En su aniversario, Cutcsa agradeció a todos aquellos “héroes que con responsabilidad se la jugaron, se jugaron ellos y se jugaron a sus familias”, en un reconocimiento que va más allá de los trabajadores de la empresa, y que llega a los trabajadores de la salud y el periodismo por transmitir tranquilidad.
El miércoles 16 de agosto, la empresa Cutcsa cumplió 86 años, conformando lo que hoy es la empresa de transporte más grande del país y de la región.
La celebración se realizó en el Club Social Cutcsa, ubicado en Av. Varela y José Batlle y Ordóñez, fue oportuna para que desde Cutsca se festejara un año más en un largo camino que tiene mucho más para recorrer y cuyos desafíos son enormes, teniendo en cuenta la velocidad con que evoluciona la sociedad y los avances tecnológicos que se deben ir incorporando para seguir siendo la empresa de punta que conocemos.
Con la conducción de Fernando Villar, periodista de reconocida vinculación y pertenencia con la empresa, la celebración tuvo una importante carga emotiva y de reconocimiento a todos los que hicieron posible que Cutcsa cumpliera un papel fundamental y protagónico durante la pandemia. Por eso, Villar enfatizó, desde el comienzo, que “todos los que hacen a la empresa” se reunieron esa mañana “para conjugar dos verbos: agradecer y reconocer”. Un reconocimiento a los que forman parte de la empresa, pero “también a la Asociación Española y a los periodistas”.
Cutcsa nació defendiendo la mano de obra local
El presidente de Cutcsa, Juan Salgado, señaló que con las instituciones y las empresas “pasa lo mismo que con las personas: hay fechas que marcan y nos dan la posibilidad de hacer una pausa para realizar un pequeño balance y recordar momentos pasados, algunos de mucha alegría, otros no tanto; algunos fáciles, y otros mucho más difíciles”.
La historia de Cutcsa no tuvo un comienzo fácil, sino que se inició “en una lucha contra multinacionales, contra los alemanes, contra los ingleses, y de alguna manera se fue imponiendo lo que nosotros creemos que debemos respetar en cada una de las decisiones que tomamos y que en estos 86 años sabemos que se hizo así: defender la mano de obra nuestra, la mano de obra nacional”. Se han dado “señales claras sobre el tema”, agregó Salgado, y mencionó a modo de ejemplo que con esa filosofía “se creó el Banda Oriental y el Montevideano, una fábrica de carrocerías que llegó a construir 7 carrocerías por mes y con el trabajo de nuestra gente. Esa gente que siempre se respetó porque fue el motor fundamental de la empresa”.
Como todas las demás empresas, Cutcsa “puede tener mucha tecnología, mucho dinero, muchas cosas, pero debe tener a su gente, sea patrón o empleado, porque el botón de arranque (de cada ómnibus) no lo pide el numero de interno. Y antes de encender el botón no se olvidan de revisar el aceite, mirar si el coche está en condiciones de salir a trabajar”.
La actitud ante la incertidumbre de la pandemia
Es esa misma gente que durante la pandemia de 2020 asumió un rol protagónico al tomar “una gran decisión”, la de “hacer todo lo absolutamente posible para no perder la conectividad, eso sin saber lo que iba a pasar al otro día”.
Fue una decisión que “tuvimos que transmitir a las autoridades, y lo hicimos porque sabíamos el grupo humano que teníamos atrás. Sabíamos que la gente iba a salir con la incertidumbre y el desconocimiento sobre qué mundo enfrentaría al día siguiente. Iba a salir a dar el servicio e iba a volver a la casa con los nervios de no saber si estaba llevando algo negativo a su familia que por cuidarse había permanecido en sus casas”, recordó.
Además del compromiso de mantener la conectividad se sumó el de que Cutcsa “no iba a escatimar ningún centésimo en lo que era todo el sistema salud, la limpieza, la sanitización, y todo lo que se necesitara para brindar no solo un mejor ser vicio de confianza a todos los que lo iba a utilizar sino también para nuestra gente” que estaba brindando ese servicio.
La conectividad fue la primera definición, la segunda fue la del trabajo técnico y no técnico de un grupo de personas que “siguieron pensando qué pasaría al otro día, porque estábamos seguros que iba a haber un día después el que debíamos planificar de antemano” para ver cómo íbamos a llegar a ese momento, “quizá en las peores condiciones”.
“Esa comisión trabajó en lo institucional, en lo económico, también en lo humano, porque fue un tiempo durante el cual sufrimos, hay personas que ya no están entre nosotros a consecuencia de todo lo que pasó. En lo humano, esa comisión nos sugirió hacer un homenaje a nuestros trabajadores. La idea fue tomando forma y definimos que el homenaje es a los héroes. Nosotros queremos llamarles héroes”, subrayó, en un concepto que incluye “al que estaba trabajando a volante, pero también al 20% de pasajeros que quedó en los momentos más difíciles”.
En ese momento “yo recomendaba a la población no hacer uso del transporte y que lo dejara exclusivamente para los trabajadores que no tenían otra forma de moverse que el ómnibus, para así poder darnos otros servicios como el agua, la luz, los bomberos, la policía, la prensa y ni qué hablar el personal de la salud que también sentimos que fueron el mojón fundamental”. Por eso, “héroes fueron todos los que con responsabilidad se la jugaron, se jugaron ellos y se jugaron a sus familias”.
El apoyo incondicional de la Asociación Española
Al momento de reconocer, Salgado dijo que se podía tener allí a un representante de cada uno de los servicios esenciales que no se dejaron de cumplir: policías, bomberos, etc. Pero “elegimos a la Asociación Española y su personal de la salud. Queremos decirlo claramente: fue un apoyo incondicional, fue un apoyo a lo grande, no fue el abrazo del amigo que ese estaba descontado, fue el apoyo institucional, con el compromiso de cada una de las personas”.
Es un “agradecimiento que tenemos que brindarle a todo el personal de la salud, a la Española en particular, a su Comisión Directiva, a su operativa en nombre de Julio Martínez, que nuca tuvo un segundo de duda en brindar la mejor solución: salimos a vacunar, salimos con los ómnibus, salimos con la gente”. “Desde el corazón queremos decir infinitas gracias a todos los involucrados, hubiera sido muy diferente sin ustedes”.
La plaqueta
Uno de los momentos más importante del acto fue el descubrimiento de una plaqueta que quedará al frente de la sede del Club Social Cutcsa como recordatorio y valorización de las generaciones actuales como las que vendrán a futuro.
El texto de la plaqueta expresa: “Cutcsa homenajea a los héroes anónimos del transporte, a todos los trabajadores que durante la pandemia de COVID 19 arriesgaron su vida para salvar a otros y así asegurar la conectividad de la población. Los transportistas cumplieron con valor y compromiso la imprescindible tarea de garantizar la movilidad de quienes estuvieron en la primera línea de atención, en particular al personal de la salud. A todas y todos muchas gracias. El sacrificio en momentos de tanta incertidumbre engrandeció el prestigio de nuestra profesión. Un especial recuerdo y homenaje además a todos los compatriotas que ya no están entre nosotros. Gracias pueblo uruguayo, agosto 2023”.
Finalmente se entregaron plaquetas con un mensaje que refleja el mismo espíritu de la expuesta en al Club Social Cutcsa, las que fueron recibidas por la Asociación de Funcionarios de la Asociación Española, la Asociación de la Prensa del Uruguay y a la Unión de Trabajadores de Cutcsa (UTC).
Unidades eléctricas
En otro orden, Salgado se refirió a la compra de unidades eléctricas. “En estas horas hicimos un llamado internacional para que podamos, y ese es el objetivo, durante 2024 comenzar con 100 y poder llegar a cumplir la meta 2025 de 250 unidades eléctricas”.
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