China: la edad de la ambición. Evan Osnos. El hombre del TR3S. 2014, 524 págs.
En momentos que indiscutiblemente China ha logrado metas de crecimiento económico más allá de lo impactante y es un actor definitorio en el juego geopolítico, pasa a ser relevante hurgar los diversos testimonios sobre un proceso contradictorio y sobre el cual la información es, paradójicamente, escasa.
En esa línea Evan Osnos es un periodista británico con una multiplicidad de destinos, New York en el 11 de Septiembre del 2001, Irak en las Guerras del Golfo, corresponsal en China desde 2005 al 2013. Es autor de Wildland, The Making of America´s Fury, una investigación sobre las vidas de tres familias norteamericanas desde el 2001 hasta el advenimiento de la Era Trump.
Hijo de un afamado periodista de origen polaco, siendo corresponsal del New Yorker y del Chicago Tribune, logró tanto el Pulitzer como National Book Award por la presente investigación.
El tema central es la colisión entre las necesidades individuales activadas por el crecimiento económico y un Partido Comunista decidido a mantener su hegemonía. Osnos define la paradoja por la cual el régimen que más personas ha sacado de la pobreza en la historia restringe tan decididamente la libertad de expresión. ¿Por qué tantos jóvenes devotos de la cultura pop occidental se oponen a la influencia cultural de Occidente? ¿Por qué la palabra “lujo” está vedada en las vallas publicitarias mientras Ferrari y Rolls Royce son visibles por doquier? ¿Por qué el dinero y la prosperidad dan pie a una búsqueda de trascendencia espiritual? Con el peculiar don de la ironía británica, Osnos, responde todas estas preguntas contando las historias de los humildes, los poderosos y los estrambóticos (que no son pocos), buscando las claves o desvelando los secretos.
Quizás, como arranque, sea necesario recordar la sentencia de Confucio: “Al jefe de un poderoso ejército se lo puede capturar, pero no así las aspiraciones de un hombre común y corriente”.
China es enigmática, fascinante y tiene una economía muy pujante. Pero los países de nuestro porte deben ser doblemente cautelosos y prudentes. Tomar un tiempo para conocer y meditar políticas de Estado continúa siendo una buena premisa. Este libro es un insumo más para la construcción de una visión integral del tema.
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