La Cámara de Comercio Uruguay–Estados Unidos organizó un almuerzo especial en conmemoración de su 85 aniversario, periodo en el que ha trabajado para promover las oportunidades de negocio entre ambos países, fomentar las inversiones y las actividades industriales y de servicios. La institución se define como una organización proactiva que representa a todos los sectores y que busca impactar de forma positiva en la comunidad, la sociedad y el gobierno, promoviendo las mejores prácticas del gobierno corporativo.
La ocasión contó con la participación de autoridades nacionales, diplomáticas y empresariales y tuvo como orador principal al flamante embajador de Estados Unidos en Uruguay, Kenneth S. George, quien prestó juramento para asumir su actual cargo el pasado 2 de setiembre.
“Todos los uruguayos deben y merecen estar muy orgullosos de su país, porque Uruguay es realmente una luz y un faro para América Latina y el mundo”
George fue subsecretario adjunto y director general del Servicio Comercial de los Estados Unidos en el Departamento de Comercio entre los años 1981 y 1985. Además, fue representante estatal en la Cámara de Representantes de Texas, entre 1999 y 2003, y ha participado en varias juntas directivas. En lo que respecta al ámbito empresarial, destaca su paso como presidente y director de múltiples empresas públicas y privadas.
Durante su oratoria, el embajador transmitió un mensaje a los uruguayos respecto a la democracia de nuestro país, luego de las pasadas elecciones nacionales. En este sentido, dijo: “Todos los uruguayos deben y merecen estar muy orgullosos de su país, porque Uruguay es realmente una luz y un faro para América Latina y el mundo”.
El diplomático agregó que nuestro país ha demostrado tener elecciones justas y libres en un ambiente de paz. Comparó esta situación con la de otros países del mundo, incluso de América Latina, sobre los cuales opinó que en ellos se han producido ideologías totalitarias con el apoyo de gobiernos que no toleran la multitud de partidos políticos. “Uruguay, sin embargo, permite elegir los líderes que los ciudadanos sienten son los mejores para ellos”, afirmó.
No tan distintos
El diplomático también se refirió al liderazgo y enfatizó que este no llega por un título o un puesto. “Los líderes y el liderazgo realmente se inician con autogestión, algo que requiere trabajo y compromiso”, aseguró.
Igualmente, mencionó que no es el tamaño lo que hace que una empresa sea buena –como en el caso de un país- sino que lo que define siempre es la gente, los valores y los ideales, parámetros en que coinciden Estados Unidos y Uruguay. “Los valores y los ideales que tiene Uruguay y Estados Unidos es lo que los une en común. Ambos tienen un compromiso con la libertad, la justicia, los derechos humanos y la democracia”, aseveró.
En esta línea, señaló que tanto la Cámara como la Embajada trabajarán para facilitar los esfuerzos, expandir los negocios, mejorar las ganancias y la economía. “Como emprendedor y embajador, con una nueva oficina dedicada a fomentar el comercio, les puedo asegurar que Estados Unidos está abierto para el negocio en Uruguay”, expresó.
La oficina involucrará al gobierno uruguayo y al sector privado, trabajando en la presentación de negocios, mientras que las compañías norteamericanas aportarán su know-how, desarrollo tecnológico y los altos estándares en la práctica empresarial. En esta labor, la Cámara Nacional de Comercios y Servicios del Uruguay también será contemplada para trabajar sobre las relaciones entre ambos países, indicó.
“Las Cámaras han tomado un liderazgo como la voz empresarial. Estamos abiertos para escuchar sus inquietudes”, sumó. Pero, por otro lado, Uruguay tiene una trayectoria en lo que es la exportación de servicios, dado que el 65% del software realizado en nuestro país se vende al gigante del norte, y hay iniciativas con empresas como Sabre.
La oportunidad de sus vidas
Por último, para cerrar su oratoria, el embajador se refirió a los empresarios presentes en el nuevo contexto político del país. “Ahora mismo ustedes tienen la oportunidad y la obligación como líderes de negocios de hablar y ayudar al gobierno y a sus ciudadanos para que puedan comprender y apreciar sus necesidades para tener éxito en las industrias y las empresas”, expresó.
“La empresa, las ganancias y el buen vino hay que dejarlos madurar para disfrutarlos”
En su rol de empresario, el Embajador mencionó que el los uruguayos “pueden tener la oportunidad de sus vidas” y observó que se ha realizado un cambio de liderazgo generacional. “Ustedes pueden dejar que esto simplemente ocurra o tomar un rol de liderazgo y empezar a darle forma al futuro, dando la oportunidad de ayudar a que la economía crezca, porque las empresas son trabajo y son la economía en sí”.
Por último, George mencionó que los empresarios pueden hacer que los sueños de los niños se vuelvan realidad con las políticas gubernamentales correctas, ayudando al país a continuar trabajando. “Consideren su rol como individuos y ciudadanos para dar empleos para el futuro, pero consideren un liderazgo donde sean ustedes mismos”, concluyó.
El retorno
George rememoró su visita a nuestro país hace 38 años como director general del Departamento de Comercio del presidente Ronald Reagan. “Yo trabajaba con él, generamos una promoción y una agencia de facilitación para las empresas”, recordó. Añadió que en ese momento contaban con oficinas de Comercio Exterior en 124 ciudades y que en aquel entonces tenían por primera vez vínculos directos entre el mercado internacional de Estados Unidos y sus socios.
Añadió que hoy se encuentran en 75 países brindando consejos a empresas y empresarios que quieran trabajar con este país. Agregó que en ese tiempo el congreso de Estados Unidos realizó una ley de comercio en el año 1979 que luego resultó en la creación del Servicio de Comercio Exterior, en el cual tuvo participación.
“Para mí esto es una vuelta a Uruguay. Me siento, literalmente, uno de ustedes en espíritu”, confesó. En esta línea, señaló que ha sido un empresario y un emprendedor la mayor parte de su vida. “La empresa, las ganancias y el buen vino hay que dejarlo madurar para disfrutarlo”, ilustró.
El diplomático explicó que ha creado más de 40 empresas, desde cinco empleados a quince mil, y ha llegado a lograr casi mil millones de dólares en ganancias. Esta mezcla de negocios internacionales y experiencia de gobierno, ha marcado de alguna manera su forma de ver el mundo en el rol que hoy ocupa como Embajador.