Con el fútbol infantil indefinidamente suspendido y las divisiones formativas de los clubes de AUF postergadas y a la espera de lo que pase con el reinicio de primera división, los primeros en volver a patear una pelota serán los jugadores de la Liga Universitaria a mediados de julio.
La Secretaría Nacional del Deporte (SND) habilitó desde el sábado 16 de mayo la reincorporación de la práctica deportiva individual de disciplinas que se practican al aire libre. Su titular, Sebastián Bauzá, indicó que se clasificaron los deportes en tres categorías: bajo riesgo, medio riesgo y alto riesgo. Por ahora solo los deportes de bajo riesgo al aire libre donde no hay contacto físico están permitidos, explicó.
Además de las lógicas medidas de higiene y distanciamiento, el novedoso protocolo estipula la figura de un “oficial de cumplimiento” que será quién se encargue de controlar que se lleven a cabo dichas recomendaciones. Estos tendrán información de contacto de todas las personas que practiquen deportes.
Respecto al fútbol, actividad que lleva más de setenta días sin entrenamientos colectivos, Bauzá señaló que está categorizado como deporte de “medio riesgo”. La semana pasada, el coordinador del grupo de científicos que asesora a Presidencia, Rafael Radi, explicó que, si bien el fútbol uruguayo deberá acostumbrarse a nuevas formas de relacionamiento, “los espacios abiertos son los lugares en los que los niveles de contagios son más bajos”.
Ayer (martes 26), la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) remitió el protocolo aprobado por casi todos los clubes de primera división a la SND para que esta lo eleve al Ministerio de Salud Pública (MSP), a los efectos de poder volver a las actividades entre el 1° y el 15 de agosto, dijo a Referí el neutral Gastón Tealdi. El directivo estimó que los entrenamientos podrían volver a mediados de junio.
El protocolo de AUF para la vuelta al fútbol
El documento -elaborado por los médicos Edgardo Barboza, Gladimir Melo, Mario Pagano y Carlos Voituret- fue presentado por la AUF a los dieciséis clubes de primera división el 14 de mayo. Hasta ahora trece clubes firmaron el protocolo.
El mismo se compone de cinco fases (de 0 a 4), de dos semanas cada una, que detalla los minuciosos pasos a seguir hasta llegar a la apertura de las competencias. Para su confección, se tomaron ejemplos de protocolos de ligas europeas como Alemania, España e Italia que ya se reintegraron a las prácticas.
La fase 0 (en la que se está actualmente) consta del acondicionamiento físico individual de los deportistas, el seguimiento sanitario de los mismos por parte de los cuerpos médicos, la higienización de las instalaciones de los clubes; para finalmente proceder a realizar hisopados a futbolistas, técnicos y otros funcionarios que trabajan en los planteles de primera y segunda división.
Una vez se confirme que los jugadores no portan la enfermedad se habilitará la fase 1, donde comenzarán los entrenamientos grupales de forma intermitente.
Durante la fase 2 los planteles podrán trabajar en campo en grupos reducidos.
Para la fase 3, está previsto que los futbolistas puedan utilizar de nuevo los vestuarios, cuidando distancias y usando tapabocas dentro de las instalaciones.
Finalmente, en la fase 4 se podrá retomar la competencia normal del fútbol.
Al término de cada fase se realizará una evaluación de las medidas a seguir. En total, a lo largo de todo este proceso de cinco etapas la AUF deberá realizar casi 6 mil test de covid-19 y trabaja con el Instituto Pasteur para reducir los costos que deberán asumir las instituciones para hacer posible el retorno al fútbol.
OFI elabora su propio protocolo y el futbol amateur, en general, espera atentamente lo que suceda con el reinicio del fútbol profesional
La semana pasada, la Organización del Fútbol del Interior (OFI) decidió no suscribir el protocolo sanitario elaborado por la AUF. En una carta enviada a la asociación que gobierna el fútbol uruguayo, OFI expresó que “para nuestra organización es inviable por las condiciones económicas que implica su aplicación”, debido al contexto “diferente” del que parte el fútbol del interior.
En la misma línea que OFI se manifestó Valentina Prego, presidenta del consejo de fútbol femenino de la AUF, en diálogo con Radio Uruguay. Prego entiende que el fútbol amateur no está preparado para asumir tantos protocolos como los que se exigen para el retorno a la actividad profesional. “Hay menos personal, menos recursos y muchos puntos son difíciles de cumplir, argumentó la futbolista.
