La caída de lectores de noticias en papel, dada fundamentalmente por el auge de los medios digitales, desde hace varios años viene complicando la supervivencia de los canillitas. La irrupción del COVID-19 en Uruguay dificultó aún más ese escenario.
Los periódicos vendidos por estos trabajadores representan “el pan de cada día” para ellos y sus familias, pero cada vez venden menos, lamentó el entrevistado por La Mañana Enrique “Cachete” Espert, presidente del Sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas.
La declaración de emergencia sanitaria por parte del gobierno, que obligó a muchos comercios –con excepción de los supermercados y las farmacias- a cerrar sus puertas, recayó también en los puestos de diarios. Los pocos puntos que permanecen abiertos ven su actividad altamente mermada por la disminución de la gente en la calle.
Es por esto que los diarieros, que dependen de las ventas, sintieron todo el peso de esta epidemia, y se están delineando diversas iniciativas solidarias para ayudarlos.
Por lo pronto, esta semana, Daecpu (Directores Asociados de Espectáculos Carnavalescos Populares del Uruguay), también presidida por Espert, comenzó a entregarles a los canillas canastas con alimentos no perecederos y artículos de limpieza.
El dirigente reivindicó la labor de los vendedores de diarios, que realizan un trabajo “insalubre”. Según explicó, “tienen que estar arriba a las cuatro o a las cinco de la mañana para vender, están siempre bajo agua, bajo trueno, parados en una esquina”. Dijo también que es necesario solucionarles algunos problemas, como que puedan tener una buena jubilación, ya que “nadie vive con 12.000 pesos por mes”.
Algunos quiosqueros están amparados por el BPS ante esta situación nacional tan difícil, afirmó Espert. De todas maneras, entiende oportuno plantearle a la Intendencia de Montevideo que les permita a los canillas vender otros productos en sus quioscos, y así lo hará. Como ejemplos mencionó las bebidas, artículos sanitarios e insumos de papelería. El reclamo tiene por objetivo que los trabajadores no pasen todo el día esperando para vender un solo diario y que puedan tener algún ingreso extra.
A esta realidad tan problemática se le suma que las revistas argentinas no están viniendo al país, que son productos que suelen rendir un poco más económicamente.
Los socios y funcionarios de Daecpu ya fueron auxiliados con surtidos muy completos entregados el sábado 4 y domingo 5 de abril, por lo que ahora se están destinando nuevas canastas para paliar la grave situación que atraviesan los vendedores de diarios, “que se ven todavía más perjudicados”, según Espert.
En la institución cuentan con un fondo de reserva al que recurrieron para hacer frente a estos gastos, así como para poder cubrir en su totalidad el pago de los premios del Concurso Oficial de Agrupaciones del Carnaval 2020, puesto que todavía no han podido cobrar algunas publicidades. Este año, además, los premios aumentaron un 15% con respecto al 2019.
Si bien el personal de Daecpu no vio afectado su trabajo porque la pandemia arribó al país justo después de terminado el carnaval, la mayoría de sus integrantes fueron enviados al seguro de paro en el último mes para descomprimir la dura realidad que padece la asociación.
En el caso de los diarieros, “se trata de unas cuantas familias más; serán unas 700 personas”, señaló Espert. Al mismo tiempo, les envió un mensaje esperanzador: “que los canillas tengan fe, que estamos trabajando para conseguir que tengan alguna entrada más”.
El presidente del gremio considera que actualmente el gobierno está “muy atareado”, pero sostuvo que cuando sea el momento indicado, solicitará una reunión para poder plantearle los problemas de los vendedores de periódicos e intentar buscar posibles soluciones.
El crecimiento digital y su impacto en la actividad
En las últimas semanas, muchos periodistas de medios escritos han sido enviados al seguro de paro. Espert manifestó su preocupación al respecto y lamentó que diarios como La República vayan camino al cierre, sumado a que El Observador definió que va a mantener la edición impresa únicamente los sábados y domingos, y pasará a ser un diario exclusivamente digital de lunes a viernes.
“Estas son decisiones que las sufren los canillas, además de que mucha gente queda en la calle. La baja en las ventas nos afecta a todos. En el ámbito de la prensa cada día se lee menos; el celular y el mundo digital mataron el papel, se dejó de comprar el diario y se vino todo abajo”, reflexionó.
Un “golpe” para la economía del país y del mundo
En sus 75 años, Espert no recuerda haber vivido nada parecido a una epidemia como la del COVID-19. “En otros países ha habido malaria, ha habido de todo, pero como esto, nunca”, indicó.
Para el sindicalista, volver a la “normalidad” les va a costar a todos. Agregó que “esto implica un golpe grande para el mundo, no solo para los uruguayos. La economía se ve afectada por todos lados, no funciona nada y hay muchísimas personas sin trabajo”.
A pesar de que el contexto actual es complejo, espera que pronto se supere esta crisis y que después, poco a poco, se pueda empezar a recuperar el trabajo.
En ese sentido, destacó las campañas solidarias llevadas a cabo por los uruguayos, que han contribuido a sobrellevar la realidad de mucha gente que vive en condiciones vulnerables, con iniciativas como ollas populares, canastas familiares y donaciones de distintos tipos.
El gobierno y el personal médico: un accionar bien encaminado
Con relación a las medidas que tomó el nuevo gobierno, opinó que fueron las adecuadas y que las autoridades encararon muy bien la situación.
El trabajo del personal médico también lo evaluó en forma positiva. De hecho, remarcó que la semana pasada le dieron la vacuna contra la gripe en su domicilio, por encontrarse dentro de la población de riesgo. Al igual que sus compañeros, Espert está en cuarentena en su casa.
El referente del carnaval llamó a los ciudadanos a acatar las exhortaciones del gobierno relativas a permanecer en sus hogares en la medida de lo posible. También hizo una crítica: “Me parece que si hay algo que está mal somos nosotros, que no hacemos mucho caso; si el gobierno dice una cosa hay que cumplir, no queda otra”. Incluso alertó que la pandemia ha sido “brava” para otros países que están mejor preparados que Uruguay.
Acerca de la posibilidad de que se decrete el aislamiento total, algo que hoy parece descartado por el Poder Ejecutivo, Espert aseveró: “La economía es una cosa y la enfermedad es otra. Si la cuarentena obligatoria es lo mejor, que se haga, porque hay que mirar la vida de la gente. Acá todavía se han ido pocas personas, pero en Argentina, en España, en países más adelantados que el nuestro, se puede ver cómo se muere tanta gente”.