¿Cómo se define la prospectiva?
La prospectiva viene principalmente de los estudios de futuro, que comenzaron después de la segunda guerra mundial. Ahí empezamos a tener dos centros de prospectiva por excelencia: la escuela francesa y la norteamericana. Surge una actitud de planificación prospectiva estratégica. Para hacer una planificación estratégica nacional tenemos que subdividir los factores de poder nacional. Estos se dividen en el factor económico, político, científico-tecnológico, psicosocial, militar, y hay subfactores, como el biográfico, que es cuando estamos en presencia de fuertes liderazgos desde la política. Dentro de cada factor, son importantes los subfactores, por ejemplo, el interno y el externo, es decir, cómo nos pueden estar cambiando las políticas a nivel país y también las que nos imponen desde fuera. Pasa lo mismo con el factor económico, donde podemos encontrarnos frente a un contexto internacional determinado, como la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que nos puede afectar en algunos aspectos. Esos son los eventos que para la prospectiva van a ser fundamentales a la hora de ir prediciendo los escenarios a futuro.
¿Cuál es la importancia de analizar los factores del poder nacional?
Sin el análisis de los factores del poder nacional no podemos identificar dónde vamos a tener problemas en el futuro. Es importante analizar esta tarea desde los distintos factores, que tienen una gran dinámica. Por eso, para hacer estudios prospectivos necesitamos de un equipo multidisciplinario que no sea simplemente de analistas políticos o económicos, es decir, yo tengo que tener analistas que sepan lo que está pasando con la guerra entre Huawei y Apple, por ejemplo. Son escenarios que también van de la mano de la política, pero que tienen que ver con los distintos efectos que van a tener. En el factor psicosocial, la tecnología nos va a estar complicando en el sentido de cómo van a quedar los sistemas de previsión a futuro, con los efectos de la robotización. Este es otro de los alcances que puede tener en los estudios la prospectiva.
¿Por qué un país necesita de la prospectiva?
Los países necesitan marcar sus objetivos nacionales, tienen que proyectar cuáles van a ser esos escenarios de futuro. Todos tienen objetivos, pueden ser permanentes o coyunturales, y se planifican. Para que se lleguen a cumplir necesitamos trazar estrategias, que van de la mano de las distintas tácticas y maniobras. Cuanto más claros tengan sus objetivos los Estados-nación, más fácil va a ser trazar esa estrategia. Con la planificación y los estudios prospectivos podemos determinar qué es lo que más nos va a servir para poder gestionar las políticas públicas. La prospectiva nos ha abierto los canales y mecanismos de entendimiento para poder desarrollar esas políticas. En Uruguay no hemos tenido planificación prospectiva y estratégica desde el punto de vista de ese Estado-nación. En la OPP, recién a partir del 2015 se empezó a conocer la prospectiva y los distintos estudios de futuro.
¿Eso hace que estemos atrasados con respecto a otros países?
Exactamente, estamos muy atrasados con respecto a eso. Hemos visto cómo Chile y Brasil han utilizado muy bien la prospectiva. Nosotros llegamos tarde, pero no porque no se estuviera haciendo prospectiva en Uruguay. De hecho, yo estoy trabajando desde el año 2002, hace ya 17 años, junto al Grupo Aldebarán. Todo esto nació con los juegos estratégicos, los hacíamos en el Calen (Centro de Altos Estudios Nacionales) y en el Instituto Militar de Estudios Superiores. Nos cansamos de ofrecer la metodología prospectiva, y nos faltaban recursos. Hoy hacer prospectiva va de la mano de los sistemas informáticos, los necesitamos y es lo qu
¿Usted se dedica profesionalmente a este tema?
Sí, entre otras cosas que hago como politólogo. He hecho cursos en Argentina. En Flacso cursé “Escenarios de gobernabilidad y estudios prospectivos”. Es uno de los métodos que utiliza Naciones Unidas para medir los impactos del desarrollo de los países. Podemos predecir distintos tipos de eventos que se pueden dar, cuando analizamos dos ejes principales: las fortalezas institucionales y el desarrollo humano.
