“Son aproximadamente 45.000 millones de dólares (la deuda de Argentina con el FMI) que tomó el Gobierno previo bajo la expectativa de que esto iba a generar un shock de confianza, entonces esto iba a bajar el costo al que la Argentina se endeudaba en los mercados financieros internacionales, iba a poder tomar prestado a tasas más bajas y con eso pagarle al Fondo. Eso no pasó”…”Ahora tenemos una montaña de vencimientos entre septiembre del 2021 y 2024 a los que no podemos hacer frente en las condiciones en las que está Argentina. Fue manifestado de forma explícita como un apoyo al Gobierno anterior para que pudiera ganar las elecciones. Bueno, finalmente la economía se desplomó como todos sabemos y ahora buscamos resolver el problema”.
Ministro de Economía argentino, Martín Guzmán, refiriéndose a la negociación con el FMI, según Clarín de Argentina.
España corre el riesgo de verse rezagada frente a los países del entorno. Hay causas estructurales, como la inflexibilidad del mercado laboral o la carencia de planes de reindustrialización, que explican la inconsistencia de nuestra economía. Sin embargo, subyacen otras razones que son imputables a la desastrosa gestión del Gobierno de PSOE y Podemos. El colapso económico no se produjo solo por la acción letal de la pandemia, sino por la negligencia e imprevisión del Ejecutivo para gestionar la emergencia sanitaria. No basta con extender los ERTE -medida imprescindible- o habilitar meros parches paliativos, como el subsidio que plantea Trabajo para aquellos parados que hayan agotado todas las ayudas. En esta coyuntura se requiere un Gobierno fuerte con un rumbo claro, y lo que tenemos es una coalición débil y presa de prejuicios ideológicos que conducirán a disparatados aumentos del gasto y de la deuda.
Editorial de El Mundo, España
Esta pandemia sin duda está poniendo en primera plana el debate sobre la desurbanización. La oportunidad de volver a habitar las provincias, los pueblos… invirtiendo finalmente en la banda ancha, en la planificación del trabajo inteligente que no es simplemente el teletrabajo, sino el empoderamiento real del trabajador. Paralelamente a estos aspectos, es necesario invertir para que la vida en la provincia sea una oportunidad también para aquellos que quieren hacer carrera. Pero esto no puede hacerse si no sabemos exactamente con qué recursos pueden contar los suburbios de Italia, los que se han vaciado en las últimas décadas.
Il Sole 24 Ore, Italia