El director de la empresa dijo que ésta no descarta analizar la posibilidad de un pago diferencial a las razas carniceras, porque cada una “tiene sus propias características y es bueno generar el mayor valor agregado que se merecen”; también planteó la producción a corral como forma de solucionar la concentración de oferta en pocos meses, y estimó que Brasil como mercado está siendo afectado por la pandemia, pero “se va a recuperar” y volverá a demandar.
Desde hace una década –o más – los productores ovinos de razas carniceras reclaman que la industria les efectúe un pago diferencial como ocurre con el ganado vacuno o la lana fina. Gustavo Basso, director de Frigorífico Paso de los Toros consideró que es viable que la carne ovina pueda caracterizarse por el tipo de raza. “Tenemos todas las posibilidades de hacer programas de producción con el tipo de razas” carniceras, dijo, y agregó que “cada una tiene sus propias características y es bueno generar el mayor valor agregado que las mismas merecen”.
En declaraciones al portal TodoElCampo, el empresario expresó que el frigorífico “no va hacer excepciones con respecto al tema de avanzar en lo que sean acuerdos y generar el mayor valor agregado posible”.
“No tenemos ningún inconveniente en compartirlo con el productor”, pero aclaró que “la última palabra la tiene la demanda”, y que se deben dar “las condiciones para poder llevar adelante estos proyectos que no son de corto plazo sino que tienen sus tiempos para madurar”.
Igualmente aseguró que en Bamidal será “una estrategia” a desarrollar, con atención en “todos los productos y la especialización que se haga tanto sean razas tradicionales o exclusivamente carniceras”, a todas las “vamos a atender con sumo interés, tratando de diferenciarla y trabajando en temas de marcas que es un campo donde creo que hay espacios para desarrollar en función de la alta consideración que tiene la carne ovina en el mundo y que no hay muchos que la produzcan”.
Así como en la carne de vacuno se ha impuesto el concepto de carne Angus o Hereford, Basso juzgó viable que la carne ovina pueda caracterizarse por raza. “Tenemos todas las posibilidades de hacer programas de producción”, porque “cada raza tiene sus propias características y es bueno generar el mayor valor agregado que las mismas merecen”.
Ovinos a corral
Como herramienta para solucionar la concentración de la zafra ovina en pocos meses, dijo que Frigorífico Tacuarembó está “buscando la forma de atenuar esa altísima zafralidad que tiene el ovino que hace que se concentre la oferta en prácticamente dos o tres meses”.
El objetivo es encontrar la manera “de tener la oferta lo más dispersa posible en todo el año”. Para eso se ha desarrollado un programa con producción a corral “que ya está en plena ejecución, y estamos haciendo las primeras faenas de ovino a corral que trata justamente de generar una oferta más sostenida en el año y poder lograr mercados estables y consistentes”, observó.
“Brasil se va a recuperar”
Sobre Brasil y los problemas que ha presentado a nivel de mercado, Basso dijo que el problema no es de tipo comercial o costos, sino el COVID-19. La pandemia causó “el cierre de restaurantes y del turismo” y eso fue “determinante para que la carne de cordero sea la que haya tenido mayor impacto (negativo con) la caída de la demanda”.
Pero “Brasil se va a recuperar y que va a volver nuevamente a demandar en la medida en que recupere sus fortalezas que están condicionadas por la pandemia”.
Mientras Brasil atraviesa su crisis, China toma el protagonismo como una “aspiradora que absorbe todo lo que se le pone adelante en cuanto a carne y la ovina no es la excepción. Hoy el 90% del destino de las carnes de exportación de ovino de Uruguay van a ese destino”, aseguró.
A diferencia de China, Brasil tiene varios “atractivos”, por ejemplo “la cercanía” y “los acuerdos del Mercosur, todo eso lo hace un mercado natural” de nuestra producción, finalizó.
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