En lo últimos años, Cooperativas Agrarias Federadas (CAF) viene trabajando activamente en un desarrollo fuerte de sus asociados, fomentando la permanencia en el campo y la concreción de negocios entre pequeños productores, para lograr tener escala, volumen y buenos precios.
Desde el pasado mes, la institución es presidida por Pablo Perdomo, un productor ganadero de Florida con un fuerte vínculo con la cooperativa El Fogón.
CAF apuesta al diálogo con el próximo gobierno para buscar atender la situación en el campo
Para conocer los detalles de cómo vienen trabajando y cuáles son los objetivos, y también para evaluar la situación del agro, La Mañana Rurales dialogó con el flamante titular de la gremial.
¿Cómo vienen estos primeros días al frente de CAF?
Bastante movidos. Tenemos una agenda llena con respecto al trabajo dentro del CAF y también hacia afuera. Después de las propuestas programáticas que presentamos a los candidatos a la presidencia en julio, tuvimos la oportunidad de trabajar en la presentación que le vamos a presentar a los técnicos (de los candidatos). La semana que viene vamos a estar iniciando estas reuniones.
Tuvimos un trabajo en la interna de recorrer las cooperativas, empezando con la jornada de las asambleas. Nos debíamos, en el Comité Ejecutivo nuevo, un acercamiento a las cooperativas de base y sus directivas. Hasta ahora hemos recorrido el litoral, visitando CALMER, COPAGAN filial Paysandú, CALSAL en Salto, y también el suroeste, con las sociedades fomento de Colonia, como CRADECO en Colonia Valdense y la Sociedad de Fomento de Colonia Suiza. Es una tarea que me parece fundamental para recoger de primera mano la opinión de los directivos y así complementar lo que se trabaja en el Consejo de Administración de CAF.
Por lo tanto, como resumen, venimos con mucha actividad, dejando algunas otras que, debido a este cargo, entendemos que es bueno dar un paso al costado como en la cooperativa el Fogón, para dedicarnos de lleno a esta función.
¿En qué situación encuentra a la gremial?
Como yo era vicepresidente, estaba bastante involucrado y encontramos a una gremial trabajando muy fuerte. Pretendemos continuar el trabajo que se realizó cuando la presidía Virginia San Martín, como hemos hecho hasta ahora, con una gremial proactiva, con compromiso, (buscando) soluciones y mucho dialogo para encontrar salidas a la producción nacional.
¿Cuáles son los objetivos del período?
En este periodo continuaremos trabajando en la línea anterior, pero el desafío está en la participación y el diálogo con el nuevo gobierno (..) teniendo encuentros también con el nuevo Parlamento, con quienes ya hemos tenido trabajos y encuentros. Vemos que allí existe mucho desconocimiento de lo que es la productividad, los productores y sus familias.
Por lo tanto, desde ese punto de vista, lograr tener llegada a ellos es importante dado que la sociedad que no nos ve como creemos que debería y aquí entra el programa fundamental de Conciencia Agropecuaria. En ese sentido tratamos de trabajar con el resto de las gremiales que integran el movimiento Campo Unido y con el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), para involucrarnos en esta sociedad y (lograr) que nos vean como realmente somos, como productores de alimentos, y no como los que no tratan bien el medio ambiente y no hacemos las cosas como se deben hacer.
“Vemos que allí (en el Parlamento) existe mucho desconocimiento de lo que es la productividad, de los productores y sus familias”
¿El cooperativismo tiene futuro en el Uruguay?
Sí, sin dudas. Hemos estado participando en el Instituto Uruguayo de Cooperativismo y la Confederación Uruguaya de las Cooperativas y podemos decir que tiene mucho futuro. Es un sistema que ha hecho que en los últimos años se triplicara la cantidad de cooperativas, después de la Ley 18.407, que es mejorable en algunos puntos, pero debemos decir que es la herramienta sostenible y sustentable para que el productor y su familia puedan seguir viviendo de su producción, de su trabajo, de vivir en el campo.
“Hoy los sindicatos tienen un súper poder y creemos que no es conveniente para ambas partes”
Para esto, es imprescindible la forma cooperativa que tiene más de 100 años. Nuestras socias están cumpliendo sus 60 años y son el nexo para que los productores se mantengan en el campo. Facilitan los servicios, la asistencia técnica y la comercialización, por lo que a las pruebas me remito. En sectores donde no existe la cooperativa como el sector lechero, en donde más del 60% (de los productores) se encuentran en la empresa más grande del país que es Conaprole, muchas veces nos preguntamos qué sería de este sector sin Conaprole. Las empresas se retiran cuando dejan de ser rentables y no tienen un componente social como lo tiene la cooperativa.
En otras modalidades es la herramienta para poder llegar a un precio igual para el productor que produce corderos pesados con una cantidad inferior a los 50, como un productor que puede tener un camión completo.
Con este ejemplo, explico que el mismo beneficio lo tienen pequeños, medianos y grandes productores, generando una simbiosis fundamental para vender a un precio de mercado normal.
¿Cómo ven la situación del sector agropecuario?
A sector lechero y al hortofrutícola los vemos complicados, en la ganadería con desafíos bien importantes al igual que la agricultura, con desafíos productivos, con producir de forma correcta con el medio ambiente. También vemos retos con las futuras tecnologías y la forma de producir, con los cambios que se vienen, que si bien necesariamente van a tener que ser sostenibles y sustentables para cuidar el medioambiente, es un tema bien interesante que nos compete y por lo que tenemos que tomar cartas en el asunto y trabajar.
A su vez, el nivel social es importante para nosotros y tenemos problemas como la seguridad, con cada vez menos gente en el campo y menos familias, con las distancias que existe entre el campo y la ciudad, con temas como la señal de internet y la caminería rural, para tener un bienestar familiar que muchas veces nos esta quedando en el debe en el sector, pero tenemos que trabajar y no quejarnos tanto.
¿Preocupa la situación de la conflictividad laboral, principalmente en Conaprole?
Sí, nos preocupa en general, pero principalmente en Conaprole porque la gente en esos casos se molesta mucho. Hay temas que se pueden solucionar hablando, pero hoy por hoy los sindicatos tienen un súper poder y creemos que no es conveniente para ambas partes. En general las cooperativas somos las primeras donde conflictivamente aparece un paro, y nos extraña que empiecen por las cooperativas y no por el resto de las empresas del sector.
En ese sentido, estamos trabajando e intercambiando con los grupos técnicos de la futura administración, sea cual sea; hay que sentarse y bregar por la mejor solución para todas las partes. Hoy lo que gana un empleado de Conaprole, no lo ganan muchos tamberos y lo quisieran ganar para tener mejores condiciones y por eso la balanza no está balanceada.
¿Cómo está la relación con el gobierno?
Está bien, hay diálogo, discrepamos en algunas cosas, pero hace un tiempo siempre que levantamos el teléfono por algún tema o preocupación, debemos de decir que el diálogo es bueno y correcto. Esta la forma que CAF se ha manejado durante estos 35 años para tener las puertas abiertas al dialogo, en lo que se está de acuerdo y en las discrepancias. Y entendemos que también va a ser así con la futura administración, porque hemos estado dialogando con todos los equipos de los partidos que van por la presidencia.
CAF fue la primera gremial en juntar a todos los candidatos a la presidencia tras las elecciones internas.
Allí presentó, bajo el eslogan “CAF propone”, un documento con propuestas para atender en el próximo gobierno, con temas fundamentales como macroeconomía, agroindustria, las cooperativas y las herramientas financieras.
La actividad tuvo lugar en el hotel NH Columbia de Montevideo.