Además de errores de supervisión, el colapso de SVB estuvo precedido por fallas regulatorias, en tanto la Fed conducida por Powell flexibilizó las regulaciones a bancos como SVB, a los que consideraba de relevancia económica regional, pero no sistémicamente importantes. La mayoría de la gente no tiene ni la capacidad, ni los recursos ni el acceso a información que hacen falta para evaluar la solidez de los bancos. Esas evaluaciones son un bien público fundamental y, como tales, responsabilidad del gobierno. Si un banco puede aceptar el dinero de la gente, la gente debería confiar en que el banco puede devolverlo. El gobierno de Estados Unidos, particularmente la Fed, no ha hecho bien las cosas en ese sentido. La Fed, al igual que otros bancos centrales independientes, cuida celosamente su credibilidad. Se ha dicho que el riesgo de perderla fue la razón para las alzas de las tasas de interés de la Fed el año pasado, que fueron mucho más allá de una normalización de las tasas ultrabajas que caracterizaron el período post-2008. Pero al no reconocer los riesgos planteados por sus incrementos rápidos de las tasas, y hasta qué punto una década de tasas de interés de casi cero había exacerbado esos riesgos, la Fed socavó su propia credibilidad, precisamente lo que buscaba evitar.
Tal como están las cosas, la Fed y su presidente han perdido credibilidad en todos los frentes. La crisis actual ha expuesto la incapacidad de la Fed para abordar los problemas de gobernanza que contribuyeron a la crisis de 2008. El hecho de que el CEO de SVB, Greg Becker, integrara el directorio de la Fed regional que supuestamente supervisaba su banco es un buen ejemplo. Todavía está por verse si la agitación financiera todavía latente provocada por el colapso de SVB se transformará en una crisis más profunda, pero los inversores y los depositantes no tienen motivos para confiar en las promesas de la Fed de que eso no pasará. Solo reformas significativas de la garantía de los depósitos, de la gobernanza, de la estructura regulatoria y de la supervisión pueden restablecer la confianza en los bancos y la credibilidad de la Fed.
Joseph Stiglitz, en Project Syndicate
TE PUEDE INTERESAR: