Para cuando los bancos centrales consigan reducir la inflación, probablemente volveremos a un mundo de bajo crecimiento. Es difícil ver qué es lo que podría contrarrestar los vientos en contra del envejecimiento de la población, el enlentecimiento de China y un mundo desconfiado, militarizado y desglobalizado. Ese mundo de bajo crecimiento y posiblemente baja inflación es uno que los banqueros centrales entienden de una manera menos clara. Las herramientas utilizadas por los bancos centrales después de la crisis financiera, como la expansión cuantitativa, no fueron especialmente eficaces para fomentar el crecimiento. Además, las medidas agresivas de los bancos centrales podrían precipitar un mayor dominio fiscal y financiero. Entonces, cuando todo vuelva a la normalidad, ¿cuáles deberían ser las atribuciones de los bancos centrales? Los bancos centrales no son las instituciones obvias para combatir el cambio climático o promover la inclusión. A menudo carecen de mandatos legales para abordar estas cuestiones. En lugar de usurpar áreas con gran carga política, lo mejor es que los bancos centrales aguarden a recibir un mandato de los representantes electos del pueblo.
Raghuram Rajan, en Finanzas & Desarrollo, FMI
TE PUEDE INTERESAR: