Ghigliani las sin razones del corazón
Me refiero al artículo publicado en La Mañana el 29/4, “Ghigliani las sin razones del corazón”, como sobrino nieto, me gustaría agregar algunas cosas:
No nació en Buenos Aires sino en Colonia Helvecia Provincia de Santa Fe. Él y su hermana mayor (mi abuela) Ana, quedaron huérfanos a los 6 y 3 años, 1886, fueron recogidos por un tío en Buenos Aires (Ghigliani), y luego traídos a Montevideo por la familia materna Calcagno.
Fue médico cirujano, ejerciendo (poco es verdad), en la calle Sierra (hoy Fdez Crespo) 1734, domicilio de mi abuela. Fue además fundador del Comité Olímpico Uruguayo y propulsor de la ida a las olimpiadas del 24, (fue su amigo Atilio Narancio). También el computo actual de las elecciones de cada cámara, la ley de resto, jurisdicción nacional y departamental fue una elucubración propuesta por él en el Parlamento.
Podría ser considerado un hiperactivo, era una mente brillante o un loco radical, un propulsor y un trabajador incansable.
Su esposa, padecía epilepsia, y falleció en un ataque propio de la enfermedad. Todo su matrimonio fue en este sentido trágico y penoso por no poder concebir. Fue además de los primeros pobladores de Malvín (como veraneante en la casa de la calle Delicias). En su juventud, fue amigo de Herrera, distanciándose después, no negaba su origen blanco.
La unión de los hermanos fue muy grande, el afecto con los 7 sobrinos hijos de su hermana era muy significativo para una afectividad controvertida en lo marital.
Duelos formales anteriores pueden ser dos, pero muchas veces los duelos no trascendían, aunque si se sabía quiénes aceptaban lances caballerescos y quienes se amparaban en argumentos filosóficos o religiosos para no aceptarlos. En el caso de Pancho (como se lo llamaba en la familia) hubo por lo menos 7 duelos más a los dos formalizados. Y el caso del tristemente dictador Demicheli supongo que descontaba la imposibilidad del duelo formal. Y allá se lanzó. Luego, no fue detenido sino que se entregó en el cuartel de Bomberos (él había sido ministro del Interior en 1933).
Autor del slogan “Amansarse para vivir o rebelarse y morir” como advertencia particular contra los colorados y otros que se opusieron al golpe de 1933, (crimen de Grauert), le generaron enemigos varios, que habría que haber investigado aquel noviembre de 1936 para que la familia confirmara si fue homicidio o suicidio.
Mi abuelo (Campomar) esposo de Ana, padecía desde fines de 1935, cáncer de próstata y renal; en estado crítico desde fines de Setiembre. Como hermano, y tío de los hijos que vivían con su hermana (de 12 a 19 años) Pancho asumió la responsabilidad de la familia, en octubre mi abuelo le dio un poder amplio de representación, cuando su fin era inminente. El 10 de noviembre, en las condiciones que Paseyro cuenta, fallece Pancho, mi abuelo fallece 20 días después. No parece lógico un suicidio para una personalidad como la de Ghigliani. La alemana, como se le decía en el entorno familiar, nunca hizo contacto con la familia, se supo que se radicó en Paysandú donde rehizo su vida y falleció en Toronto, Canadá en 2011.
Atentamente,
Cr. Jorge Bergalli
1.220.297-7
Nota de la Redacción:
Con la autoridad que le concede el parentesco, el Cr. Jorge Bergalli, agrega valiosas precisiones al artículo “Ghigliani las sin razones del corazón” de Guillermo Silva Grucci, quien semana a semana aporta su valiosa colaboración para evocar en forma amena y periodística, algún episodio de nuestra historia.
Sobre una figura tan controvertida como Francisco Ghigliani, si debieramos emitir una valoración histórica.
Merece que se exhiban los claros oscuros que configuran esa personalidad apasionada, con ribetes shakesperianos. Bástenos destacar el brillo de su inteligencia política puesta al servicio de la reforma social de José Batlle y Ordóñez, que con lealtad lo acompañó hasta el final de su vida. Y tampoco omitir su talento como periodista que lo llevó a ejercer la dirección de El Día y luego a fundar el diario El Pueblo.
Con respecto a la figura del Dr. Alberto Demicheli, el otro protagonista de la tragedia de Ghigliani, es importante señalar que luego de acceder a la Primera Magistratura el 12 de junio de 1976, renunció prácticamente a ella a los 70 días, por negarse a firmar una lista de proscripciones políticas que endurecían aún más el proceso dictatorial.
Crónicas marxianas
“Me horrorizó recordar cómo pensaba de joven”, dice el filósofo Antonio Escohotado. “No me explicaba mi antigua fe en la utopía, mi total desprecio por la realidad. Llegué a la conclusión de que yo entonces no le daba valor a mi vida, así que quería arriesgarla y, lo peor de todo, también estaba dispuesto a arriesgar las vidas de los demás. Me pregunto cómo es posible que tuviera tan poco respeto por los seres humanos”.
