Con el acuerdo de Prespa firmado en junio del año pasado entre Grecia y la Antigua República Yugoslava de Macedonia, ahora llamada oficialmente Macedonia del Norte, se termina un capítulo en la vida de ambos países balcánicos marcados por embargos, bloqueos y tensiones. El origen histórico del conflicto inició en 1991, cuando Macedonia del Norte declaró la independencia de Yugoslavia y se autodenominó República de Macedonia.
La palabra “Macedonia” describe varias cosas. Por ejemplo, una región geográfica que abarca cuatro países: Grecia, Albania, Bulgaria y Macedonia del Norte. También da nombre al antiguo Reino de Macedonia, de Filipo II y el más conocido Alejandro Magno. Esta posible confusión junto al uso de símbolos griegos como el Sol de Vergina (una estrella de 16 puntas) en la bandera de Macedonia ha dificultado el relacionamiento entre ambos países, haciendo que Grecia presione de manera diplomática a su vecino del norte para que cambie su nombre y símbolos mediante negarse a reconocer su independencia o la posibilidad de ingresar a la ONU o la Comunidad Europea.
Durante 1992, con la Guerra de Bosnia como trasfondo, el Banco Mundial y la Conferencia Internacional para Yugoslavia utilizaron el nombre “Antigua República Yugoslava de Macedonia” para referirse a dicho país. Luego a principios de 1993 se propone el uso de ese nombre en el Consejo de Seguridad de la ONU para permitir el ingreso de la ex república Yugoslava, lo que fue enérgicamente rechazado por ambos países, aunque por motivos distintos.
Este conflicto ha generado rédito político en distintos partidos políticos nacionalistas de ambos países al agitar y realizar movilizaciones en base a reclamar el término “Macedonia”, llegando al punto de ataques entre las diásporas en Australia. Aunque el momento más tenso entre los dos países fue en febrero de 1994 cuando Grecia realizó un bloqueo económico al país balcánico, esto sumado al entonces embargo a la República Federal Yugoslava, dejó a Macedonia del Norte “cerrada”, impidiendo el acceso al puerto más cercano en Salónica. Las pérdidas económicas se estimaron en 2 mil millones de dólares a Macedonia del Norte hasta el levantamiento del bloqueo en octubre 1995.
Solo a partir de 2017 se abordaría a una solución con la llegada al poder en Macedonia del Norte de la Unión Democrática y Social de Macedonia junto a la Unión Democrática por la Integración con Zoran Zaev como Primer Ministro y en Grecia con el partido de izquierdas Syriza, con Alexis Tsipras como primer ministro. Las relaciones entre ambos países no hacían más que crecer con un nuevo punto alto en junio de 2018 cuando los ministros de Relaciones Exteriores de ambos países firmaron el acuerdo de Prespa, en el lago del mismo nombre que se sitúa entre Macedonia, Albania y Grecia.
En un ambiente de camaradería, Zaev se sacó su corbata y se la ofreció a Tsipras. Entre risas se rubricó un histórico acuerdo por el cual la República de Macedonia pasaría a llamarse República de Macedonia del Norte y sería reconocido el idioma Macedonio en las Naciones Unidas como parte de los idiomas eslavos del sur.
Una larga lucha diplomática llegaría a su fin luego del referéndum de septiembre de 2018 en el cual un 94% votó a favor del acuerdo y la integración de Macedonia del Norte a la Unión Europea y la OTAN. Este referéndum no era vinculante e incluía cambios constitucionales y tuvo que ser ratificado por dos tercios de la asamblea general en octubre de 2018. Por su parte en Grecia el parlamento también lo aprobó y el Primer Ministro Normacedonio Zoran Zaev felicitó a su contraparte griega: “Junto a nuestros pueblos hemos logrado una victoria histórica. ¡Por una paz y progreso eternos en los Balcanes y en Europa!” A su vez, fuera del parlamento en Atenas, miles de personas se reunieron con banderas y gritaban “traidores” a los parlamentarios como protesta al acuerdo.
En Grecia 6 de cada 10 griegos está en contra del tratado por creerlo un “robo histórico” de su identidad como nación. También en Skopje se han manifestado en contra en los recientes meses. “Macedonia y Grecia están ganando y perdiendo algo, pero finalmente es por el bien de las dos partes,” afirmaba Gjorgji Filipov, diplomático en Skopje. Este acuerdo promovió mayor cooperación en varias áreas como la crisis de refugiados y la mejora de lazos económicos al reanudar los vuelos entre Atenas y Skopje luego de 12 años interrumpidos debido a que el mayor aeropuerto de Macedonia fue nombrado “Alejandro Magno” y ahora se llama “Aeropuerto Internacional de Skopje”.
Junto a estos grandes avances, se dio la histórica visita del Primer Ministro de Grecia, Alexis Tsipras, junto a varios ministros y más de 100 empresarios a la capital de Macedonia del Norte, Skopje, para participar de foros y acuerdos que incluyen aspectos como la seguridad nacional, infraestructura, logística y combustibles. Esta es la primera vez que un Mandatario Griego visita Macedonia del Norte, con Tsipras afirmando: “Hemos perdido mucho tiempo. Debemos apurarnos, hemos perdido 30 años (por la disputa del nombre) así que ahora debemos superar las brechas entre nosotros”.
De manera conjunta se anunció la apertura de un nuevo paso de frontera cerca de la ciudad Normacedonia de Kavadarci, que se sumará al recientemente paso fronterizo que reconectará la región de Prespa, que se extiende a lo largo de los dos países. También de manera conjunta se eliminará el doble impuesto para impulsar el comercio “En los pasados seis meses desde que firmamos el acuerdo, el comercio alcanzó el 20% y estamos cerca de los mil millones de dólares en intercambios comerciales anuales”, afirmó Zaev. La cooperación militar no fue ajena y cuando Macedonia del Norte sea parte plena de la OTAN, Grecia protegerá su espacio aéreo con sus aviones, “siendo esto otro signo de confianza mutua”, manifestó el premier Normacedonio.
Luego de casi tres décadas de conflicto, se ha logrado anteponer la paz y la cooperación, dejando el camino abierto para mayores proyectos en conjunto.
Perdió Syriza; Mitsotakis es el nuevo primer ministro de Grecia
Las elecciones parlamentarias del pasado domingo en Grecia han dejado como vencedor al partido de centro derecha Nueva Democracia con 39,7% de los votos. Los conservadores liderados por Kyriakos Mitsotakis han logrado la mayoría parlamentaria, venciendo al partido de izquierdas Syriza, agrupación del Primer Ministro saliente, Alexis Tsipras, que obtuvo 31,5% de los votos. Su caída electoral se debió al voto castigo de la población, acusándolo por los constantes ajustes económicos que Grecia viene padeciendo tras la crisis. Esto junto al acuerdo de cambio de nombre entre Grecia y Macedonia del Norte son las principales razones por la cual el electorado griego ha dado mayoría parlamentaria al partido Nueva Democracia. Mitsotakis tiene muchos desafíos por delante en un país donde la economía ocupa el primer puesto de los temas que afectan a sus ciudadanos y planea “aliviar la carga económica” a las clases medias.
Otro resultado que dejó las elecciones fue la caída de la agrupación Amanecer Dorado, la cual ha quedado fuera del parlamento al no llegar al mínimo establecido de 3% para conseguir un escaño. De ser el tercer partido más votado con 7% en las elecciones de 2012 hasta este hundimiento de 2,9%, Amanecer Dorado ve difícil su continuidad también debido al juicio por homicidio del rapero Pavlos Fissas y que varios miembros de dicha agrupación están involucrados como autores materiales.