Desde hace ya algunos años, nuestro país viene observando la consolidación de una suerte de “monopolio” en la ejecución de la obra pública, un segmento fundamental de la industria de la construcción. Tratándose de un país pequeño, es natural que se tienda a la concentración. Sin embargo, en los últimos años, hemos visto la preocupante formación de lo que aparenta ser un pool de empresas que sistemáticamente viene obteniendo los principales proyectos de infraestructura, en algunos casos en forma que algún observador imparcial podría hasta calificar de indecorosos.
Nos referimos específicamente al caso del consorcio que de hecho se ha configurado entre las empresas Saceem, Ciemsa y Berkes, las que configuran una suerte de “triunvirato” que ocupa cuanta ruta, puente u otra obra en curso en los más diversos rincones de nuestro país.
Las obras de Saceem
Hasta el día de hoy, recordamos las lamentables imágenes que observamos durante la firma del contrato entre el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) y el consorcio Grupo Ferrocarril Central mediante el cual a este último se le encargó la construcción del tren para UPM 2, mediante la forma jurídica de PPP. Esa tarde, un conocido activista ambiental increpó al ministro Víctor Rossi por la cuantiosa inversión estatal en la construcción de una vía cuyo beneficiario tenía nombre y apellido. Este no solo resultó agredido verbalmente por la guardia pretoriana del ministro, sino que estuvo a punto de ser agredido físicamente por el principal ejecutivo de la empresa vencedora de la licitación de tan jugoso contrato.
La Mañana advirtió en su debido momento sobre la inconveniencia de un contrato tan leonino para el Estado. Pero una vez comenzada la obra, empezaron a quedar de manifiesto problemas de otra naturaleza.
Ya desde el inicio, La Mañana viene recibiendo denuncias de incumplimientos en los pagos a pymes proveedores y a dueños de establecimientos rurales y comerciales ubicados sobre la ruta 5 y afectados por la construcción de la vía. Uno de ellos fue entrevistado por La Mañana y declaró que hacía más de un año esperaba por el pago acordado por el retiro de varias toneladas de tierra de su establecimiento. La tarde anterior a la publicación de la nota, la deuda quedó saldada.
Las demás denuncias provienen de pymes ubicadas en Florida y Paso de los Toros, quienes informaban sobre el retraso sobre el plazo de 150 días para el cobro de la primera factura. En uno de los casos uno de los empresarios manifestó: “No sabemos qué hacer, porque si denunciamos no cobramos y perdemos la posibilidad de que nos vuelvan a llamar. En mi caso me tuve que asociar con otro colega para poder subsistir”.
Pará sumar más conflictos a su historial están las obras del tren en Durazno y la actitud de la empresa con los vecinos de Florida y Durazno. En una Asamblea Ciudadana organizada por el MTOP en la capital floridense, donde también participaron autoridades de la empresa, ante preguntas de los vecinos, los profesionales presentes manifestaron que no tenían la “obligación de responder preguntas”.
Hoy Saceem tiene a su cargo, además de la obra referida en conjunto con Ciemsa y Berkes, la confección, el desarrollo, la construcción y explotación de la Planta Potabilizadora a instalarse en Bocas del Cufre.
Las obras de Ciemsa
Es una empresa que desde su instalación en nuestro país ha ofrecido una amplia gama de servicios. Como únicos propietarios figuran los Sres. Omar Hernández y Heber González. Estos son los titulares de la concesión de un tramo de ruta 5 y los encargados del control por balanza para vehículos de carga en rutas nacionales.
En los años 2019 y 2021 la Justicia procesó a varios funcionarios por el delito de “Cohecho”, dinero que recibían por adulterar facturas de control o directamente por dejar pasar las unidades sin controlar.
Además, la firma tiene a su cargo la realización de obras para OSE, forma parte del Grupo Ferrocarril Central y participa de la obra de la Planta Potabilizadora a instalarse en Bocas del Cufre.
Las obras de Berkes
Es una empresa de larga trayectoria, creada en 1939 por Julio Berkes, y ha logrado instalarse en varios países de Latinoamericana y Europa. Es integrante también del Grupo Ferrocarril Central y en 2015 prestó servicios dentro de la planta de UPM en la construcción de las torres de enfriamiento. En la actualidad se encuentra junto a Ciemsa y Saceem trabajando en el proyecto de la Planta Potabilizadora y últimamente se supo que será la empresa encargada de la construcción de un puerto para pasajeros en la zona del Dique Maua, además de obras en la ANEP y en Conaprole.
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