Los incendios forestales que se dieron en los últimos meses de 2019 y primeros de 2020, dejaron en evidencia los problemas que denuncian los bomberos del Uruguay desde hace algunos años. Estos van desde la falta de trabajadores, la higiene básica de los equipos de trabajo, las condiciones en la que deben trabajar cuando se trata, principalmente, de incendios que perduran días, así como la falta de un sistema de salud exclusivo para los funcionarios.
En ese sentido es que La Mañana dialogó con John Seballes, delegado general y vocero de bomberos dentro del Sindicato de Funcionarios Policiales de Montevideo (Sifpom) – ya que bomberos y policías están regidos bajo la misma ley-. Para el entrevistado, la necesidad más urgente del cuerpo de bomberos es la falta de 1.200 efectivos, y considera que completando esa cifra, varias de las problemáticas actuales podrían amortiguarse.
“Al ir adquiriendo más personal también vamos a ir solucionando distintos tipos de problemas. Por ejemplo, la falta de persona hace que todos los bomberos de Uruguay estemos excedidos en horas de trabajo, pero a medida que vayan ingresando más personal, podremos ir teniendo el horario que en realidad deberíamos tener: 192 horas mensuales”, explicó el vocero.
Otro de los asuntos que se vincula a la problemática anterior, es que existen muchos funcionarios que viven fuera de la capital y de Canelones, eso genera que la zona metropolitana no esté totalmente cubierta si los trabajadores del Interior no llegan semanalmente para reforzarla. Los trabajadores que deben viajar son, en mayor parte, de Artigas y Rivera, de manera que el desgaste del traslado se suma a las exigencias normales de la labor.
“La zona metropolitana no está totalmente cubierta si los trabajadores del Interior no llegan semanalmente para reforzarla”
“Ellos deben estar esperando turnos para irse y para volver, las horas que permanecen en sus domicilios son muy pocas, eso trae trastornos emocionales y psicológicos, no solo para ellos sino para las familias también. A veces los niños lloran por querer estar con sus padres”, relató Seballes.
Recientemente el sindicato se reunió con la directora, Patricia Rodríguez, ella pidió más flota para los bomberos porque los vehículos no dan ni para paliar la zona metropolitana. A su vez, el Partido Nacional dentro de su promesa de campaña habló de dar más vehículos y que sean de la misma marca, para reducir la dificultad de reparación a la hora de rupturas. “Entonces entendemos que lo más urgente sería sumar personal y nuevos vehículos”, añadió el entrevistado.
Desde el sindicato, además, se le propondrá a la directora tener una clínica de medicina ocupacional dentro de bomberos, ya que actualmente si uno se lastima no tiene un servicio de consulta inmediata, deben dirigirse al hospital policial. “Pero necesitamos algo que trate los problemas nuestros, que profesionales sepan cuáles son nuestras complicaciones comunes y solucionarlas rápidamente, así sean temas físicos o psicológicos”, explicó Seballes.
“No estamos preparados para combatir incendios forestales”
Consultado si el cuerpo de bomberos está preparado para afrontar situaciones como la de los recientes incendios forestales, Seballes respondió con rotunda negativa: “no estamos preparados”. Comentó que hace unos años atrás existía un protocolo y formación para manejar los grandes incendios pero con el tiempo se fueron perdiendo debido a que durante años no se dieron hechos similares, consecuencia de veranos y primaveras lluviosas.
“La infraestructura no ayuda, la preparación tampoco, y es un tema que planteamos charlarlo con la directora para prepararnos mejor la próxima zafra estival. En los incendios forestales, muchas veces, se va la economía del país, el turismo, por eso es necesario darle más importancia, no solo desde el lado de bomberos sino desde el gobierno. Debemos juntarnos y prepararnos, tener más personal al servicio, con mejores materiales que faciliten el combate”, detalló el vocero.
“Si no fuera por los sindicatos, nadie se enteraría de la situación real que estamos atravesando”, afirmó Seballes”
La falta de personal de los bomberos se debe a que hubo retiros de funcionarios o el pedido de baja de otros en un marco en que el gobierno anterior le dio “mucha importancia a abatir la delincuencia”, dijo el entrevistado. Entonces se priorizó tomar personal policial y no bomberos.
No es porque la gente no quiera ingresar, porque cuando se abre un llamado a bomberos hay más de 5.000 personas que se postulan, pero los cupos suelen ser de 60 o un poco más. Hace cerca de cuatro años que no se tomaba personal y trajo un desgaste a los que están trabajando. “Esto generó que un bombero trabajara por tres y eso se ve reflejado en nuestra labor al momento de salir a la calle, por no poder cumplir bien la función”, sopesó el vocero.
Si bien los bomberos también son tomados como policías y están regidos por la misma ley, las tareas y manera de trabajar difieren en gran medida. Tanto policías como bomberos están enmarcados en una reglamentación que indica que deben trabajar hasta los 60 años, pero un bombero de 60 años ya no tiene, en general, las condiciones físicas como para trabajar en la altura o 24 horas de corrido, entonces terminan, en algunos casos, pidiendo la baja.
“A los bomberos se los dejó un poco de lado, aunque también tiene un poco de culpa el propio cuerpo de comando por no hacer los pedidos correspondientes al Ministerio del Interior. Si no fuera por los sindicatos, nadie se enteraría de la situación real que estamos atravesando”, afirmó. En ese sentido, Seballes comunicó en exclusiva a La Mañana, que en estos meses el sindicato presentará denuncias de gravedad hacia el comando anterior de bomberos en donde hay implícitos robos al Estado entre otras cosas.
En busca de un destacamento adecuado
Los destacamentos del interior difieren mucho en cuanto a los de la zona metropolitana, porque en esta última el bombero pasa mucho tiempo en la calle trabajando y no cuenta con el tiempo suficiente, muchas veces, de arreglarlo, pintarlo, limpiarlo y demás tareas de mantenimiento Es por esto que en el Interior la parte edilicia suele estar en mejores condiciones.
El entrevistado relató que recientemente hablaron con Rodríguez para que pueda establecerse una cuadrilla que arregle las falencias edilicias de los destacamentos. “No debe olvidarse que los bomberos hacemos guardias de 24 horas y descansamos 48 horas, que tenemos que estar en el destacamento la mitad de nuestras vidas, y por eso deberían ser lugares adecuados para poder tener un buen descanso y, de esa manera, un buen servicio”, sumó.