los sectores agropecuarios, que en tan solo un par de semanas vieron disminuidas sus producciones. También las lluvias llegaron dispares, algunas en forma mansa como el caso del departamento de Treinta y Tres y otras acompañadas con fuertes vientos como lo indican los reportes del departamento de Florida.
La Mañana consultó a productores y profesionales de varios puntos del país, quienes se mostraron conformes con las precipitaciones caídas, lo que les genera alivio de cara al otoño, momento clave para el desarrollo productivo del año.
Lluvias dispares en Cerro Largo
En el departamento de Cerro Largo las lluvias fueron dispares, desde los 140 mm registrados en la zona de Río Branco hasta lugares como el eje de la ruta 9 donde apenas alcanzaron los 9mm. La Mañana consultó a la responsable del área de Desarrollo Productivo de la intendencia de ese departamento Ing. Agr. Elena Lavecchia, quien aseguró que las precipitaciones fueron desiguales, aunque importantes para el sector agrícola. Cerro Largo cuenta con 10 mil hectáreas destinadas a la producción de soja, a la cual “le vino de maravilla, porque había sojas que se estaban atrasando” como consecuencia del déficit hídrico que afectó durante varias semanas esa zona del país.
El otro producto que define a ese departamento es el arroz, y que también estaba necesitando agua, no solo para si mismo sino para el abastecimiento de las represas que deben acumular este recurso para regar las chacras. Lavecchia sostuvo que las precipitaciones “llegaron justo a tiempo” en un momento que es sumamente importante para el desarrollo del cereal. De todos modos, recalcó que se hace necesaria más precipitaciones en la zona para reabastecer las represas que necesitarán este elemento para el futuro. Para la profesional, el escenario de aquí en mas es auspicioso y entiende que las lluvias se irán generalizando con el trascurso de los días.
“Estábamos al borde de perder cultivos”
“Las lluvias fueron muy buenas en todo el departamento” indicó el gerente de la Asociación Rural de Florida Horacio Tellechea, haciendo referencia a la importancia que estas tienen para el desarrollo de los cultivos. El departamento de Florida registró un promedio de 200 mm en el primer mes del año, luego de padecer “una primavera muy seca, con muchos problemas” en todos los rubros agropecuarios. Puso a modo de ejemplo a la lechería que debió recurrir a las reservas forrajeras programadas para el próximo invierno, ante la falta de alimentos en los campos.
Para el sector agrícola estas lluvias “vinieron muy bien, sobre todo para las sojas de primera y las que se estaban plantando ahora” conocidas como soja de segunda. Tellechea indicó que si bien todavía es prematuro hacer evaluaciones remarcó que “estábamos al borde de perder cultivos” si no llegaban a tiempo las lluvias tan esperadas por todos los sectores productivos del país. Ahora “esperemos que mas adelante no se corte las lluvias, que puedan venir días de sol” para que los cultivos y los campos se empiecen a acomodar. Para el productor floridense es vital que se sigan registrando lluvias en un momento del año definitorio para enfrentar el otoño e invierno de una mejor manera.
Repercutió en el animo de los productores
Como ocurrió en prácticamente todo el territorio nacional, el litoral acumulaba un periodo muy seco, acrecentado en los últimos días con las olas de calor que complicaron aún mas las cosas en varios sectores. El piso de lluvias en las zonas de Mercedes y Dolores fue de 100mm, con lugares donde inclusive alcanzaron los 200mm, una muy buena noticia para el sector agrícola, fuertemente arraigado en esa zona del país. La Mañana consultó al Ing. Agr. Roberto Verdera, productor y gerente general de Calmer (Cooperativa Agraria Limitada Mercedes), para quien las lluvias “vienen muy bien”, en un momento crítico del año.
Para Verdera además de los beneficios sobre la producción también “cambia el ánimo de la gente” que no era tan bueno ante la presencia de un clima tan seco como el que se estaba viviendo. También fue una muy buena noticia para el esquema de pasturas de los campos que escaseaban y presentaban muy mala calidad. En un repaso general sobre la situación de esa zona del país, la falta de lluvias y las altas temperaturas implicaban consecuencias sobre el estado de los animales y sobre las fuentes de agua que se estaban secando. Dejó abierto un signo de interrogación hacia adelante, esperanzado en la normalización del clima hacia el mes de febrero y con precipitaciones mas continuas.
Lluvias y altas temperaturas
En Treinta y Tres, otro departamento con gran presencia agrícola del país las lluvias fueron importantes, con registros que promediaban los 100mm. El Ing. Agr. Eduardo Apolinario, administrador del emprendimiento agrícola ganadero La Miní, sostuvo que, si bien se registró un buen volumen de lluvias, no fueron ni agresivas ni acompañadas por vientos como sí sucedió en otras partes del país. Fue una buena noticia para la ganadería, la agricultura de secano (soja y sorgo), la generación de pasto natural, los animales y las aguadas que ya estaban prácticamente secas. Reafirmó que es una muy buena noticia para todos los sectores agropecuarios.
La nota negativa son las altas temperaturas que acompañan las lluvias, sobre todo en las zonas bajas donde quedan láminas de agua que provocan algunos daños en la producción de soja. Apolinario adelantó que, de continuarse las lluvias en un escenario de mucho calor, los daños también pueden ir aumentando. Para el caso del arroz fue una buena noticia, sobre todo para aquellos productores que necesitaban abastecer sus represas. “Si nos ponemos exigentes” dijo el profesional, seria bueno que las lluvias se cortaran por una semana con disminución de temperatura, y que regresaran dentro de diez días, para sostener el desarrollo vegetativo de los cultivos.
TE PUEDE INTERESAR