El Ing. Agr. Gabriel Ciappesoni, investigador de INIA participó de la Gira Texel 2022 y destacó la importancia de tener una buena señalada para aumentar la producción de carne.
El jueves 23 y viernes 24 de junio se realizó, en establecimientos de los departamentos de Tacuarembó y Durazno, la Gira Texel 2022 que contó con un importante de marco de público.
El Ing. Agr. Gabriel Ciappesoni, investigador del Programa Nacional de Investigación en Carne y Lana del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) participó de la Gira Texel 2022. Explicó que su presencia fue como técnico porque en INIA Las Brujas “tenemos una majada Texel que funciona como centro de conexión para la Sociedad de Criadores, las cabañas que están dentro de la evaluación genética llevan carneros” que son evaluados a través de los hijos. “Las Brujas no produce carneros pero funciona como una cabaña más”.
Los corderos y corderas de Las Brujas van a INIA Tacuarembó y en la Unidad Experimental La Magnolia se realizan “mediciones de eficiencia, consumo individual de alimento y la eficiencia de conversión y las emisiones de metano. Los machos van a faena y se le hace seguimiento en calidad de canal, peso de carcasa, el largo de las piernas, perímetros, calidad de carne, terneza, etcétera”.
Además, en Las Brujas las ovejas se ordeñan para estudiar la producción de leche, la aceptación de los corderos por parte de las madres, el comportamiento, la resistencia a parásitos, etc.
Cabe agregar que INIA también trabaja con otras razas.
“Para producir más carne hay que producir más corderos”
Consultado sobre cómo ve la evolución de la raza, Ciappesoni dijo que Texel “fue la primera en tener evaluación genética y hoy se ve un progreso muy importante en crecimiento corporal en las primeras etapas de vida hasta el destete, hasta el peso de cordero pesado”, y destacó la muscularidad y el control del espesor de grasa.
“Desde el punto de vista social la raza también ha crecido mucho posicionándose como una de las razas carniceras más fuertes en el país y en los últimos años tuvo un empuje muy fuerte de la Sociedad de Criadores que quedó demostrado en la gira por la cantidad de personas que asistió; se ve que las cabañas tienen interés, pero también los productores que hacen cruzas por el potencial de crecimiento en la primera etapa de vida”.
Finalmente, Ciappesoni consideró que “para producir más carne hay que producir más corderos” y es necesario “tener buena señalada, superar un 100% a nivel nacional, esa sería una primer meta y me focalizo más en ese número que en llegar a 20 o 25 millones de ovejas”, porque “podemos tener menos ovejas pero que sean más productivas, ese es el camino que siguieron otros países: llegar al 100% de señalada que es básicamente manejo alimenticio y cuidado de las majadas. Cuando tengamos esos porcentajes podremos tener más corderos, producir más carne y poder dedicar parte de esas majadas a los cruzamientos terminales, donde ahí se puede expresar la genética”.
En resumen, “hay que aumentar la producción con las herramientas que tenemos sin descuidar los flagelos que tiene la producción ovina y que ya conocemos”, concluyó.
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