A un día de que se comunicara un nuevo caso de colusión, la Fiscalía Nacional Económica (FNE) informó que con el fin de resguardar las condiciones competitivas en el sector del retail y el comercio, solicitó al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) que adopte resguardos para evitar que los operadores de malls accedan a información comercial sensible de otros participantes del mercado. Lo anterior, “tras constatar –en un informe elaborado por la División Antimonopolios– que existen relaciones de propiedad y vínculos personales en la industria de centros comerciales tipo malls, así como también integración vertical entre los operadores y algunos locatarios, principalmente grandes tiendas”, según señaló la entidad fiscalizadora a través de un comunicado. A esto se suman algunas cláusulas en los contratos entre los operadores de malls y los locatarios que generan riesgos para la libre competencia.
La Tercera, Chile
El encarecimiento de la electricidad, la subida de las materias primas y el colapso del transporte marítimo y terrestre suponen “una seria amenaza” para la industria alimentaria española y pone “en riesgo” la supervivencia de una parte del sector y del empleo, ya que muchas empresas se encuentran aún en proceso de recuperación tras la pandemia. La Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) ha alertado hoy de la «gravedad» de la situación provocada por el incremento inflacionista en costes energéticos, materias primas y auxiliares, así como las dificultades de aprovisionamiento.
ABC, España
Alarma en el campo, el costo de la siembra se duplica. Un análisis de Coldiretti hace saltar las alarmas sobre los balances de las explotaciones agrícolas y sobre el suministro de alimentos en los sectores deficitarios, desde el trigo hasta la carne y la leche. Con el inicio de las operaciones de cultivo de otoño, los agricultores se ven obligados a afrontar aumentos de precios de hasta el 50% para el gasoil. El aumento de los costes energéticos afecta también a la calefacción de los invernaderos de flores y hortalizas, pero también al coste de la compra de fertilizantes, maquinaria agrícola y piezas de recambio, para los que se producen incluso preocupantes retrasos en las entregas. “El futuro de la agricultura italiana está en juego”, explicó el presidente de Coldiretti, Ettore Prandini, señalando que el aumento de los costes se produce “en una situación en la que la pandemia de covid ha abierto un escenario de reducción de los intercambios comerciales, acaparamiento, especulación e incertidumbre que impulsa la carrera de los Estados detrás de los bienes esenciales para lograr la autosuficiencia de la producción en sectores estratégicos para garantizar la alimentación de la población”.
La Stampa di Torino, Italia