Uruguay está atento al posible ingreso de langostas, pero es una buena noticia que regresarían los fríos, lo cual hace que las langostas se desplacen menos y traten de evitar las bajas temperaturas.
Las autoridades del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) en coordinación con la Asociación Nacional de Empresas Privadas Aeroagrícoas (Anepa) realizaron ayer un vuelo de reconocimiento para evaluar la situación de riesgo de ingresos de langostas al país. La observación incluyó los departamentos de Paysandú, Salto y Artigas.
El cambio de clima en Uruguay ha generado las condiciones adecuadas para que las langostas lleguen al país y se estima que podrían hacerlo en las próximas horas, durante el día, que es cuando se desplazan. Sin embargo el cambio de temperatura con tendencia a la baja sería un freno importante.
Leonardo Olivera, director de los Servicios Agrícolas del MGAP, y Juan Chalkling, de Anepa, dijeron en rueda de prensa que el vuelo de reconocimiento se hizo con especial atención al norte de Salto entre Constitución y Belén ya que las condiciones de temperatura y viento indicaban que ese podría ser el lugar de ingreso.
Agregaron que se pudieron hacer vuelos a la altitud que vuela el grupo de langostas que se conoce como manga.
Las maniobras duraron casi dos horas y se constató la ausencia de langostas, sin embargo aclararon que eso “no quiere decir que no las haya” en algunos puntos del país, pero no la manga en vuelo que es lo que se está tratando de ubicar y que son causa de problemas y preocupación por el daño que causan.
También resaltaron que “en caso de haber ingresos, la posibilidad del control era bastante interesante”, y eso es una noticia positiva por lo que manifestaron conformidad por “la capacidad de control” que tiene Uruguay en caso de que el ingreso se concrete.
Las autoridades se encuentran en comunicación con el Senasa de Argentina para conocer los movimientos de la manga y poder conocer su trayectoria y hacia qué zonas se dirige.
Otra buena noticia es que regresarían los fríos, lo cual hace que las langostas se desplacen menos y traten de evitar las bajas temperaturas.
Uso de productos por excepción
Olivera se refirió al uso de productos químicos para combatir las langostas, dijo que hay una resolución del Ministerio que permite el uso de productos “por excepción y esto es una excepción porque no ocurre hace más de 80 años”, pero además están evaluados por el Ministerio y son productos que “todos usamos en nuestras casas para controlar insectos”.
Aseguró que “se van a brindar las garantías tanto para la población como para el medio ambiente de forma de tener el menor impacto posible, pero también se debe proteger a los productores que podrían ser afectados por las langostas”.
Lo ideal es que no lleguen al país, pero de hacerlo que lo hagan en zonas de baja población, preferentemente ganadera, de baja densidad de árboles, que no haya fruticultura, plantaciones citrícolas, arándanos, etc.
De la Comisión de Desarrollo Apícola a los apicultores
La Comisión Honoraria de Desarrollo Apícola emitió un comunicado de alerta a los apicultores de Artigas, Salto, Paysandú y Rivera, con sugerencias prácticas para mitigar el daño que podrían sufrir las abejas por efectos de las aplicaciones.
El comunicado señala que “ante información recibida de último momento” sobre “el eventual ingreso de la langosta a nuestro país, se deben tener en cuenta las recomendaciones” realizadas.
Si las mangas llegan a Uruguay se realizarán aplicaciones de productos, por lo cual es necesario “proteger a los apiarios”, dice la Comisión.
Las medidas son simples pero necesarias: el traslado de las colmenas a sitios de menor riesgo; el confinamiento individual o colectivo de los apiarios; o tapar las colmenas con lona de camión u otra suficientemente gruesa para brindar protección.