Para el legislador de Cabildo Abierto hay que generar estímulos para el sector, que pasan por la reconversión laboral, bajar los costos de energía eléctrica y fomentar las inversiones.
Los representantes políticos de Salto están muy preocupados por la situación que atraviesa la citricultura, “un rubro muy importante para el departamento, la región y el país” ya que “estamos hablando de un sector que no solo atiende las necesidades internas sino que también es exportador”, y Citrícola Salteña (CSSA), también conocida como Caputto, “es la más grande con el 60 % del mercado”, dijo el diputado de Cabildo Abierto, Rodrigo Albernaz.
En Salto “la citricultura es una de las actividades más grandes junto con el turismo” con “desarrollo de experiencia y equipamiento tecnológico, y cuando digo experiencia me refiero a la empresarial como la de los obreros. Hay muchas familias que dependen del sector y que son hijos de otros trabajadores que sustentaron su economía familiar dependiendo del sector citrícola”, señaló Albernaz consultado por La Mañana.
El legislador precisó que “la situación de Caputto no se origina en la gestión como se ha dicho en algunos medios de comunicación, sino que el origen está en las dificultades y la dependencia del clima”, y recordó que “en 2015, en plena zafra, hubo problemas climáticos importantes que marcaron el inicio de los problemas que ahora estamos acarreando”.
Cabe señalar que en diciembre de 2016 la Oficina de Planificación y Política Agropecuaria (Opypa) del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, realizó un ciclo de charlas en la cual, al referirse al sector citricultura, la Ec. María Noel Ackermann, explicó la caída de la producción en la zafra 2015/2016 por una afectación importante debido al clima.
Explicó que la disminución productiva se debió a los problemas climáticos que surgieron en 2015 y afectaron la oferta. La situación mejoró levemente en 2016 pero ese año la producción acumuló dos años consecutivos de niveles por debajo de los registros históricos. Eso se debió al exceso de lluvias en abril de 2015, lo que determinó que la producción de frutas para exportación disminuyera, dijo Ackermann en aquella oportunidad.
Por su parte, Albernaz destacó que desde el Estado se avanzó en “una línea de préstamos especiales que son los fideicomisos que se han votado” en el Parlamento, pero cuestionó que no hubiera una política de estímulo real al sector”.
“No existe estímulo alguno para el sector citrícola en general” y “no es verosímil el tamaño y la importancia con la atención que se le da desde el Estado”, insistió, y añadió que estamos ante un sector que “no necesita medidas para sobrevivir”, sino que la acción del Estado debe ser para “multiplicarlo”, y que “todas las empresas puedan multiplicar su tamaño, que lleguen nuevos competidores para un sector del rubro alimenticio y que tiene un valor muy importante para un futuro más cierto” que otros. “El citrus es una fuente importante de vitaminas y los mercados están empezando a tener una demanda particular de este producto que es orgullosamente producido en nuestra región”, advirtió.
Propuestas para estimular la citricultura
Con ese objetivo la propuesta pasa por generar “estímulos” para el sector, los que tienen varias puntas que pasan por la reconversión laboral, bajar los costos de energía eléctrica y fomentar las inversiones.
“La propuesta de estímulos que queremos hacer va de generar talleres” con el Fondo de Reconversión Laboral; “jerarquizar la producción citrícola dentro de la Junta Nacional de la Granja para que se atienda particularmente al sector”; y bajar los costos, por ejemplo a través de la energía eléctrica “teniendo en cuenta que la matriz energética de Uruguay es suficiente y la producción es superior a la demanda exportadora”.
“Generando beneficios por ese lado podemos rescatar el rubro y salvar miles de puestos de trabajo, además de impulsar el crecimiento del sector” con la apertura a “nuevas y más empresas trabajando, que logren más inversiones, que sumen y que nuestra mercadería ocupe más espacios en los mercados internacionales”, indicó el legislador.
“Estimular al sector exportador en la citricultura es una inversión de ganar ganar”, aseguró, porque cuando se ayuda a la exportación, se está ayudando también a las empresas más pequeñas que atienden al mercado local. “Cuando las exportadoras no pueden exportar, pasan a modo supervivencia y compiten en el mercado interno” y al hacerlo “ocupan lugares de las empresas menores y contribuyen a su cierre. O sea que estimular al sector exportador es igual a estimular a los productores menores que atienden el mercado interno”, acotó.
Estas ideas que he mencionado “surgieron de charlas que hemos tenido con trabajadores”, porque éstos han aportado “para la supervivencia de la empresa Citrícola Salteña”. No es “trabajando en la grieta entre el empleado y el patrón” que se sobrevive, y “no creemos en ese conflicto, creemos sí que la economía es una cadena con tres grandes sectores de eslabones: el empresario con su apuesta e iniciativa, el obrero con su fuerza de trabajo y capacidad de acumular experiencia, y el mercado junto con el consumo. Si uno de esos tres eslabones no existe o hay conflicto entre ellos, la unidad productiva se elimina. Tenemos que trabajar para que eso no pase”, opinó.
La carta al Dr. Luis Lacalle
El lunes 25 un grupo de salteños se reunió con el fin de tratar la problemática de la empresa Citrícola Salteña. Fue una reunión que convocó a varios actores del departamento “independientemente de los intereses partidarios”, dijo Albernaz. “Las necesidades del departamento es un punto de unión y de interés para todos los actores políticos, y más para los que ya estamos en funciones”, continuó.
El encuentro fue convocado por los trabajadores de la empresa y se utilizó la plataforma del Centro Comercial local “para poder llevar adelante un ámbito de trabajo en comunión con todas las fuerzas vivas pasando por la Intendencia, los legisladores y los candidatos a la Intendencia” en las próximas elecciones. Se buscó que todos se comprometan “en una causa y que no sea la bandera de un partido sino de los intereses de la sociedad salteña”.
Del encuentro surgió una carta dirigida al presidente de la República Dr. Luis Lacalle en la que se expresa “la preocupación” de las “organizaciones sociales, gremiales, políticas y fuerzas vivas” de Salto por la “conocida situación de la empresa” CSSA.
Los firmantes expresan su “intención” de hacer saber al presidente Lacalle que cuenta “con nuestro respaldo para salvaguardar las fuentes de trabajo de más de 3.500 familias que se benefician directa o indirectamente del rubro”, y agregan que Salto y el país recibe en aportes de Citrícola Salteña en “más de 17 millones de dólares” anuales, lo que es fundamental “hoy más que nunca” porque “Salto no resiste otra pérdida de fuentes de laborales”, por ser, además, “el departamento del interior con mayor nivel de desocupación del país”.
TE PUEDE INTERESAR