El proyecto de condonar las deudas a un grupo de ahorristas del Banco Hipotecario (BHU) tiene como condición que esa institución se fusione con el Banco República (BROU).
Así lo señala el documento oficial elevado por el Gobierno a los partidos de la coalición y al cual tuvo acceso La Mañana. El BHU puede condonar deudas por sí mismo, pero la fusión entre dos bancos estatales necesita mayorías especiales en el Parlamento, que solo se podría lograr con los votos de la oposición, o sea el Frente Amplio.
El proyecto del Ejecutivo se titula “Reestructura de deudores en UR e integración BHU y BROU” y en su introducción señala datos sobre la cantidad de créditos que en Unidades Reajustables tiene el BHU y la Agencia Nacional de Vivienda. Entre todos suman más de US$ 900 millones y los más antiguos son de 1970.
Se explica que “el problema consiste en que hay deudores que han contraído sus deudas en UR hace varios años y tienen problemas de solvencia financiera porque su endeudamiento actual es muy alto en relación al valor de su casa”.
“El problema fundamental detrás de esta situación han sido las sucesivas refinanciaciones y postergaciones (colgamentos) en el pago de los créditos, que redundaron en plazos muy largos para amortizar el capital adeudado. Al restructurar y reducir la cuota mensual, los plazos de pago se alargan y se extiende la fecha de finalización del crédito (con el consiguiente aumento del total de intereses abonados durante la vida del préstamo)”, se agrega.
Para explicar aún más la situación de estos deudores se señala que “una persona reestructura varias veces o muy temprano en la vida del crédito, posiblemente se jubile sin haber cancelado el mismo. Esto la expone a una reducción en escalón de sus ingresos. A ello se suma que, en ciertos períodos específicos (por ejemplo, con el retorno de la democracia en 1985 o la inestabilidad macro de 1990-1991), la UR evolucionó muy por encima de la inflación, lo que hizo más oneroso la situación de endeudamiento”.
Qué propone el proyecto
Un segundo capítulo, denominado “Racionalidad de la propuesta”, plantea los caminos que se buscan con el proyecto. El primero es “ofrecer al deudor en UR una fecha cierta y más acotada para que se convierta en propietario, tal que no exceda los 40 años en total desde la fecha de originación del crédito. A partir de la promulgación de la ley, se propone condonar el capital de deuda existente (e intereses futuros) para todos créditos con una antigüedad de 40 años o más. Este criterio se mantiene todos los años, de manera que ningún crédito se pague por más de 40 años”.
También se plantea “otorgar una bonificación de la tasa de interés según antigüedad del crédito. En la medida que se reduzca la tasa a pagar y se mantenga incambiada la cuota mensual, la persona se convierte en propietario más temprano. Las tasas en UR serían las siguientes, crédito otorgado: hace más de 30 años, 0%; entre 20 y 30 años, 2%; menos de 20 años, 3,5%.
Se agrega que esta propuesta “nos lleva a recomendar la fusión del BHU con el BROU con el mantenimiento de toda la plantilla de funcionarios y sus derechos adquiridos. Además de la tendencia mundial a que no existan más bancos exclusivamente hipotecarios, entendemos que hay varios beneficios para realizar la fusión de ambas instituciones”.
Esto debido a que “desde el punto de vista del BHU, la operación anterior implica un impacto financiero dado por la pérdida de capital por la condonación de deuda (disminución patrimonial) más el flujo de intereses futuros que no serán percibidos, por un total de US$ 277 millones. El impacto de esta pérdida en el banco será menor si el banco es parte de una institución con mayor patrimonio, con créditos más diversificados (no solo hipotecarios), con mayores posibilidades de negocios”.
“La consolidación de ambas instituciones mostraría un balance mucho más robusto. El nuevo patrimonio sería de US$ 3000 millones, casi el requerido por las normas de patrimonio del BCU. La nueva cartera de créditos será de más de US$ 7000 millones, que además tendrá una mucha mayor diversificación, mejorando el riesgo en general del banco. Actualmente, dentro de los créditos del BROU, el 68% es crédito a familias al consumo y al agro. Al consolidar, los créditos hipotecarios serán un 20% de la cartera y por consiguiente el consumo y el agro representarán el 54% de los créditos reduciendo las vulnerabilidades”, indica el documento.
Se agrega que “la gestión de la liquidez también será potenciada al poder utilizar de forma más eficiente la importante liquidez que hoy tiene el BROU. Desde el punto de vista operativo para ambas instituciones, la fusión genera eficiencias operativas en la unificación de roles y gerencias en diferentes niveles, así como también en la consolidación de edificios y gastos proyectados”.
Finalmente se hacen consideraciones sobre la situación del BHU indicando que ha perdido peso en el mercado, mientras que “desde el punto de vista de la sociedad en su conjunto, una institución única permite una mejor asignación de recursos, siendo más eficiente con el capital de los bancos públicos y por lo tanto un mayor retorno de ese patrimonio. En definitiva, esta fusión consiste en una verdadera reforma del Estado que dará mejores resultados para los uruguayos”. Finalmente, se señala que “es fundamental que la reestructura de deudas en UR y la fusión ocurran simultáneamente, porque de lo contrario el impacto negativo en el BHU será mayor a nivel de su balance”.
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