El subsecretario del Ministerio de Defensa, Rivera Elgue, señaló que Uruguay sigue adelante con el retiro de la misión de paz en el Congo para fin de año, aunque admitió que por la situación de ese país todo es muy dinámico. En diálogo con La Mañana también hizo referencia a un reciente encuentro sobre “Mujer, paz y seguridad”, en el cual estuvo participando.
¿Qué presentó Uruguay en la reunión de la comisión “Mujer, paz y seguridad” de la Conferencia de Ministros de Defensa de las Américas?
“Mujer, paz y seguridad” se basa en una resolución de Naciones Unidas del año 2000 y después hay una serie de resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU en las que se plantea la participación de mujeres en las misiones operativas de paz y en la solución de conflictos. En ese contexto, por ejemplo, se habló de distintos temas, entre ellos los planes de acción nacional de cada país. Uruguay aprobó, en el año 2022, el Plan de Acción Nacional, el cual está integrando por el Ministerio de Defensa, el Ministerio de Relaciones Exteriores, el Ministerio del Interior, Inmujeres y la Secretaría de Derechos Humanos de Presidencia de la República. Dentro de ese plan hay 33 acciones que son del Ministerio de Defensa y que están vinculados a la participación de mujeres en las misiones de paz y también distintas acciones en las Fuerzas Armadas. En ese encuentro planteamos nuestra situación y un “estudio de barreras” que se realizó en 2019-2020. En el mismo se relevaron cuáles eran las barreras que se identificaron para que haya una participación significativa de mujeres en las misiones de paz. Ahí sacamos algunas conclusiones. Está el tema familiar, la falta de información, y que es demasiado tiempo un año para que las mujeres con hijos estén en una misión en el exterior. Con base en eso, el Ministerio de Defensa, junto a Inmujeres y la Agencia Uruguaya de Cooperación Internacional, se presentó a un fondo de Naciones Unidas. Ahí conseguimos fondos para realizar algunas acciones para a ver si superamos esas barreras.
¿Cuáles son algunas de esas acciones?
Por ejemplo, nosotros estamos autorizados por Naciones Unidas a un plan piloto para que, en lugar de que el personal en los contingentes vaya por un año, lo haga por seis meses. Eso se va a empezar a aplicar en septiembre de este año en el contingente que está en Altos del Golán [frontera entre Siria e Israel]. Estaba previsto también para el Congo, pero como esa misión está en un proceso de cierre, no sabemos si vamos a tener otra rotación de personal.
¿Cómo se encuentra Uruguay en relación con la participación de mujeres en las misiones de paz?
Uruguay es el principal aportante de efectivos en todas las Américas y estamos en un 6% en participación de mujeres del total de los efectivos. Naciones Unidas tiene planteado para el 2025 un 11%. Está claro que nosotros identificamos esas barreras y hay que tener en cuenta que el personal de las Fuerzas Armadas concurre voluntario a las misiones. Entonces es un tema claro. Lo primero que tenemos que dar son las condiciones para que las mujeres entiendan que hay posibilidades de participar en las misiones. Otro punto importante de las barreras era la falta de información. En este momento se están desarrollando en todo el país, y se hicieron el año pasado, sesiones de información en distintas unidades militares de las tres fuerzas, donde se dan los criterios de despliegue y cuáles son los roles que se cumplen en las misiones de paz. Muchas mujeres entendían que no estaban capacitadas para ocupar roles en las misiones. Entonces lo que se les da es toda la información de cuáles son los requerimientos para estar en una misión y que roles operacionales van a desarrollar. Con eso tratamos de que tengan más información para poder participar. Estamos también desarrollando campañas de comunicación, sobre todo en las fuerzas, y se va a hacer un estudio específico de las Fuerzas Armadas sobre cuáles son las barreras reales para la participación de la mujer. El estudio inicial que hicimos en el 2019 y 2020 se efectuó junto a otros siete países que eran de África, Asia y Europa. Era muy genérico y a veces tenía cosas que no contemplaban la realidad de nuestro país. Entonces ahora hacemos un estudio sistémico desde el punto de vista de la cultura organizacional de las Fuerzas Armadas, pero también de la realidad económica y cultural de los integrantes de la fuerza. Eso es lo que nos va a permitir realmente identificar cuáles son las barreras por las cuales las mujeres no se presentan para participar de las misiones.
La retirada del Congo
En referencia al Congo, la situación se ha agravado precisamente donde está la base uruguaya, en Kivu Norte. ¿Sigue en pie el plan de retiro previsto?
Lo que se retira es toda la misión de Naciones Unidas y ese plan se viene ejecutando, tal vez con algún retraso. Para Uruguay la planificación que se tenía inicialmente era en diciembre de este año terminar la misión. Como hay eventos de seguridad, sobre todo en donde está desplegado el batallón uruguayo, yo no le puedo decir hoy que se mantendrá o no. La situación es muy dinámica y Naciones Unidas, más que establecer periodo de tiempo, lo que estableció fue que se cumplieran ciertos objetivos, como el traspaso a fuerzas del gobierno del Congo de áreas donde ellos puedan ejercer efectivamente la seguridad de la población civil, ya que la protección de civiles es la misión principal de Naciones Unidas. Hoy estamos en un proceso de cierre de esa misión. Pero no puedo decir efectivamente que se vaya a cerrar la misión uruguaya en diciembre.
¿O sea que sigue en los planes el retiro para diciembre?
La planificación por ahora es así. Pero el tema es que nosotros también tenemos ciertos tiempos para preparar si hay un relevo de contingente. Se nos tiene que decir si se mantiene la fecha de relevo o si tenemos que desplegar un nuevo contingente para poder hacer todo el proceso de selección de personal. Estamos en contacto permanente con Naciones Unidas porque justamente ellos son conscientes también de nuestras fechas.
¿Existe algún límite que puso Uruguay para saber si se sigue o no en el Congo más allá de diciembre?
Es un plazo dinámico. Normalmente, seis meses antes comenzamos a preparar un contingente que va a una misión. Si el actual relevo fue en febrero de este año, tendríamos para agosto o septiembre que tener definiciones sobre el tema del retiro o la continuidad.
¿Como evalúa la situación de las misiones uruguayas en Medio Oriente, tanto en Altos del Golán como en Sinaí?
Hemos estado en contacto con los comandantes de los contingentes y no han tenido inconvenientes y sí han estado en distintos grados de alerta según la evolución de la situación.
Cuando finalice la participación en Congo, ¿a Uruguay le han ofrecido alguna otra misión?
No hay ninguna oferta concreta. Sí hemos manifestado nuestro interés en participar de otras misiones. En el tema de los despliegues, cada país hace sus compromisos sobre lo que puede desplegar. Uruguay ha hecho una serie de propuestas en diciembre del año pasado y estamos a la espera de evaluaciones de lo que hemos comprometido. Las propuestas quedan en un nivel 1. Si hay interés se efectúa una inspección, para revisar el equipamiento hasta llevarlo a nivel 3, que es cuando está en condicionales de integrar la misión. Uruguay, en materia de personal, ya hemos tenido distintas evaluaciones y se considera que nuestro sistema de entrenamiento cumple con los requisitos. Sobre todo, lo que se debería evaluar es el material y ver si se está con todo el equipamiento necesario para cumplir con una misión.
TE PUEDE INTERESAR: