La expresión continúa siendo emblemática, pese a que cada vez son menos los que recuerdan la escena de Casablanca, en que un Bogart sin cigarrillo -sin duda para no quemar la nariz de la bella rubia, lo que hubiera sido un despropósito- pronuncia, con su habitual inmutabilidad, la consoladora frase para una lacrimosa Ingrid Bergman. … Sigue leyendo “Siempre tendremos Paris”
Copia y pega esta URL en tu sitio WordPress para incrustarlo
Copia y pega este código en tu sitio para incrustarlo