La situación económica de los productores tabacaleros no deja de generar preocupación. Las secuelas de la sequía sumado a la inestabilidad del tiempo hacen dificultosa la producción en el rubro. Para sumar inconvenientes, se generó polémica en torno a declaraciones realizadas por el intendente de Artigas sobre el trabajo infantil en las producciones tabacaleras. En declaraciones a la prensa, el jerarca aclaró: “Me expresé mal” y señaló que se refería al trabajo dentro del núcleo familiar y no a personal asalariado dentro de las tabacaleras. En entrevista brindada a La Mañana, el productor Nery Rodriguez Andrade se refirió al tema en cuestión además de abordar otros problemas vinculados al sector en el departamento de Artigas. El entrevistado es quien concentra la mayor cantidad de hectáreas plantadas en el rubro tabacalero.
“Se recibió ayuda de República Microfinanzas y fue muy bien recibida”
¿Cuál es la situación actual del sector y qué impacto generó la sequía?
La sequía fue muy complicada y sobre todo el año pasado. Este año las lluvias empezaron a mejorar la situación, pero el exceso de agua nos hizo difícil plantar y preparar la tierra. Además, los fríos que llegan en la noche son nocivos para las plantas. De todas formas, con el clima que tenemos se genera humedad y nos permite plantar.
¿El sector al que pertenecen entraron dentro de los apoyos que brinda el MGAP?
Fueron muchos los agricultores de la zona que entraron en el apoyo. No fueron todos porque se atendieron por grupos, pero se recibió ayuda y fue muy bien recibida.
¿Qué rol jugó el MGAP y cuánto participó el Banco República?
El Ministerio estuvo sí, porque el Ing. Gonzalo Jaureche (director departamental del MGAP) siempre estuvo cerca y participó de varias reuniones. Pero quien nos apoyó fue República Microfinanzas.
¿Las declaraciones realizadas por el intendente Caram les generó alguna complicación?
Se generó polémica, pero lo que dijo Caram es que si en la familia tenés un joven de 15 o 16 años, es lógico que dé una mano. Nadie los obliga porque en la mayoría son empresas familiares. En mi caso, que planto bastante, tengo gente trabajando, algunos fijos y otros para dos o tres días. Se generó polémica, pero sobre una realidad distinta. Yo me crie ayudando a mis padres y hoy que plantamos casi 16 hectáreas soy yo quien sigo con el trabajo.
Los emprendimientos vinculados con la plantación de cannabis en la región, ¿les ha generado algún inconveniente?
A nosotros no, habría que preguntarle a la empresa Monte Paz que es para quién trabajamos.
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