A mediados de diciembre el futuro ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca Ing. Agr. Carlos María Uriarte dijo a La Mañana que el arrocero es uno de los sectores que está pasando “el peor momento”, y eso “amerita soluciones de emergencia”.
El último número del Anuario de Opypa (Oficina de Planificación y Política Agropecuaria) confirma lo expresado por el Ing. Uriarte: “descenso alarmante del área sembrada”, endeudamiento excesivo del sector “sin grandes variaciones” pero con “importante incremento en la morosidad”; además “la cadena arrocera mantiene la tendencia de debilitamiento de los resultados económicos, que se reflejan en un menor nivel de actividad tanto en la fase primaria como en la industrial”.
También puntualiza que “el área sembrada en la zafra 2018/19 ya mantenía la tendencia decreciente de los últimos años, alcanzando las 145 mil hectáreas” lo que implica una caída del 11 % en relación a la zafra anterior.
Sobre el rendimiento Opypa señala que “en la zafra 2017/18 el mismo fue 8 % menor al promedio de los últimos años, mientras que en la presente zafra alcanzó 8,28 toneladas (166 bolsas) por hectárea (…). El incremento en el rendimiento no pudo compensar la disminución del área, por lo cual la producción final se redujo un 5 %”.
En cuanto a los costos de producción por hectárea se registró “un leve descenso, principalmente por el incremento del tipo de cambio”.
Sin embargo “el margen del cultivo mantiene su tendencia decreciente”, en especial en el número de los productores menores y que no han podido diversificarse; y estima que “el margen de la zafra 2019/2020 no debería presentar grandes variaciones respecto a la 2018/2019”.
El documento destaca que Paraguay “mantiene la tendencia de los últimos años” convirtiéndose en “el principal abastecedor de arroz de Brasil” por encima de Uruguay.
En recientes declaraciones, el presidente de la Cámara Paraguaya de la Industria del Arroz, Ignacio Heisecke, dijo que es un cultivo con “buenas perspectivas” para su país, y un estudio del Centro de Análisis de la Economía Paraguaya coloca a ese país en el puesto 17 de los principales exportadores.
El viernes 3 fue la inauguración de la cosecha de arroz. El acto se realizó en Itapuá (departamento ubicado al sur de Paraguay) con la presencia del presidente Mario Abdo Benítez quien ratificó su apuesta por el sector productivo y dijo que la cosecha arrocera será un éxito y de mejor producción que la anterior, anunció obras viales en el Chaco con el fin de elevar la producción y destacó que su país es el que más creció porcentualmente en la producción de ese cereal en los últimos 12 años.
“Paraguay es un país agroindustrial que necesita tener cada vez más fuerza, más compromiso y políticas públicas que acompañe el desarrollo del sector”, definió.
Mario de Garrou: el problema de Uruguay es el costo interno
Consultado sobre el avance arrocero paraguayo mientras que la producción de Uruguay parece empantanada, el directivo de la Asociación de Cultivadores de Arroz (ACA), Mario de Garrou, dijo que “la explicación de eso es el costo interno de Uruguay”.
“En el arroz Uruguay es muy competitivo, el problema es el costo interno, pero Paraguay tiene desarrollado un sistema arrocero por un tema monetario, es un país que se maneja en la moneda doméstica que es el guaraní, mientras Uruguay en dólares”
Uruguay debería “mejorar la competitividad y el costo de producción. En calidad nuestro arroz es infinitamente más competitivo que el paraguayo”, pero para exportarse “tiene que pasar por todo el intestino y el aparato digestivo uruguayo que le hace perder competitividad”, graficó. “Eso quiere decir que un productor uruguayo sólo saca su arroz con industrialización y es ahí que se vuelve poco competitivo. Si se vendiera el grano sin industrialización sería muy competitivo porque la calidad de nuestro grano es muy buena. Quiere decir que el costo interno uruguayo es muy alto”. El proceso de industrialización “tiene varias etapas” pero “Paraguay vende casi todo su arroz sin industrializar (pady), sin haberle sacado la cáscara o a veces sólo le saca la cáscara” (cargo).
Respecto a que Paraguay desplazó a Argentina y Uruguay en las ventas de arroz a Brasil el directivo de ACA dijo que eso “Brasil no siempre ha sido el mercado que más nos ha tonificado” aunque “en los últimos dos años ha sido un mercado muy bueno”, sin embargo “el tiempo de cambio hace que Brasil a veces sea un mercado atractivo y a veces no”.
Pero Uruguay “puede recuperar el mercado brasilero”. Para lograrlo “precisamos un Ministerio de Relaciones Exteriores que actúe en el momento en que podamos recuperarlo”, afirmó.
Las medidas urgentes
Consultado sobre cuáles serían las medidas urgentes para el arroz, De Garrou dijo que “por el lado de las relaciones exteriores se requiere una conversación fluida” con el mundo.