La OFI elabora su propio protocolo, que constará de dos etapas; primero la vuelta a los entrenamientos y en segundo lugar el reinicio de los campeonatos oficiales. Además, convocó al Consejo de Fútbol Amateur para abrir una instancia de diálogo para afinar un protocolo que contemple la situación de las instituciones no profesionales, tomando como modelo el elaborado por la Liga Universitaria que tiene previsto comenzar las actividades deportivas a mediados de julio. Mario Pagano, uno de los médicos que elaboró el protocolo de AUF, manifestó a El Telégrafo que, si bien entiende el contexto del fútbol amateur, para que OFI retome la actividad, “sí o sí” deberán realizarse test para descartar casos positivos.
Trabajadores del fútbol opinaron sobre el reinicio de la actividad
Jugadores, técnicos, preparadores físicos y funcionarios relacionados a los clubes de fútbol se manifestaron a favor de retomar cuanto antes las actividades, pero los clubes -a excepción de Montevideo City Torque y Plaza Colonia que ya están a la orden- son más cautos y entienden que agosto es el mes indicado para volver.
Carlos Manta, gerenciador del club coloniense, dijo a Sport890, que “todavía no se dio la vuelta del fútbol por un tema económico”. Manta explicó que “hay varios clubes que están mal administrados y mandaron a sus jugadores, cuerpos técnicos y funcionarios a seguro de paro que les permitió reducir el presupuesto y ahorrar dinero”; y agregó que “en este momento se están renegociando varias cosas. Hay que barajar y dar devuelta; de nada sirve si volvemos a jugar y no bajamos los costos del fútbol profesional”, opinó; ya que “sería un desastre si en estos dos meses -sin fútbol- no se regularizan algunos gastos en la AUF como son los de algunos actores como los jueces, funcionarios, entre otros”, sostuvo Manta.
Por su parte el zaguero del Defensor Sporting Club, Andrés Lamas, aseguró que “en esta pandemia nos vimos perjudicados todos los actores del fútbol”, porque “la mayoría no está percibiendo todo su sueldo y unos lo llevan mejor que otros”.
“No jugar por un protocolo es una cosa y no hacerlo porque a determinados clubes les conviene eso es diferente y me duele como futbolista”, indicó Lamas. Tampoco le parece lógico “que vuelvan las clases de los niños y que nosotros no regresemos a los entrenamientos”; y señaló que antes que el fútbol universitario debería volver el fútbol profesional porque garantiza “un ambiente más cuidado”.
Por su parte, Lucas Methol, preparador físico del plantel sub 17 de Racing Club de Montevideo, manifestó a La Mañana su preocupación por la indefinición del retorno a las actividades de las divisiones formativas. Para Methol, la importancia del trabajo en juveniles “es mucho más amplio que la competencia en sí”. “Hay un tema social con los miles de gurises que entrenaban todos los días y que tienen una actividad más allá del liceo que hoy no lo están teniendo”, explicó Methol. Además hay “un montón de fuentes de trabajo involucradas” directas e indirectas como “equipier, canchero, mantenimiento, profe, médico, kinesiólogo”, sostuvo.
Methol entiende que la actividad en formativas está “relegada” porque “no genera ingresos en el corto plazo” sino lo contrario, genera gastos para los clubes, por lo que el reinicio de las juveniles está “subordinado a lo que pase con primera”.
En tanto, Sebastián Collazo, profesor de educación física y entrenador de fútbol en el Colegio Alemán, dijo a La Mañana que toda actividad física debe “priorizar el cuidado de la salud, tanto física como mental, por sobre todas las cosas”. Por eso espera “lineamientos y protocolos a nivel gubernamental e institucional” para retomar la actividad física, “confiando que los mismos nos asegurarán tanto a alumnos, docentes y familias las mayores seguridades del caso”, justificó Collazo.
Por otra parte, la actividad del fútbol a nivel de la Organización Nacional de Fútbol Infantil (ONFI) sigue suspendida indefinidamente por la SND. Junto al Sistema Nacional de Emergencias (Sinae) y Presidencia, desde principios de mayo se están repartiendo canastas a los 60 mil niños y niñas, con artículos de alimentación, limpieza y útiles escolares. En varias entregas participaron el presidente de ONFI, Eduardo Mosegui, y la primera dama, Lorena Ponce de León.