La escuela Nª 8 que lleva el nombre del autor de Ariel cumplió sus 95 años de historia educando a los niños de San Carlos y difundiendo la obra de Rodó.
Un 12 de septiembre del año 1927, en la ciudad de San Carlos, Maldonado, la escuela nº 8 fue inaugurada. Por ese entonces, la zona aún acogía a pocos pobladores. El paisaje estaba compuesto por algunos ranchos y calles de tierra que se transforman en caminos barrosos los días de lluvia. Según recuerda el primer Libro diario de la Escuela, era justamente cuando ocurrían los aguaceros que la institución se inundaba y los vecinos debían asistir para evacuar tanto a los niños como al piano. Los infantes conformaban poco más que una docena. La escuela se inauguró con dos clases y 15 niños.
En el año 1970, la escuela inauguró su nuevo local construido en un terreno que, se recuerda, solo contaba con algunos perales y coronillas. La arquitectura estuvo a cargo del conocido arquitecto Walter Pintos Risso y su plano ganó el Primer Premio Internacional en Europa.
La inauguración del nuevo local tuvo tal significado que la dirección de aquel momento le solicitó al artista plástico uruguayo, Eduardo Wiralt, que participara en la fachada del edificio. Fue así que a través de pequeños mosaicos que los niños aportaron se realizó una representación de “El niño y la copa” de Rodó, y que configura hoy un emblema de la escuela.
Centro de referencia para la zona
Hoy la escuela conserva un ágil dinamismo. Más de 400 niños asisten diariamente a sus aulas. La mayoría de los alumnos y docentes provienen de los barrios de San Carlos.
En diálogo con La Mañana, la maestra jubilada Alicia Sención, quien trabajó desde 1997 hasta 2019 como docente y fue directora en 2016, recordó que en la década de los ‘90 la escuela fue un centro de referencia en informática para la zona. Este periodo se mantuvo hasta el inicio del proyecto de Plan Ceibal. Hoy la sala se utiliza como salón de reuniones y aula de inglés.
Sención también recordó que la escuela No. 8 es centro de referencia para los maestros rurales y resaltó el alto número de egresados cuyos hijos asisten a la escuela. “La institución conserva un colectivo muy comprometido con su labor, de maestros de la escuela que tienen a sus hijos allí o que siguen vinculados, como también exalumnos. Hay algo que contagia o llama, porque quienes parten de la escuela vuelven nuevamente a ella”, indicó.
El vínculo con Rodó
La actual directora, Adriana Martínez, mencionó a La Mañana que el año pasado, al cumplirse el 150 aniversario del nacimiento de Rodó, la escuela y el estudiantado renovaron su vínculo con el escritor.
Más allá del estudio de la figura de Rodó a través de diversas actividades, los alumnos de sexto año participaron en la elaboración de un libro que se realizó en conjunto con otras escuelas de Uruguay y que llevan su nombre. “El año pasado Codicen propuso escribir 14 parábolas de Rodó adaptadas para niños e ilustradas por los estudiantes del último grado escolar. La obra se tituló ‘Mi amigo José Enrique’. La ilustración de uno de nuestros alumnos salió favorecida para ser la tapa del libro”, relató orgullosamente la directora.
TE PUEDE INTERESAR