El crepúsculo de Prometeo. Contribución a una historia de la desmesura humana. Francois Flahault. GALAXIA GUTENBERG. CÍRCULO DE LECTORES. 2013, 205 págs.
¿Quién no se identifica con el heroísmo de Prometeo? Aquel Titán, amigo de los humanos que roba el fuego a los dioses para brindarlo a la Humanidad toda y que por dicha acción es condenado a permanecer encadenado mientras un águila devora su hígado día tras día. Y desde la noche de los tiempos encarna, entonces, el arquetipo de la luz del conocimiento que libera, emancipa a los hombres. Pero de un conocimiento que incluye directamente la técnica, esa técnica que permite dominar la Naturaleza al antojo de estos nuevos semidioses en que nos hemos convertido, gracias la ciencia que crece de forma exponencial, generación tras generación. Prometeo ha devenido en mito tan poderoso que ha llegado a nuestros días bajo formas insospechadas, pues es el sustrato directo de que ningún límite se puede interponer ante la voluntad del homo sapiens.
Flahault, director de investigación en el Centre National de la Recheche Scientifique y responsable del Seminario de Antropología general en l´Ecole des hautes Études en Sciences Sociales, se propone algo no menor: construir la historia de la desmesura humana, justamente hoy que el crecimiento material sin fin parece haberse convertido en la principal razón de ser de la humanidad. De hecho, la modernidad se ha asentado sobre la idea de progreso y sobre la emancipación a través del conocimiento y el dominio de la naturaleza. Y entonces el desafío es realizar una “arqueología” del ideal prometeico. Mostrar cómo, bajo la apariencia de racionalidad, está gobernado por la desmesura. La visión prometeica del hombre y de la sociedad responde al deseo de existir y de no someterse a ningún límite. Dicha visión ha alimentado el imaginario romántico, el positivismo, el comunismo, el desarrollo científico o el ultraliberalismo de ciertos sectores hegemónicos norteamericanos. Al analizar los errores fundamentales del prometeísmo, Francois Flahault nos ofrece pistas que permitirán pensar de otro modo aquello que somos y nuestras relaciones con el entorno natural y la sociedad.
Cabe acotar que el capítulo dedicado a analizar las implicancias últimas de los desvaríos individualistas glorificadores del peor egoísmo de Ayn Rand y su séquito de ultraliberales tiene un análisis muy certero sobre las insólitas e inesperadas relaciones con las prácticas más nefastas del stalinismo.
TE PUEDE INTERESAR