Hoy les propongo un juego. Analicemos qué dicen los expertos sobre el valor de mercado de los futbolistas, cuánto valen los clubes nuestros con respecto al resto y hagamos la misma cuenta con las selecciones. Observemos qué ha pasado últimamente y qué podemos esperar entonces de nuestra selección para el Mundial.
Hay una empresa alemana llamada Transfermarkt que tiene como objetivo cotizar a todos los futbolistas profesionales del mundo. Se estima que tiene una “base de datos con más de 833.000 jugadores, 1.150.000 fichas de partidos, valores de mercado, etc.”.
El funcionamiento se basa en la premisa de que el valor de mercado o de posible venta de un futbolista va a ser muy parecido al promedio de las cotizaciones hechas por decenas de expertos que realizan los estudios estadísticos y evalúan a cada uno de ellos. Esta página web tiene más de un 95% de acierto de los precios finales de venta de jugadores.
En los últimos años he podido comprobar que los grandes campeonatos, las copas más importantes, las soñadas consagraciones van de la mano de las cotizaciones verificadas en el comienzo del torneo.
Para dar algunos ejemplos, citaremos al Campeonato Uruguayo. De los últimos 14 campeonatos, 13 fueron ganados por los grandes. A pesar de que tanto en Apertura, Intermedio o Clausura es bastante común que aparezcan otros clubes coronándose, finalmente lo más importante, la Copa Uruguaya, la gana uno u otro de los grandes. Por lo general los grandes presentan planteles valuados en US$ 18 a US$ 24 millones, mientras los demás están entre US$ 1 y 10 millones cada uno. Les alcanza a algunos para ganar torneos cortos, pero caen al final.
En Copa Libertadores la situación es parecida. Más allá de consideraciones como la cantidad de clubes por país, es claro que los planteles más valiosos, según los valores de mercado, apuntan a un grupo de cuatro o cinco clubes brasileños que se repartieron las últimas copas e incluso se enfrentaron entre ellos en finales. Desde el año 2005, acentuado a partir del 2017, los brasileños dominan con amplitud. Apenas Boca y River de Argentina parecen pelearles. Por lo general los equipos campeones brasileños, como Palmeiras o Flamengo, presentan planteles de US$ 150 a 200 millones de valor mercado. River y Boca rondan los US$ 100 millones hoy en día, aunque cuando jugaron la final en Madrid estaban más cerca de los US$ 200 millones cada uno.
En Europa, los clubes que se reparten los títulos, si es que el Real Madrid lo permite, andan entre los US$ 800 y 1100 millones de valor de mercado del plantel. Esto repercute en las finales mundiales de clubes donde los europeos ganaron 15 de las últimas 16 finales, siendo que el campeón de la Libertadores varias veces quedó eliminado en semifinales y si llega a la final apenas pasa la mitad de la cancha y casi ni remata al arco rival.
En resumen, Peñarol y Nacional se quedan con la Copas Uruguayas con planteles de US$ 20 millones, luego en Libertadores ceden terreno ante brasileños o argentinos que ganan las copas con US$ 200 millones para luego estos caer rotundamente ante europeos de US$ 1000 millones.
No hay caso, es así. Muchos se resisten mostrando ejemplo de partidos sueltos, por lo general no eliminatorios. Por ejemplo, el Sheriff le ganó a Real Madrid en su grupo, pero ya sabemos quién ganó la Champions.
Sin embargo, en Uruguay queremos soñar con copas que ya no podrán ser. Pero…
¿Qué pasa a nivel de selecciones?
Afortunadamente para nuestros hinchas, a nivel de selecciones o juveniles todo cambia. Si bien desde 1988 no se ganan copas Libertadores, en el siglo XXI las dificultades se agrandaron y en los últimos 10 años se hicieron imposibles, a nivel de juveniles es totalmente opuesto. Como muestra, basta referir a las seis Libertadores sub-20 jugadas en la última década siendo los uruguayos los clubes más laureados con dos ganadas (Nacional 2018 y Peñarol 2022), dos vicecampeonatos con Liverpool y Defensor, y un tercer puesto con River. Incluso en agosto Peñarol jugará la final Intercontinental ante Benfica en el Centenario.
Algo similar pasa con selecciones juveniles. Los celestes jugaron las finales del mundo de México 2011 en sub-17 y Turquía 2013 en sub-20. Además, ganaron casi sin esforzarse el Sudamericano sub-20 de Ecuador 2017 y el Panamericano de Toronto 2015. A nivel sudamericano hay que agregar la Copa América de mayores en Argentina 2011, y obviamente los mundiales de Sudáfrica 2010 con el cuarto puesto, y Rusia 2018 con el 5to puesto. En los últimos tres mundiales, Uruguay eliminó a Francia en su grupo del 2010, a Inglaterra e Italia en 2014 y a Portugal, campeón europeo con CR7 incluido en 2018.
Este tipo de resultado de clubes y selecciones juveniles, como de selección mayor es impensable en Libertadores, Sudamericana o Mundial clubista.
Pero veamos qué nos dice Transfermarkt sobre el valor de mercado de los posibles planteles para el Mundial de Catar.
Como podrá observarse, Inglaterra, Francia y Brasil superan los US$ 1000 millones, Alemania, Portugal, España y Argentina los siguen entre US$ 600 y 830 millones, para cerrar la lista del TOP 10 con Países Bajos, Uruguay y Serbia entre US$ 380 y 500 millones.
¿Cómo se traduce? Peñarol y Nacional con US$ 20 millones no podrán ganar la Libertadores contra US$ 200 de Palmeiras y Flamengo, o el Mundial de clubes contra europeos de US$ 1000 millones. Son 10 veces en menos en Sudamérica y 50 veces menos en mundial.
Pero a la selección uruguaya, con casi US$ 400 millones, la superan apenas ocho selecciones de las 32 que participarán, y está novena. Pierde en valor de plantel por 2 a 1 o menos con Alemania, Portugal, España y Argentina y por 3 a 1 o menos con Inglaterra, Francia y Brasil.
¿Se entiende la diferencia? No es lo mismo estar abajo 2 a 1 o 3 a 1 como Uruguay en Catar, que 10 a 1 o 50 a 1 si queremos ganar una Libertadores o un Mundial de clubes.
Ligando en los cruces se puede llegar a semifinales y todos los partidos serán peleables. Uruguay no será favorito ante los ocho que están más arriba, pero podrá pelear con chance. Esas diferencias, más “humanas” o aún mayores, no impidieron durante los años 60 y 80 ganar muchas copas a nuestros clubes. Soy de los que creen que hasta con una diferencia de 5 a 1 en contra se pueden lograr triunfos importantes, sobretodo en un mano a mano con alargue y penales.
Para entender nuestro grupo del Mundial hay que decir que la lista de valores de mercado es la siguiente: Portugal: US$ 772 millones; Uruguay: US$ 396 millones; Ghana: US$107 millones; Corea: US$ 22 millones.
El favorito es Portugal, pero Uruguay tiene razones para sentirse con chance ciertas de clasificar con relativa luz. El tema es el cruce en el cuarto partido. Es probable que sea Brasil con US$ 1000 millones o Serbia con US$ 375 millones. De la misma manera que no está perdido con Brasil, que nos supera por menos de 3 a 1 en valor de mercado, tampoco está ganado con Serbia a quien superamos por muy poquito.
En resumen, entre tanto número, quiero expresar que, así como creo que en el fútbol no siempre gana el favorito o el más poderoso, todo tiene un límite. Ese límite se ha roto en las competencias clubistas de mayores con la llegada de los jeques petroleros, los magnates rusos o millonarios chinos. En los clubes sub-20 todavía no pesa el dinero y ya se vio que competimos con gran éxito, seguimos siendo potencia en juveniles a nivel de selección y una vez más llegaremos a un Mundial, como en 2010, 2014 y 2018, para ser protagonistas. No somos favoritos, pero tenemos todo para pelearle a cualquiera y arruinar cualquier fiesta, como tantas veces. Atento Catar, que allá vamos……
*Periodista y productor especializado en deportes. Columna sobre la participación de Uruguay en el Mundial Qatar 2022
TE PUEDE INTERESAR