Colonización dijo que cumple una función clave instalando y manteniendo a las personas en el medio rural. Actualmente son cinco mil las familias que trabajan las tierras en todo el país agregando valor productivo.
Hace 76 años, el 12 de enero de 1948, fue sancionada la Ley 11.029 de Colonización, creando el Instituto Nacional de Colonización (INC), que tiene como cometido la distribución equitativa de la tierra, partiendo de la función social de esta y generando las condiciones para el desarrollo rural sustentable, combinando los aspectos productivos, económicos, ambientales y sociales fundamentales para el arraigo de la gente en el medio rural.
En su artículo primero la ley establece el concepto de colonización, entendiendo por tal “el conjunto de medidas a adoptarse” con el fin de “promover una racional subdivisión de la tierra y su adecuada explotación, procurando el aumento y mejora de la producción agropecuaria y la radicación y bienestar del trabajador rural”.
El doctor Julio Cardozo, presidente del INC, dijo que en todos estos años el instituto se ha colocado como pieza clave en la radicación y el bienestar del trabajador rural, fomentando el crecimiento y la mejora de la producción agropecuaria, tal como lo señala la ley referida. Consultado por La Mañana sobre cómo evalúa lo realizado hasta el momento, afirmó: “Se fijaron metas importantes, como la entrega de más cuarenta mil hectáreas, lo que lleva un tiempo importante dada la cantidad de personas que se inscriben por cada fracción”. Culminada esa entrega durante los primeros años, “comenzamos las inversiones de acuerdo con lo presupuestado para la compra de tierras”. Cardozo recordó que en 2021 la Rendición de Cuentas pasó fondos del INC al fideicomiso para atender los asentamientos, pero “de todas maneras el Parlamento había aprobado hasta quince millones de dólares”.
A partir de ese monto, “empezamos a comprar tierras” para un total de más de cinco mil hectáreas, que eran “de colonos propietarios en más del noventa por ciento”, y finalizado 2023 “destacamos como muy importante la compra de esas hectáreas, que se agregan a las cuarenta mil. O sea, bajan en cinco mil los colonos propietarios y aumentan en cinco mil hectáreas en colonos arrendatarios, que se adjudicarán en 2024”.
Arrendatarios que quieren comprar las tierras
Cardozo mencionó también “un cambio en las políticas del Instituto que ofrece la posibilidad de que los arrendatarios puedan comprar las tierras en las que están, y para eso tenemos solicitudes de cuatro mil hectáreas que se están negociando con los interesados en comprar”.
“La posibilidad de que los arrendatarios adquieran las tierras se establece en la Ley 11.029, solo que no se aplicaba por criterios políticos”. Ese no es un tema “fundamental, pero se trata de aplicar la ley en toda su extensión”, además del aspecto humano: “Hay personas que por la historia de su familia deciden comprar”, agregó.
Otro logro destacado es la reducción de la morosidad. Para atender esa problemática fue necesario “negociar”, pero finalmente “el resultado es que tenemos el noventa por ciento al día”, dijo Cardozo. La política actual es que cuando “un colono se retrasa” en su pago hay que visitarlo para saber qué fue lo que le pasó para evitar un mal mayor en el futuro y no esperar dos años como era antes. “Eso fue un buen logro de los regionales del INC, que lograron un buen diálogo, y hoy hay muy poquitos con atrasos de dos años, y los que están con un año o seis meses de atraso son casos ya estudiados y a veces justificados por problemas ajenos a la productividad, por aspectos vinculados al clima o por la caída de los precios. Pero el resultado es que ese noventa por ciento al día nos da la tranquilidad económica y financiera para que las inversiones continúen”.
Respecto a esas inversiones, Cardozo mencionó la “construcción de tambos, créditos para ganado lechero y ganado de carne, infraestructura básica”, también el “acuerdo muy grande con UTE de nueve millones de dólares para la electrificación de todas las colonias a las que le faltaba la energía eléctrica, una inversión con el BROU de hasta cincuenta mil dólares que saldría este año”.
“Todo eso lo podemos tener porque hay un buen flujo de caja y porque los colonos están cumpliendo, cosa que le hemos agradecido en reiteradas oportunidades porque para ellos es un esfuerzo, a pesar de la sequía y de la caída de los precios”, explicó el presidente del INC.
Cinco mil familias y cuatrocientas mil hectáreas en arrendamiento
Colonización tiene cuatrocientas mil hectáreas propias en arrendamiento, más otras doscientas mil hectáreas que son de colonos propietarios.
Por otro lado, Cardozo dijo que “son unas cinco mil familias que dependen de Colonización” y que en 2023 “se entregaron más de diez mil hectáreas y eso significa que hay muchas familias que han ingresado como colonos”.
“Las formas de ingreso pueden ser dos, individual o colectiva. El ingreso colectivo es un mínimo de tres y hasta siete personas en un campo donde se hace un proyecto en común, y el individual ofrece variedades agrícolas ganaderas, cañera, lechera, granjera”; y de acuerdo con la explotación y el índice de productividad se determina la renta, que “es más barata que el mercado, más la ayuda profesional y técnica que brinda el INC”.
Productividad y sistema de riego
Las colonias practican diferentes rubros, y el objetivo es que según esa área de trabajo y el índice Coneat la productividad “esté por encima de la media”. En ese sentido, “hemos logrado tener lecheros con índices buenísimos de producción por hectárea”, aseguró Cardozo, lo que se logra con créditos, con asistencia al predio, trabajando junto a la institucionalidad rural, incluyendo las intendencias y al Ministerio de Ganadería. También mencionó “la importancia del rubro ovino en Canelones” con la introducción de razas carniceras atendiendo un mercado cambiante, y “con todo lo que significa para una familia la cría ovina, permitiendo que el productor tenga un ingreso más rápido”.
“Apuntamos a que los colonos sean ejemplo” en materia de producción, porque detrás de ellos “está el esfuerzo del Estado, que es el esfuerzo que hacemos todos los uruguayos, y a eso se responde con productividad”, subrayó.
Colonización cuenta con sistemas de riego que fueron clave durante la sequía: “El instituto tiene muchas represas, en Artigas, Salto, Paysandú, Durazno, Florida, algunas de muy buen nivel, pero tenemos que mejorarla porque es un tema que tiene que ser colectivo, a favor de los colonos y de los pequeños productores de la zona. Pero también tiene costo”. Es un tema que “queremos incentivar” y que “constituye un desafío que es de todo Uruguay en cuanto a infraestructura”, finalizó.
Este año se vuelve a mantener la renta
El INC hace dos años que no modifica el valor de la renta, y en 2024 también permanecerá incambiado. Cardozo explicó que en los años anteriores se decidió mantener la renta debido a la sequía. Además, se ofrecieron facilidades de pago y un descuento del diez por ciento por pago contado. Ambas opciones tuvieron muy buena respuesta y aceptación por parte de los colonos.
Este año se vuelve a mantener la renta, dado que esta se determina luego de que los equipos técnicos estudian los índices productivos y los precios. Entre la sequía y la caída de precios internacionales, resultó que las rentas quedaban iguales y con una leve rebaja en los ganaderos, por lo que se decidió mantenerla.
TE PUEDE INTERESAR: