Un 19 de octubre del año 1929, fue fundado en Montevideo el Frigorífico Modelo. En una ciudad en la que prácticamente la cadena de frío no existía. Su fundador fue Saturnino Fernández, un español llegado a nuestro a país cuando joven, emprendedor y con una mentalidad innovadora para la época. Sus ideas iniciales con el frigorífico fueron la venta de barras de hielo a través de carros tirados por caballos y la incursión en frío para productos de granja. El proyecto se estructuró mediante la creación de una sociedad anónima sustentada por inversionistas que confiaron en su iniciativa.
Fernández decidió recurrir al mercado de capitales para financiar su proyecto que, apenas iniciado, ya cotizaba en la Bolsa de Valores. De hecho, lo continúa haciendo hasta el día de hoy y, tal vez, sea una de las pocas empresas uruguayas que lo hacen desde su origen tan temprano. Esto permitió, además, poder realizar las siguientes inversiones que se fueron sucediendo en el futuro.
Hugo Fernández, presidente actual de Frigorífico Modelo, es nieto de Saturnino. Ingresó a la empresa cuando aún era un joven estudiante de la Facultad de Ciencias Económicas siguiendo los pasos de su abuelo, observando cada una de sus acciones y tomándolas como enseñanzas para estar, el día de mañana, al frente de una empresa líder en su rubro.
“Sabía delegar, estaba en cada detalle de todos los aspectos de la empresa e incursionó en actividades de las cuales poco conocía de su sector. Transcurridos algunos años, por observación podía opinar de un tema con igual o mayor capacidad que una persona que había estado toda su vida en ello”, recordó en entrevista con La Mañana, a sus 42 años de ingreso a la compañía.
Con el mismo afán de visionario de sus comienzos, fue delegando también el lugar a sus nietos, indicándoles que, en ocasiones, una buena idea puede surgir de la suma de opiniones, una característica clave para el buen desarrollo de la interna de las organizaciones.
En las actividades iniciales ocurrió un cambio tecnológico, claro está. No sólo la gama de productos se amplió –asociada al crecimiento de las importaciones y la aparición de nuevos alimentos- sumándose los lácteos, los concentrados de fruta, manteca, pescado y carnes en general. En lo que hace a la producción de hielo, se continúa en el sector. La gran novedad fue la etapa agropecuaria que se encuentra diversificada, incluyendo la producción de arroz y la agrícola en régimen de medianería, la ganadería a nivel general, la cabaña de Aberdeen Angus –donde son referentes a nivel nacional y han incursionado a través de alianzas a nivel regional, con presencia en el Mercosur- y la medianería forestal.
En la visión de la empresa y misión uno de los aspectos que nos marcamos es que en los rubros de actividades en donde participemos seamos un referente al menos. Tratamos de hacerlo mejor, no descontamos que hay competencia, hay gente que hace las cosas bien y eso nos impulsa a hacer las cosas cada vez mejor
Más recientemente, en el año 2012, iniciaron el primer depósito para el sector logístico con un centro de distribución para productos que no requieren de frío. Fue realizado en base a un acuerdo comercial con la empresa Katoen Natie, con quienes desarrollan 54 hectáreas en los accesos de Montevideo. De esta forma, brindan servicio relacionado al movimiento y manejo de la mercadería dentro del depósito y, seguramente, próximamente brindarán el servicio de la distribución de los productos a los locales de venta, con el fin de fidelizar a los clientes brindándoles un servicio integral, adelantó Fernández.
“El sector logístico de la empresa es de primer nivel en comparación con la región y creo que lo marca el hecho de que nuestros principales clientes son en general multinacionales”, comentó el ejecutivo.
De todas formas, manifestó que en nuestro país este concepto no está plenamente identificado y que si bien hay varias industrias que desarrollan su propio centro, realizarlo en un parque tiene sus propias ventajas.
Hoy la empresa cuenta, en cuanto a la logística de productos que no requieren frío, con 70.000 metros cuadrados cubiertos que están en plena actividad. Para el próximo año se incorporarán 5400 metros cuadrados más.
Por otro lado, buscando integrar nuevas alternativas, en los últimos años incursionaron en Paraguay en sociedad con Katoen Natie, adquiriendo campos utilizables para ganadería. “Ya estaríamos en los comienzos para que esa unidad sea autosuficiente y comience a producir como tal. Creemos que es un potencial mercado que tiene muy buenas condiciones para crecer”, dijo Fernández al respecto. Adicionalmente, desarrollaron en Asunción una planta de frío con una capacidad operativa de 8600 toneladas que ya está en funciones. “Creo que esa variante que hoy no está desarrollada como se debe, será un cambio cualitativo en la visión del productor paraguayo”, añadió. De esta forma, afirmó que ven en Paraguay la posibilidad de expansión.
Por otro lado, Frigorífico Modelo trabaja con Dairyco hace más de veinte años. En la presentación de productos que requieren cadena de frío son líderes y la idea, afirmó Fernández, es continuar en un sector que tiende cada vez más al consumo de productos saludables.
Esta diversificación de las actividades supone también una forma de distribuir el riesgo y mayor nivel de involucramiento respecto al seguimiento necesario, explicó el entrevistado, dado que demanda un profesionalismo que es clave para el desarrollo. “Los años pueden ser buenos o no, pero con la diversificación se logra una rentabilidad de empresa que, quizá sea más bajo, pero es seguro”, manifestó.
Pero el liderazgo y la diversificación deben ser desarrollados en un país que es considerado caro en comparación a sus competidores de la región y el mundo. Al respecto, Fernández comentó que para afrontarlos están en la mejora continua de los procesos y en la optimización de la empresa. “Si uno se apoya en que es líder pierde, porque el liderazgo puede durar sólo un día”, dijo a modo de ejemplo. Es por ello que, explicó, buscan palear los costos a través de la asociación en algunas áreas. La tercerización es en ocasiones una alternativa válida para hacer que la empresa crezca sin incurrir en riesgos adicionales.
En los últimos noventa años el país pasó por distintas etapas, al igual que la empresa. El secreto, en un mercado pequeño como lo supone Uruguay, radica, según Fernández, en “liderar para afuera”. A nivel interno, Frigorífico Modelo ha sido un referente. A nivel regional, los valores de la empresa incorporados en el propio ADN de su estructura –relacionados a la ética y el respeto- han significado un plus. “Vivimos en un mundo en el cual hay empresas que por hacer un buen negocio dejan al costado algunos aspectos. Claramente en el corto plazo les puede ir muy bien, pero en el mediano plazo lo que queda es todo aquello asociado a los valores”, observó. En este sentido, confesó: “Tenemos el orgullo de decir que ya transcurrieron noventa años y que estamos pensando en todo lo que vendrá”.
El valor de la confianza
Frigorífico Modelo fue fundada gracias a la inversión y la confianza que depositaron inversionistas. Al respecto, Fernández opinó: “Lamentablemente, el mercado de capitales en nuestro país es casi inexistente. En este aspecto Uruguay ha retrocedido y, por distintas circunstancias, no es una herramienta que se esté utilizando. Un deseo sería que este mercado renaciera, sabiendo que es un mercado chico pero una gran herramienta para que los pequeños inversionistas puedan sumarse a generar nuevas actividades”. Además, agregó que hay restricciones dadas por costos asociados o requerimientos que hacen que sea más conveniente recurrir al sistema financiero.