La estrategia del comunismo es matar de hambre a sus ciudadanos, para darles luego una cartilla de racionamiento y que sepan a quién deben estar agradecidos; luego, trocan agradecimiento por idolatría militarmente controlada. Hay una parte de seres humanos, que se desprenden de esa condición; son capaces de fagocitar a sus congéneres con tal de imponerles sus condiciones. En “Archipiélago Gulag” el escritor ruso Aleksandr Solzhenistsyn denunció el sistema de represión política en la extinta URSS.
Parte de su propia experiencia y más de dos centenares de testimonios orales de aquellos compañeros de campos de concentración, prisión, trabajo y «reeducación» (GULAG). El texto estuvo en secreto hasta agosto del 1973; una copia del manuscrito cayó en manos de la policía secreta, la KGB. La portadora del texto, Yelizaveta Voroniánskaya, secretaria del autor, se ahorcó en su piso en Moscú tras haber sido torturada en un interrogatorio «víctima del miedo al Gulag», según palabras de Solzhenitsyn.
La Revolución Soviética, en setenta años de terror, dejó el mayor aparato de represión y propaganda jamás imaginado por el hombre.
La mentira ideológica arranca en el Manifiesto Comunista, que los marxianos redivivos han convertido en la posverdad, con la consigna de que todo es lucha ideológica. La historia es un artificio que escriben los vencedores. La economía, no crece, suma cero; lo que unos ganan otros pierden. La posverdad envuelve y manipula, tergiversa opiniones, luego masificadas desde la comunicación, los informativos; el lenguaje, la cultura, la educación, la familia, la sexualidad, y hasta el nomenclátor. Con cada placa callejera marxiana, se atornilla una versión desfigurada de la historia: la Plaza de la Memoria, la Plaza Huelga General, colocación de monolitos con intención flechada, recuerdo sesgado de “mártires revolucionarios” de la anti democracia.
La praxis marxiana exige continuamente mentir la historia: dialéctica continua, avasallante intolerancia, intransigente exposición del enemigo. Versión marxiana de Gramsci, remodelada en el Foro de San Pablo y ahora en Puebla.
La invasión marxiana al Uruguay ha dejado expuesta, con el nuevo gobierno, la ineptitud dolosa para atender urgencias sociales. El salvajismo con ancianos, con presos, con pobres. Desatención, desmantelamiento y corrupción en ASSE y en el MIDES. Fuga de narcos caminando desde Jefatura. Sorprendente “exportación” de toneladas de “merca”…
El comunismo es el peor monstruo político de todos los tiempos. Tomar conciencia de su dañina condición apátrida, de su decisión de exterminio del sistema social que libremente nos hemos dado desde Artigas, resulta vital para evitarlo.
Vienen por todo. El riesgo es la connivencia condescendiente de quienes contribuyen a alimentarlo.
Nelson Jorge Mosco Castellano
1.246.385-4
Diario de Viaje
Les escribo en referencia al artículo “Visita a un hogar zoroastriano” publicado en La Mañana el 15/4.
¡Que buen artículo! Felicitaciones.
En este tiempo de cuarentena en que se lee mucho, el aporte de Uds. es valioso.
Gracias.
Maria Elizabeth Fernández
La Mañana Aula Virtual
¡Un saludo especial para la redacción de La Mañana!
Maestros de maestros en este tiempo de aula virtual.
Son un gusto las selecciones que nos proveen.
Salud
Horacio C. Vigil Galán
Día de la Madre eran los de antes
Como todos los años, el segundo domingo de mayo se festeja el día de la madre en Uruguay -aunque el dicho dice que el día de la madre es todos los días-. Y ente año se iba festejar el tercer domingo de mayo, el 17.
Este año tan inusual, con la pandemia de Covid-19 afectando al mundo entero, parte de la población está en cuarentena voluntaria, muchos sin trabajar o en el seguro de paro y con la mayoría de los comercios cerrados. La Cámara de Comercio decidió postergar ese día tan preciado para las familias para el 7 de junio. ¿Y por qué? Porque se encuentran cerrados los shopping y gran cantidad de tiendas, que dicho sea de paso han ido retomando movimiento las últimas semanas y especialmente a partir de este lunes pasado.
Lo que nos demuestra que este día tan sagrado que gira en torno a las mamás o a las personas que actuaron como tales, es en definitiva un evento comercial más. De ventas y de compras. Y poco tiene ya de el día afectivo que debiera ser para ser compartido con la familia. Y es como de van desvirtuando las demás fechas que evocan los jalones de nuestra Civilización como Navidad, Año Nuevo, Reyes, Pascua, etc.
Lo cierto es que mucha gente se siente indignada con este cambio. Las mamás no queremos regalos y muchas compras, queremos un saludo, un beso, un abrazo, y en su defecto por las medidas sanitarias, una llamada, o videollamada como se estila ahora.
Esta medida de cambiar el día se tomó el 14 de abril, y a la fecha la situación sigue igual, ¿quién garantiza que para el 7 de junio la situación va a ser mejor que la actual? ¿Se supone que la gente va a querer salir a la calle casi que en tropilla a realizar compras de regalos? Cuando hace casi dos meses que venimos haciendo compras por internet y saliendo solo una persona por grupo familiar. Yo pienso que vamos a seguir en la misma. Y mi opinión es que las familias festejen el día de la madre como siempre fue, en mayo.
Carolina Machado