Lo que comenzó como una intención de poner impuestos a las llamadas de Whatsapp, Facebook y Telegram terminó siendo la gota que colmó el vaso y desencadenó manifestaciones masivas en un país multicultural. Esta medida fue un intento desesperado por parte del gobierno para poder bajar la enorme deuda pública que tiene el Líbano, que actualmente representa el 150% del Producto Bruto Interno. El pago de la deuda asfixia las arcas estatales y también los continuos conflictos militares en su país han generado una presión importante a la economía, lo cual sumado a las denuncias de corrupción de algunos gobernantes dio lugar a un cóctel perfecto.
En el inicio de la semana, luego que las protestas se tornaron violentas y hubo choques entre manifestantes y partidarios de los grupos chiitas Hezbollah y Amal, el primer ministro Saad al Hariri renunció a su cargo. En un discurso televisado, Hariri se dirigió a la población afirmando que “he llegado a un callejón sin salida” y sostuvo que “por 13 días el pueblo libanés ha esperado una solución política que frene el deterioro de la economía. Lo he intentado, durante este período, buscar una salida que escuche la voz de la gente”.
Luego de dos mandatos y un intento de renuncia que involucraba la guerra proxy en el Líbano entre Irán y Arabia Saudita, el saliente primer ministro debe esperar los comentarios del Presidente Michel Aoun ya que, si la renuncia es aceptada, la constitución del país requiere que Hariri se mantenga en el cargo hasta que se establezca un nuevo gobierno.
Según las declaraciones del entonces ministro de Trabajo, Mohammed Kabbara “el desempleo en el Líbano es de 25% y el desempleo juvenil oscila entre 25 y 37%”
Las autoridades han intentado calmar las protestas con un paquete de reformas económicas que incluyen el recorte de los sueldos de los jerarcas estatales, pero hasta ahora esas medidas no han surtido efecto alguno en los manifestantes. El sector financiero hace nueve días que está cerrado y el presidente del Banco Central del Líbano, Riad Salameh dijo el lunes pasado que “no habrá controles financieros o cepos cambiarios” cuando los bancos vuelvan a funcionar. Esto ha chocado con la decisión del fiscal Ghassan Oueidat que prohibió a prestamistas y casas de cambio sacar importantes cantidades de efectivo del país. La orden será hasta “que el banco central determine un nuevo mecanismo para regular dichas transferencias”. Esta medida se adoptó para evitar una corrida bancaria en el momento que vuelvan a abrir las instituciones financieras, ya que no parecen cesar las manifestaciones y aún no se logran medidas que cumplan las demandas insatisfechas.
Respecto al empleo, según las declaraciones del entonces ministro de Trabajo, Mohammed Kabbara “el desempleo en el Líbano es de 25% y el desempleo juvenil oscila entre 25 y 37%”. “Tenemos aproximadamente entre 30.000 y 35.000 jóvenes que se gradúan de la Universidad cada año y solo se ofrecen 5.000 trabajos anualmente, lo que deja a 30.000 jóvenes sin empleo”, agregó. Aunque las protestas han sido realizadas de manera espontánea y sin respaldo religioso, el crisol de culturas que tiene el Líbano da lugar a un gobierno compuesto por los distintos grupos que habitan al país, sosteniendo una frágil paz alimentada por cuotas de poder.
América del Norte
Canadá: Trudeau vuelve a ganar las elecciones y gobierna en minoría
El primer ministro y líder del Partido Liberal, Justin Trudeau logró su reelección en las elecciones parlamentarias de la semana pasada. Su partido obtuvo 157 escaños, marcando un descenso de 27 legisladores en comparación a los comicios pasados, lo cual le impide volver a tener mayoría parlamentaria. Esto obliga a Trudeau a gobernar en minoría mientras debe afrontar el aumento de votación del Partido Conservador y el ascenso del partido separatista Bloc Québécois, el cual obtuvo 32 parlamentarios. Este partido busca la independencia de la provincia de mayoría franco parlante de Quebec.
Europa
Reino Unido: la Unión Europea aprueba otra extensión para el Brexit
El Consejo Europeo determinó el pasado lunes extender otra prórroga para la salida de Reino Unido debido a la imposibilidad de que el acuerdo UE-Reino Unido fuese aprobado en el parlamento de dicho país. La antigua fecha límite, del 31 de octubre, es reemplazada por el 31 de enero de 2020. Mientras tanto el primer ministro, Boris Johnson, no renunciará a su cargo y busca convocar a elecciones parlamentarias, en búsqueda de obtener una nueva mayoría que respalde el acuerdo. Johnson dijo en un comunicado para la cámara baja del parlamento que “Recomienda a Su Majestad, la Reina, proponer el 12 de diciembre como fecha para las elecciones. Esto significa que el Parlamento debe disolverse luego de la medianoche del 6 de noviembre”. Por su parte la primera ministra escocesa, Nicola Sturgeon afirmó que “las elecciones podrán forzar a Johnson a explicar su fracaso del Brexit a sus votantes”. Mientras tanto Escocia sigue adelante su campaña por su segundo referéndum de independencia y el pasado fin de semana hubo un acto masivo al aire libre en Glasgow.
Asia
India: política de dos hijos causa tensiones con la comunidad musulmana
Siendo el segundo país más poblado del mundo, India enfrenta serios desafíos para satisfacer las necesidades básicas de todos sus ciudadanos y el primer ministro indio, Narendra Modi ya ha expresado su preocupación por el aumento poblacional, lo que ha derivado en implementar una política de “dos hijos” por familia. La legislación implica la prohibición a postularse a cargos públicos a personas que tengan más de dos hijos. Varios estados de ese país la han adoptado y luego de que fuera aplicada esa política en el estado de Assam, el líder del Frente Democrático Unido de India, Badruddin Ajmal ha declarado que “los musulmanes no escucharán a nadie y continuarán produciendo hijos”. Acusando discriminación religiosa, Ajmal afirmó que “solo el 2% de los musulmanes obtienen empleos estatales “y “el gobierno busca con esta ley impedir el acceso al trabajo a los musulmanes”. Actualmente la población musulmana en India es más de 180 millones de personas.