“En lo interno tendríamos que poder transportar mayores toneladas y menor precio por tonelada”; también hay que corregir las “restricciones” en el trabajo y que una persona pueda hacer más de una tarea, “o sea mayor productividad laboral”. Otro punto es que la “política cambiaria permita al productor arrocero seguir entusiasmado en la producción, eso haría que el área sea mayor”; y “quitar las trabas burocráticas de por ejemplo del Ministerio de Medio Ambiente, algunas de ellas son totalmente tontas”, reclamó.
También subrayó que se debería “bajar el costo de un año a otro rápidamente para que no sigan quedando productores por el camino”.
Sobre la energía eléctrica dijo que es necesario “pagar menos”. La factura de UTE se compone de potencia contratada, cargo fijo y kilowatt consumido.
El cargo fijo y la potencia contratada son lo que son, el único ítem variable es el kilowatt consumido. El kilowatt de Uruguay no es tan caro comparado con el de Argentina, diferente es Paraguay porque ellos tienen muchísimos kilowatt y barato. Lo que nos sirve es pagar la boleta entera más barata, porque bajar el kilowatt y sigue saliendo caro el cargo fijo y la potencia contratada”, no es la solución.
El gasoil “al precio que está hoy y con este tipo de cambio no es la variable que uno deba atacar. Siempre fue caro, pero ahora se da una realidad diferente y no debería subir para quedar competitivo”.
Los productores que han dejado el arroz pueden volver
“Desde hace varios años los productores arroceros han estado anexando otros rubros y algunos dejan de producir” y “este año se ha dado la mayor caída del área en los últimos 26 años”, sin embargo es posible volver al arroz. “Hay un montón de agua que no se usa para nada. Son más de cien represas sin uso y rodeadas de árboles, el área de arroz perdida puede volver al arroz si éste es un negocio atractivo”.
“Estamos muy esperanzados” con la llegada del Ing. Carlos Uriarte al Ministerio. “Nadie en el arroz puede ser pesimista, somos totalmente optimistas como siempre lo fuimos con cualquier gobierno. No ha habido institución más progubernamental que ACA, pero lo que precisamos es un gobierno para trabajar. Tenemos un montón de ideas”, afirmó.
Cibils Soto Consultores publicó que Uruguay es el 8º exportador mundial de arroz y la FAO señaló a Uruguay como el tercero en rendimiento por hectárea con 8.500 kilos ¿Qué opinión le merece?
El arroz es un producto únicamente para consumo humano y eso lo hace altamente sensible a la política de cada país. No quiere decir que nosotros producimos más arroz que cualquiera, lo que quiere decir es que en Uruguay se consume aproximadamente el 5 % del arroz, otro 5 % lo usa para semilla y se exporta el 90 % de lo que producimos. Entre el consumo interno y lo que reservamos para semilla, es menos del 10 % lo que queda en Uruguay en cada zafra.
China, India, Tailandia son países que tienen un saldo exportable, pero lo primero que hacen es asegurar su mercado interno. El arroz es de consumo masivo de la población y por eso a nadie se le ocurre no tener su arroz a un precio competitivo en el mercado interno. Nosotros no tenemos un mercado interno y por eso no logramos ser competitivos afuera. Pero no solo por eso, no lo logramos porque Uruguay no está pensado, por lo menos hasta el día de hoy y esperemos que cambie, no está pensado para ser agroexportador.
Nosotros tenemos que competir con países que le dan un precio interno al arroz el cual nosotros no logramos porque el precio interno nuestro no equipara. Dicho de otra manera: nosotros precisaríamos poder exportar a Colombia en las condiciones que Colombia le paga al productor colombiano.
¿Y eso es imposible?
Medida imposible no hay, es un tema de negociación. Hay que ver qué tendremos que comprar a Colombia para que Colombia haga eso. Ver qué tenemos que comprar a Perú para que haga eso. Es un tema estratégico, comercial y alimentario. Ningún país se va a quedar sin su volumen de arroz aunque le salga más caro. Creo que la estrategia va por el lado de ver qué podemos comprar nosotros para que esos países estén seguros de que nosotros les vamos a dar equis volumen de arroz al precio que están dispuesto pagar internamente, no externamente.
Para eso se precisan políticas internas y políticas serias, mucha política exterior tratando de colocar a precios en que la gente y el consumidor exterior está dispuesto a pagarlo.
¿En esas negociaciones estará la posibilidad de los TLC?
Los TLC son muy buenos, pero son a largo plazo. Lo que precisamos es una política exterior de urgencia. Por calidad nuestro arroz que se coloca solo, pero debe ser rentable colocarlo. La calidad lo hace muy fácil de vender, pero depende de qué precio nos paguen por él.
¿Qué mano de obra emplea el sector?
El dato mío personal es que dinamizamos entre 12.000 y 15.000 personas, podría ser mucho más. Llegamos a mover casi de 20.000 personas en 2008, 2009, 2010 que fueron años de crecimiento del sector arrocero, entre los que hacían represas, los que movían agua, fletes, maquinarias, importadores, los molinos industrializadores, era una cadena muy grande.