Christophe Lhéritier, CEO de Urimpex, analizó los pro y contras del mercado internacional de la miel que presenta grandes oportunidades para Uruguay, que a su vez debe generar mejores condiciones de mercados y trabajar para mejorar la producción.
En el discurso de clausura de la Expo Prado, entre los temas destacados por el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Ing. Carlos Uriarte, se encontraba la apicultura, una actividad que “no escapa a problemáticas similares del resto de la producción agropecuaria”.
Agregó que es un rubro que pasa, “sin dudas por la peor crisis de su historia” debido a “los altos volúmenes de miles adulteradas de diferentes orígenes que se vuelcan al mercado. Esto genera una disminución de la demanda y por consecuencia muy bajos precios, que a nivel local en su mayoría no logran ni siquiera cubrir costos de producción”.
Además los “contaminantes medioambientales y los límites comerciales fijados generan una serie de contratiempos disminuyendo drásticamente el ingreso de miel a mercados exigentes”, comentó el ministro.
A pesar de los problemas mencionados, “este año Uruguay superó los 10 millones de kilos exportados con una demanda sostenida” y estimó que no quedará miel para exportar en los próximos meses por lo cual se ingresará en la nueva temporada sin stock, “algo que no ocurría desde hace varios años”. “Podemos ilusionarnos” con que en la próxima zafra habrá “una mejoría de precios”, concluyó Uriarte.
Mayor venta pero a precios bajos
Días antes del discurso del ministro, el CEO de Urimpex, Christophe Lhéritier, había comentado como positivo el incremento de las exportaciones, y lamentó que “los precios no han acompañado la buena noticia” y que el precio “promedio de ventas fue el más bajo de los últimos años”.
El aumento de las ventas se explica por la buena producción y la colocación de mieles de años anteriores; “la producción superó las 11.000 toneladas y probablemente se llegue a fin de año con más de 13.000”, estimó, y subrayó que la mayor colocación “es un avance”, pero “no podemos decir lo mismo de los precios”.
El mercado de miel está “movidito, aunque los compradores traten de aplacar los ánimos. A veces logran encontrar la válvula de escape”, ubicada en Oriente, puntualizó en una nota publicada en el sitio web TodoElCampo.
Los puntos a favor de los vendedores
En sus consideraciones, el empresario se refiere a los puntos a favor que tienen países como Uruguay que producen miel de calidad, así como los en contra. Por último las acciones que considera deberían tomarse en lo local.
Lhéritier enumeró entonces seis puntos a favor que tienen los países vendedores de miel.
“Tenemos una mala cosecha de Ucrania (que) es uno de los 4 mayores exportadores del mundo” y “siempre empuja el precio hacia abajo” pero con la caída productiva de ese país “esperemos que (los valores internacionales) se ponga más firmes”.
Otro punto a favor son las “nuevas normas de etiquetado en España y Francia: bueno para los apicultores locales y bueno para los países de buena reputación”.
Se generó “aumentó del consumo mundial durante el confinamiento” por la pandemia.
También mencionó la “obligatoriedad de análisis para controlar la adulteración en India” con lo cual se quitaría volumen del mercado, especuló Lhéritier.
El “nuevo standard de la miel en Estados Unidos que incorpora parámetros que van contra las mieles adulteradas”, es otro factor a favor de Uruguay.
Por último, “los países de América del Sur llegan sin stock a la nueva cosecha, la cual empieza a fines de este año”.
Los puntos en contra
También hay puntos en contra que atender. El primero mencionado por Lhéritier es que “los envasadores de Estados Unidos están con stock hasta fin de año”.
Segundo, que “Vietnam entra a la Unión Europea con 0 % de arancel” por la firma de un tratado de libre comercio.
La “recesión mundial podría hacer bajar el consumo”, y se “de ahora en más, Japón podría no tener tolerancia para residuos de herbicidas”.
Bajar los costos de producción
En lo local Lhéritier expresó que la apicultura está “a la expectativa de medidas que ayuden” a facilitar “las exportaciones de miel como de bajar los costos de producción”.
“Por lo pronto el combustible no aumentó y el dólar está en un nivel aceptable, lo cual ayuda a la producción en general”, finalizó.