Historia de los Estados Unidos. Una nación entre naciones. Thomas Bender. SIGLO VEINTIUNO EDITORES. 2015. 382 págs.
Thomas Bender es un historiador norteamericano que se ha dedicado a problematizar la concepción del “excepcionalismo norteamericano”, esto es, la visión por la cual se entiende que la conjugación de un “destino manifiesto” y unas instituciones republicanas signadas desde el inicio por una opción religiosa como el puritanismo, habrían confluido en la conformación de una nación radicalmente única.
En función de lo previo, los estadounidenses están acostumbrados a contar la historia de su país como si la suya fuera una nación naturalmente autónoma y autosuficiente. La apuesta de Bender es reintroducir la historia norteamericana en el devenir mundial y derrumbar de este modo el mito de la excepcionalidad trazado por la narrativa convencional. Así, enfoca los acontecimientos clave de la construcción de la nación y muestra por qué solo es posible comprenderlos a la luz de las complejas relaciones globales que ha mantenido el país a lo largo de cinco siglos.
“Historia de los Estados Unidos” se inicia en el 1500. Cuando los viajes regulares por mar conectaron por primera vez todos los continentes. Luego, analiza la revolución y la independencia norteamericanas en el marco de la competencia entre los imperios decimonónicos y de la rivalidad entre Francia e Inglaterra. En la misma línea, explica la guerra civil en el contexto de las revoluciones europeas de 1848, y más adelante advierte los indicios del espíritu expansionista en la conquista del oeste, que se realizó a expensas de las comunidades indias y de gran parte del territorio mexicano (prácticamente la mitad que incluía también a California y Texas) y devela las aventuras imperiales en Cuba, Filipinas y Puerto Rico.
La conjunción del armado de casus belli rotundamente falsos más el ingrediente de una ideología de superioridad sobre las otras naciones, hicieron el resto. Pese a que los Estados Unidos nunca lo hayan admitido, hay una impronta imperial en la política de expandir sus mercados y asegurar sus inversiones en otros países. La crónica se cierra en el siglo XX, cuando, luego de la Segunda Guerra Mundial, EE.UU. se cierne sobre los acontecimientos globales de un modo sustancialmente más imperativo que antes.
Una forma alternativa de narrar la historia de la gran potencia, pero escrita desde el propio vientre de la bestia.
TE PUEDE INTERESAR: