Un ensayo peculiar por el enfoque y por su profusa carga documental que se propone llevar al dominio público el conocimiento de las causas y naturaleza de la Guerra de la Triple Alianza.
El propósito es mostrar el proceso histórico por el cual la mayoría del pueblo argentino se opuso a dicha tragedia, creando un ambiente general de protesta que llevó a la insurrección contra el gobierno belicista de Mitre.
Cuando el Gral. Urquiza ordena organizar las fuerzas contra Paraguay, López Jordán le escribe una carta breve y tajante: “Usted nos llama para combatir a Paraguay. Nunca, general, ese pueblo es nuestro amigo.
Llámenos para pelear a porteños y brasileños. Estamos prontos. Esos son nuestros enemigos. Oímos todavía los cañones de Paysandú. Estoy seguro del verdadero sentimiento del pueblo de Entre Ríos”.
En la presente obra se reproducen por primera vez varios de los artículos en que Hernández, desde las páginas del periódico El Río de la Plata condena la hecatombe y reclama justicia para el pueblo paraguayo semi agonizante; y se destacan sus comentarios a la polémica mantenida por Mitre con Juan Carlos Gómez. A través de las contradicciones en que éstos incurrían y confrontando sus palabras con los hechos, el autor del Martín Fierro desenmascaró a los actores y puso al desnudo los reales motivos y fines de la guerra.
Enrique Rivera concluye: “Así la guerra quedó constreñida a su auténtico carácter: una guerra realizada por el capitalismo extranjero, mediante sus agentes, la oligarquía porteña, la uruguaya y el Imperio brasileño, contra los pueblos argentino y paraguayo. Cayó el Paraguay a la vez que la Argentina era reducida a la condición de semicolonia.”
El texto está escrito con toda la pasión que puede generar el genocidio del heroico pueblo paraguayo. Como todo libro que intenta revisar la historia tiene aristas harto discutibles. En muchas páginas se introducen debates sustancialmente más propios del mundo de la Guerra Fría y de las polémicas dentro del campo socialista. Igualmente continúa siendo un aporte muy fermental a la historiografía de nuestro dolido continente.
TE PUEDE INTERESAR