Cuando hacemos un análisis prospectivo, una de las cosas que debemos determinar en los factores son los hechos relevantes. Tenemos que aprender a tratar de historiar las noticias. Al leer una noticia determinante tenemos que preguntarnos: ¿Hubo a lo largo de la historia un evento similar a este? Es importante también definir qué eventos o hechos pueden llegar a ser portadores de futuro, y de tendencias estratégicas posibles. Muchas veces podemos predecir los eventos futuros por los distintos impactos que mediante el análisis prospectivo se puedan determinar.
¿Por qué es importante la prospectiva para el caso de Uruguay?
La prospectiva es fundamental, principalmente mirando los escenarios y los desafíos que se vienen en el futuro, porque estamos en un momento donde tenemos que pensar algunos aspectos. ¿Cuál va a ser nuestra matriz productiva? ¿Hacia dónde vamos? ¿Vamos a seguir siendo monotemáticos o vamos a tratar de incorporar otras tecnologías? A su vez, se vienen otros desafíos desde el punto de vista del factor psicosocial, que son los cambios que se van a estar produciendo a nivel de población. Vamos a tener que planificar políticas de migración, porque nuevamente nos estamos transformando en un país de inmigrantes y necesitamos abordar ese tema. La prospectiva nos hace buscar el problema, encontrarlo y analizarlo. Con los análisis FODA podemos encontrar algunas problemáticas existentes, pero nos hemos quedado con algo que es fundamental, que es buscar soluciones, y deberíamos tenerlas. Con el proyecto Aldebarán no solamente nos comprometemos a detectar el problema, sino también a gestionar la solución.
¿Aldebarán es un grupo privado?
Sí. Es un sistema de gestión estratégica prospectiva. Somos un grupo de profesionales, cada uno en sus distintos ámbitos, pero que siempre hemos tenido una fuerte vinculación con lo prospectivo-estratégico y con la búsqueda de los escenarios para detectar el problema, pero también para abordar la solución. A través de los distintos gobiernos fuimos diagnosticando los problemas, ya sean de coyuntura o de estructura. Lo otro importante es que el método de este estudio es unificante, integral, y el abordaje va de la mano de un software que hemos diseñado a medida para poder detectar cada una de las problemáticas a tratar. Es relevante la sistematización, la planificación. La prospectiva tiene una gran rigurosidad metodológica, no es una opinión de lo que puede llegar a pasar, sino que permanentemente se contrastan las distintas variables y los indicadores. Eso es lo que le da razón de ser a la rigurosidad científica del método.
Recientemente la OPP presentó la Estrategia de Desarrollo 2050. ¿Qué opinión le merece?
Me parece que va dentro de las líneas esperadas en cuanto a lo que es la prospectiva, pero es muy general. En prospectiva falta decir a dónde quiero llegar, qué quiero, cómo lo hago, con qué y con quiénes cuento. Los estudios de prospectiva que se hicieron en el país, por ejemplo, los que hizo la CIDE en la década del 60, tenían que ver con la economía; eran proyecciones económicas para el Plan Nacional de Desarrollo. Ahora por primera vez incorporaron otros aspectos a ese desarrollo. Trabajaron con dos ejes temáticos: la transformación productiva y los cambios demográficos. Sobre esto último, tenemos que ver qué va a pasar con los sistemas de previsión. En el 2050 vamos a tener la misma población que tenemos hoy y eso es un dato preocupante; varias cajas de jubilación van a estallar. ¿Cómo vamos a abordar esos impactos? Por otro lado, decimos que va a cambiar la matriz productiva porque hay aspectos importantes que tienen que ver con la biotecnología, entonces hay que abordar una serie de cambios en la conducta y la preparación para ese país productivo, lo que a su vez está relacionado con la educación. Lo importante de todo esto es que tenemos la problemática, pero ¿qué solución vamos a brindar? Es ahí donde está el punto neurálgico de la prospectiva. Todos nos plantean problemas, pero queremos soluciones. No podemos generar políticas públicas simplemente por un problema público, debemos analizarlo con una mirada prospectiva.